15
Abías, rey de Judá
15:1-2,6-8 – 2Cr 13:1-2,22–14:1
1En el año dieciocho del reinado de Jeroboán hijo de Nabat, Abías ascendió al trono de Judá, 2y reinó en Jerusalén tres años. Su madre era Macá hija de Abisalón.
3Abías cometió todos los pecados que, antes de él, había cometido su padre, pues no siempre fue fiel al Señor su Dios como lo había sido su padre#15:3 pues no siempre … su padre. Lit. pues su corazón no fue perfecto con el Señor su Dios como el corazón de su padre. David. 4No obstante, por consideración a David, el Señor su Dios mantuvo la lámpara de David encendida en Jerusalén, dándole un hijo que lo sucediera, para fortalecer así a Jerusalén. 5Porque David había hecho lo que agrada al Señor, y en toda su vida no había dejado de cumplir ninguno de los mandamientos del Señor, excepto en el caso de Urías el hitita.
6Durante toda la vida de Abías hubo guerra entre la casa de Roboán y la de Jeroboán. 7Los demás acontecimientos del reinado de Abías, y todo lo que hizo, están escritos en el libro de las crónicas de los reyes de Judá. También hubo guerra entre Abías y Jeroboán. 8Y Abías murió y fue sepultado en la Ciudad de David. Y su hijo Asá lo sucedió en el trono.
Asá, rey de Judá
15:9-22 – 2Cr 14:2-3; 15:16–16:6
15:23-24 – 2Cr 16:11–17:1
9En el año veinte de Jeroboán, rey de Israel, Asá ocupó el trono de Judá, 10y reinó en Jerusalén cuarenta y un años. Su abuela#15:10 abuela. Lit. madre; también en v. 13. era Macá hija de Abisalón.
11Asá hizo lo que agrada al Señor, como lo había hecho su antepasado David. 12Expulsó del país a los que practicaban la prostitución sagrada y acabó con todos los ídolos que sus antepasados habían fabricado. 13Hasta destituyó a su abuela Macá de su puesto como reina madre, porque ella se había hecho una escandalosa imagen de la diosa Aserá. Asá derribó la imagen y la quemó en el arroyo de Cedrón. 14Aunque no quitó los santuarios paganos, Asá se mantuvo siempre fiel al Señor.#15:14 Asá se mantuvo siempre fiel al Señor. Lit. el corazón de Asá fue perfecto con el Señor todos sus días. 15Además, llevó al templo del Señor el oro, la plata y los utensilios que él y su padre habían consagrado.
16Durante los reinados de Asá y Basá, rey de Israel, hubo guerra entre ellos. 17Basá, rey de Israel, atacó a Judá y fortificó Ramá para aislar totalmente a Asá, rey de Judá. 18Entonces Asá tomó todo el oro y la plata que habían quedado en los tesoros del templo del Señor y de su propio palacio, y les encargó a sus funcionarios que se los llevaran a Ben Adad, hijo de Tabrimón y nieto de Hezión, rey de Siria, que estaba gobernando en Damasco. Y le envió este mensaje: 19«Hagamos tú y yo un tratado como el que antes hicieron tu padre y el mío. Aquí te envío un presente de oro y plata. Anula tu tratado con Basá, rey de Israel, para que se marche de aquí».
20Ben Adad estuvo de acuerdo con el rey Asá y envió a los jefes de su ejército para que atacaran las ciudades de Israel. Así conquistó Iyón, Dan, Abel Betmacá y todo Quinéret, además de Neftalí. 21Cuando Basá se enteró, dejó de fortificar Ramá y se retiró a Tirsá. 22Entonces el rey Asá movilizó a todo Judá, sin eximir a nadie, y se llevaron de Ramá las piedras y la madera con que Basá había estado fortificando la ciudad. Con ellas el rey Asá fortificó Gueba de Benjamín, y también Mizpa.
23Los demás acontecimientos del reinado de Asá, y todo su poderío y todo lo que hizo, y lo que atañe a las ciudades que edificó, están escritos en el libro de las crónicas de los reyes de Judá. Sin embargo, en su vejez sufrió una enfermedad de los pies. 24Luego Asá murió y fue sepultado con sus antepasados en la Ciudad de David. Y su hijo Josafat lo sucedió en el trono.
Nadab, rey de Israel
25En el segundo año de Asá, rey de Judá, Nadab hijo de Jeroboán ascendió al trono de Israel y reinó allí dos años. 26Pero Nadab hizo lo que ofende al Señor, pues siguió el mal ejemplo de su padre, persistiendo en el mismo pecado con que este hizo pecar a Israel.
27Basá hijo de Ahías, de la tribu de Isacar, conspiró contra Nadab y lo derrotó en la ciudad filistea de Guibetón, a la que Nadab y todo Israel tenían sitiada. 28En el tercer año de Asá, rey de Judá, Basá mató a Nadab y lo sucedió en el trono.
29Tan pronto como comenzó a reinar, Basá mató a toda la familia de Jeroboán. No dejó vivo a ninguno de sus descendientes, sino que los eliminó a todos, según la palabra que el Señor dio a conocer por medio de su siervo Ahías el silonita. 30Esto sucedió a raíz de los pecados que Jeroboán cometió e hizo cometer a los israelitas, con lo que provocó la ira del Señor, Dios de Israel.
31Los demás acontecimientos del reinado de Nadab, y todo lo que hizo, están escritos en el libro de las crónicas de los reyes de Israel. 32Durante los reinados de Asá de Judá y Basá de Israel, hubo guerra entre ellos.
Basá, rey de Israel
33En el tercer año de Asá, rey de Judá, Basá hijo de Ahías ascendió al trono, y durante veinticuatro años reinó en Tirsá sobre todo Israel. 34Basá hizo lo que ofende al Señor, pues siguió el mal ejemplo de Jeroboán, persistiendo en el mismo pecado con que este hizo pecar a Israel.
Desde el inicio de los tiempos Dios se comunica con nosotros. Para ello la sagrada Biblia es un vehículo muy poderoso, ya que es la palabra del Señor plasmada en negro sobre blanco. Como ya sabrás, existen varias versiones de las Sagradas Escrituras, hechas en pos de una mejor comprensión de la palabra del Señor. En la versión 'Nueva Versión Internacional - Español' encontramos que el capítulo 15 del 1 Reyes se nos muestra de la forma que podemos ver a continuación.
El libro 1 Reyes de la Biblia tiene 22 capítulos. Y en el capítulo 15 podemos encontrar 34 versículos, en los que Dios nos revela sus enseñanzas y nos indica a través de su inmensa sabiduría, amor y bondad, la forma en la que debemos obrar y acercarnos a Él.
No nos cabe duda de que leyendo el capítulo 15 del libro 1 Reyes de la versión 'Nueva Versión Internacional - Español' de la Sagrada Biblia te será fácil comprender como nuestro amado Padre nunca nos deja solos, y que en los textos que dejó para nosotros es posible hallar todas las respuestas que necesitamos. Recuerda que siempre puedes leer el capítulo 15 en alguna de las otras versiones de la Biblia que tenemos para ti, aunque es un ejercicio muy interesante que hayas optado por leer ahora el capítulo 15 de la versión 'Nueva Versión Internacional - Español' de la Santa Biblia.