<

NÚMEROS 13

>
13
En Cadés y su entorno (13,1–20,13)
Exploración de la tierra de Canaán
1Y el Señor se dirigió a Moisés y le dijo:#Dt 1,22-28.
2—Envía hombres, uno por cada tribu paterna y que tenga la condición de jefe, para que exploren la tierra de Canaán que yo voy a dar al pueblo de Israel.
3Así lo hizo Moisés: conforme al mandato del Señor, envió desde el desierto de Parán a exploradores, todos ellos jefes entre los israelitas, 4y cuyos nombres eran:
De la tribu de Rubén: Samúa, hijo de Zacur. 5De la tribu de Simeón: Safat, hijo de Jorí. 6De la tribu de Judá: Caleb, hijo de Jefuné. 7De la tribu de Isacar: Igal, hijo de José. 8De la tribu de Efraín: Oseas, hijo de Nun. 9De la tribu de Benjamín: Paltí, hijo de Rafú. 10De la tribu de Zabulón: Gadiel, hijo de Sodí. 11De la tribu de Manasés —por la tribu de José—: Gadí, hijo de Susí. 12De la tribu de Dan: Amiel, hijo de Guemalí. 13De la tribu de Aser: Setur, hijo de Micael. 14De la tribu de Neftalí, Najbi, hijo de Vapsí. 15De la tribu de Gad: Gueuel, hijo de Maquí.
16Estos son los nombres de los que Moisés envió a explorar la tierra. A Oseas, hijo de Nun, Moisés le cambió el nombre y le puso por nombre Josué.#11,28. 17Al enviarlos a explorar la tierra de Canaán, les dijo Moisés:
—Suban por el Négueb, lleguen a la zona montañosa, 18y observen qué tipo de tierra es; vean si el pueblo que la habita es fuerte o débil, si son pocos o muchos, 19si la tierra que habitan es buena o mala; comprueben si sus ciudades están o no están amuralladas, 20si su terreno es fértil o baldío, si tiene o no tiene árboles. Pórtense valerosamente y traigan algún fruto del país.
Era el tiempo de las primeras uvas. 21Subieron los exploradores y recorrieron la tierra desde el desierto de Sin hasta Rejob, en Lebó-Jamat. 22Remontaron el Négueb y llegaron hasta Hebrón, donde vivían Ajimán, Sesay y Talmay, del clan de los anaquitas. (Hebrón había sido fundada siete años antes que lo fuera Soán en Egipto). 23Llegaron hasta el valle de Escol y allí cortaron un sarmiento con un racimo de uvas que, valiéndose de un palo, tenían que llevar entre dos; recogieron también algunas granadas e higos. 24Y se llamó aquel lugar valle de Escol, por el racimo que allí cortaron los israelitas.
El informe de los exploradores
25Al término de los cuarenta días concluyeron la exploración de la tierra. 26Se dirigieron directamente a Moisés y a Aarón, y a toda la comunidad israelita que acampaba en Cadés —en el desierto de Parán—, les dieron cuenta de la misión realizada y les mostraron los frutos de la tierra. 27Esto es lo que les dijeron:
—Hemos recorrido la tierra a la que nos enviaste, una tierra que ciertamente mana leche y miel; y estos son sus frutos.#16,13-14; Ex 3,8; Dt 6,3; 11,9; etc. 28Sin embargo, el pueblo que habita esa tierra es fuerte, y sus ciudades son grandes y fortificadas; además hemos visto allí a descendientes de Anac. 29Los amalecitas habitan en el Négueb; los hititas, los jebuseos y los amorreos habitan en la montaña; los cananeos, por su parte, ocupan la franja costera y la ribera del Jordán.
30Entonces Caleb impuso silencio al pueblo en presencia de Moisés y dijo:
—Subamos con decisión y apoderémonos de esa tierra, pues somos más poderosos que ellos.
31Pero los hombres que habían subido con Caleb le replicaron:
—No podremos vencer a ese pueblo, porque es más fuerte que nosotros.
32Y difundieron entre los israelitas falsos informes acerca de la tierra que habían explorado, diciéndoles:
—La tierra que hemos recorrido y explorado es una tierra que devora a sus habitantes. Toda la gente que vimos en ella es de gran estatura; 33también vimos allí nefilitas (los descendientes de Anac provienen de los nefilitas). Nosotros, a su lado, teníamos la impresión de ser como saltamontes, y eso mismo les parecíamos a ellos.

Desde el inicio de los tiempos Dios se comunica con nosotros. Para ello la sagrada Biblia es un vehículo muy poderoso, ya que es la palabra del Señor plasmada en negro sobre blanco. Como ya sabrás, existen varias versiones de las Sagradas Escrituras, hechas en pos de una mejor comprensión de la palabra del Señor. En la versión 'La Palabra versión hispanoamericana' encontramos que el capítulo 13 del Números se nos muestra de la forma que podemos ver a continuación.

El libro Números de la Biblia tiene 36 capítulos. Y en el capítulo 13 podemos encontrar 33 versículos, en los que Dios nos revela sus enseñanzas y nos indica a través de su inmensa sabiduría, amor y bondad, la forma en la que debemos obrar y acercarnos a Él.

No nos cabe duda de que leyendo el capítulo 13 del libro Números de la versión 'La Palabra versión hispanoamericana' de la Sagrada Biblia te será fácil comprender como nuestro amado Padre nunca nos deja solos, y que en los textos que dejó para nosotros es posible hallar todas las respuestas que necesitamos. Recuerda que siempre puedes leer el capítulo 13 en alguna de las otras versiones de la Biblia que tenemos para ti, aunque es un ejercicio muy interesante que hayas optado por leer ahora el capítulo 13 de la versión 'La Palabra versión hispanoamericana' de la Santa Biblia.