59
Confesión de la maldad de Israel
1He aquí, no se ha acortado la mano del Señor para salvar;
ni se ha endurecido su oído para oír.
2Pero vuestras iniquidades han hecho separación entre vosotros y vuestro Dios,
y vuestros pecados le han hecho esconder su rostro de vosotros para no escucharos.
3Porque vuestras manos están manchadas de sangre,
y vuestros dedos de iniquidad;
vuestros labios hablan mentira,
vuestra lengua murmura maldad.
4No hay quien clame con justicia ni quien abogue con honestidad.
Confían en la confusión, y hablan falsedades;
conciben malicia, y dan a luz iniquidad.
5Incuban huevos de áspides y tejen telas de araña;
el que come de sus huevos muere,
y del que es aplastado sale una víbora.
6Sus telas no servirán de vestidos,
ni se cubrirán con sus obras;
sus obras son obras de iniquidad,
y actos de violencia hay en sus manos.
7Sus pies corren al mal,
y se apresuran a derramar sangre inocente;
sus pensamientos son pensamientos de iniquidad,
desolación y destrucción hay en sus caminos.
8Camino de paz no conocen,
y no hay justicia en sus senderos;
han torcido a su favor las sendas,
cualquiera que ande en ellas no conoce la paz.
9Por tanto el derecho está lejos de nosotros,
y no nos alcanza la justicia;
esperamos luz, y he aquí tinieblas,
claridad, pero andamos en oscuridad.
10Vamos palpando la pared como ciegos,
y andamos a tientas como los que no tienen ojos;
tropezamos al mediodía como al anochecer,
entre los robustos somos como muertos.
11Todos nosotros gruñimos como osos,
y gemimos tristemente como palomas;
esperamos la justicia, pero no la hay,
la salvación, pero está lejos de nosotros.
12Porque se han multiplicado nuestras transgresiones delante de ti,
y nuestros pecados testifican contra nosotros;
porque nuestras transgresiones están con nosotros,
y conocemos nuestras iniquidades:
13transgredir y negar al Señor,
apartarse de nuestro Dios,
hablar de opresión y rebelión,
concebir y proferir en el corazón palabras mentirosas.
14Se ha vuelto atrás el derecho,
y la justicia permanece lejos;
porque ha tropezado en la plaza la verdad,
y la rectitud no puede entrar.
15Sí, falta la verdad,
y el que se aparta del mal es hecho presa.
Y lo vio el Señor,
y desagradó a sus ojos que no hubiera derecho.
16Vio que no había nadie,
y se asombró de que no hubiera quien intercediera.
Entonces su brazo le trajo salvación,
y su justicia le sostuvo.
17Se puso la justicia como coraza,
y el yelmo de salvación en su cabeza;
como vestidura se puso ropas de venganza,
y se envolvió de celo como de un manto.
18Conforme a los hechos, así Él pagará:
furor para sus adversarios, justo pago para sus enemigos;
a las islas dará su pago.
19Y temerán desde el occidente el nombre del Señor
y desde el nacimiento del sol su gloria,
porque Él vendrá como torrente impetuoso,
que el viento del Señor impele.
20Y vendrá un Redentor a Sión
y a los que en Jacob se aparten de la transgresión —declara el Señor.
21En cuanto a mí —dice el Señor—, este es mi pacto con ellos: Mi Espíritu que está sobre ti, y mis palabras que he puesto en tu boca, no se apartarán de tu boca, ni de la boca de tu descendencia, ni de la boca de la descendencia de tu descendencia —dice el Señor— desde ahora y para siempre.
Desde el inicio de los tiempos Dios se comunica con nosotros. Para ello la sagrada Biblia es un vehículo muy poderoso, ya que es la palabra del Señor plasmada en negro sobre blanco. Como ya sabrás, existen varias versiones de las Sagradas Escrituras, hechas en pos de una mejor comprensión de la palabra del Señor. En la versión 'La Biblia de las Américas' encontramos que el capítulo 59 del Isaías se nos muestra de la forma que podemos ver a continuación.
El libro Isaías de la Biblia tiene 66 capítulos. Y en el capítulo 59 podemos encontrar 21 versículos, en los que Dios nos revela sus enseñanzas y nos indica a través de su inmensa sabiduría, amor y bondad, la forma en la que debemos obrar y acercarnos a Él.
No nos cabe duda de que leyendo el capítulo 59 del libro Isaías de la versión 'La Biblia de las Américas' de la Sagrada Biblia te será fácil comprender como nuestro amado Padre nunca nos deja solos, y que en los textos que dejó para nosotros es posible hallar todas las respuestas que necesitamos. Recuerda que siempre puedes leer el capítulo 59 en alguna de las otras versiones de la Biblia que tenemos para ti, aunque es un ejercicio muy interesante que hayas optado por leer ahora el capítulo 59 de la versión 'La Biblia de las Américas' de la Santa Biblia.