36
Invasión de los asirios
(2 R 18:13-37; 2 Cr 32:1-19)
1Durante el año 14 del reinado de Ezequías, Senaquerib, rey de Asiria, salió a atacar todas las ciudades fortificadas de Judá y las capturó. 2El rey de Asiria mandó desde Laquis a su comandante en jefe, junto con un gran ejército, a Jerusalén para atacar al rey Ezequías. Tomó su posición junto al acueducto del estanque superior en el camino que lleva al Campo del Lavandero. 3Salieron a reunirse con él Eliaquín hijo de Jilquías, que era el administrador del palacio real, el cronista Sebna y Joa hijo de Asaf, que era el secretario. 4El comandante en jefe les dijo:
—Díganle a Ezequías que esto es lo que dice el gran rey, el rey de Asiria:
»¿Por qué estás tan confiado? 5¿Acaso piensas que la guerra se hace tan solo con palabras? ¿En quién te apoyas para rebelarte contra mí? 6Mira, tú estás confiando en esa vara astillada que es Egipto. Si uno se apoya en ella, hiere y traspasa la mano. Eso es lo que es el faraón, rey de Egipto, para todos los que se apoyan en él. 7Si me sales con eso de que “confiamos en el SEÑOR, nuestro Dios”, ¿no es ese el mismo del que Ezequías ordenó quitar los altares y los santuarios de las colinas cuando les dijo a Judá y a Jerusalén: “Ustedes sólo deben adorar frente a este altar”?
8»Ahora, haz un tratado con mi señor, el rey de Asiria. Te daré 2000 caballos si puedes conseguir jinetes que los monten. 9¿No irás a rechazar la oferta de un capitán, así sea uno de los menos importantes de mi señor y ponerte a confiar en el rey de Egipto para que te dé carros de combate y caballos? 10Mira, ¿crees que vine a destruir este país sin la ayuda del SEÑOR? Pues el mismo SEÑOR fue el que me dijo: “Sube y destruye ese país”.
11Entonces, Eliaquín, Sebna y Joa le dijeron al comandante en jefe asirio:
—Por favor, háblanos en arameo, pues nosotros tus siervos entendemos ese idioma. No nos hables en el idioma de Judá porque nos escuchará la gente que está sobre la muralla.
12Pero el comandante en jefe dijo:
—¿Acaso mi señor me mandó a hablarles sólo a su señor y a ustedes? ¿No me mandó él a decirle a la gente que está sentada en la muralla y a ustedes, que se tendrán que comer sus propios excrementos y beber su propia orina#36:12 comer […] propia orina Es una amenaza de que la ciudad será sitiada.?
13Luego se puso en pie y gritó fuerte en el lenguaje de Judá:
—Oigan lo que les dice el gran rey, el rey de Asiria. 14Esto es lo que él dice:
»No se dejen engañar por Ezequías, porque él no los podrá librar. 15No permitan que Ezequías los haga confiar en el SEÑOR, diciendo: “Seguro que el SEÑOR nos librará, no dejará que esta ciudad caiga en manos del rey de Asiria”.
16»No oigan a Ezequías, porque esto es lo que dice el rey de Asiria: “Hagan un tratado de paz conmigo y ríndanse, y permitiré que cada uno de ustedes se alimente de su propia vid y de su propia higuera, y que beba de su propio pozo. 17Eso será hasta que yo venga y los lleve a un país como el de ustedes, un país con grano, vino, pan y viñedos”.
18»Cuídense de no dejarse convencer por Ezequías con eso de que “el SEÑOR nos rescatará”. ¿Acaso alguno de los dioses de las otras naciones ha librado a su pueblo de las manos del rey de Asiria? 19¿Dónde están los dioses de Jamat y de Arfad?#36:19 Jamat, Arfad Ciudades de Aram (Siria). ¿Dónde están los dioses de Sefarvayin#36:19 Sefarvayin Ciudad de Aram (Siria).? ¿Libraron a Samaria de caer en mis manos? 20¿Cuál de los dioses de esas naciones las ha librado de caer en mis manos? ¿Cómo pues podrá el SEÑOR librar a Jerusalén de mí?
21Pero el pueblo permaneció en silencio y no le contestó nada, porque el rey había dado orden de no contestarle nada.
22Entonces, Eliaquín hijo de Jilquías, que estaba a cargo de la administración del palacio, Sebna el escriba, y el cronista Joa hijo de Asaf, fueron a donde estaba Ezequías con su ropa rasgada en señal de aflicción y le contaron todo lo que el comandante en jefe había dicho.
Desde el inicio de los tiempos Dios se comunica con nosotros. Para ello la sagrada Biblia es un vehículo muy poderoso, ya que es la palabra del Señor plasmada en negro sobre blanco. Como ya sabrás, existen varias versiones de las Sagradas Escrituras, hechas en pos de una mejor comprensión de la palabra del Señor. En la versión 'La Biblia: La Palabra de Dios para todos' encontramos que el capítulo 36 del Isaías se nos muestra de la forma que podemos ver a continuación.
El libro Isaías de la Biblia tiene 66 capítulos. Y en el capítulo 36 podemos encontrar 22 versículos, en los que Dios nos revela sus enseñanzas y nos indica a través de su inmensa sabiduría, amor y bondad, la forma en la que debemos obrar y acercarnos a Él.
No nos cabe duda de que leyendo el capítulo 36 del libro Isaías de la versión 'La Biblia: La Palabra de Dios para todos' de la Sagrada Biblia te será fácil comprender como nuestro amado Padre nunca nos deja solos, y que en los textos que dejó para nosotros es posible hallar todas las respuestas que necesitamos. Recuerda que siempre puedes leer el capítulo 36 en alguna de las otras versiones de la Biblia que tenemos para ti, aunque es un ejercicio muy interesante que hayas optado por leer ahora el capítulo 36 de la versión 'La Biblia: La Palabra de Dios para todos' de la Santa Biblia.