42
1-2Pero Johanán y Azarías hijo de Hosaías vinieron a hablar conmigo, junto con los jefes militares y el pueblo, desde el más viejo hasta el más joven. Me dijeron:
—Por favor, Jeremías, atiéndenos y pídele a Dios por todos nosotros. Tú bien sabes que antes éramos muchos, pero ahora solo quedamos muy pocos. 3Pídele a Dios que nos diga a dónde tenemos que ir, y qué debemos hacer.
4Yo les contesté:
—Está bien. Voy a rogarle a Dios por ustedes, tal como me lo han pedido. Todo lo que él me diga, yo se lo diré a ustedes. No les voy a esconder nada.
5-6Ellos me prometieron:
—Haremos todo lo que Dios nos mande hacer, nos guste o no nos guste. Ponemos a Dios como testigo fiel y verdadero de que cumpliremos nuestra promesa. Si le obedecemos, estamos seguros de que nos irá bien.
7Días después, Dios me habló. 8Entonces yo llamé a Johanán y a todos los que habían venido con él, 9y les dije:
«El Dios todopoderoso me manda a decirles 10que se queden a vivir en Babilonia, y les promete que no volverá a destruirlos, sino que los bendecirá. ¡Le duele mucho haber tenido que castigarlos! 11No tengan miedo del rey de Babilonia. Pueden estar seguros de que el Dios de Israel va a protegerlos y a salvarlos del poder de ese rey. 12Dios tendrá compasión de ustedes, y hará que también el rey de Babilonia los trate bien y les permita volver a su país.
13-15»Pero si ustedes lo desobedecen, y en vez de quedarse a vivir aquí deciden irse a vivir a Egipto, entonces deben prestar mucha atención. Ustedes creen que si se van a Egipto, no correrán ningún peligro. 16Pero yo les aseguro que también allá sufrirán a causa de la guerra y el hambre, y allí morirán. 17Una vez más les digo: todos los que decidan irse a vivir a Egipto morirán en la guerra, o de hambre, o de alguna enfermedad. ¡Ninguno podrá librarse del terrible castigo que voy a mandarles!
18»El Dios de Israel les advierte que, así como se enfureció contra los que vivían en Jerusalén, así también se enojará contra los que se vayan a Egipto. La gente se burlará de ustedes y los atacará. ¡Nunca volverán a ver este lugar!
19»Recuerden que Dios les ha dicho que no vayan a Egipto. Ustedes son los únicos que quedan de Judá, y deben entender bien lo que les estoy diciendo. 20Ustedes mismos me pidieron que le rogara a Dios por ustedes, y se comprometieron a cumplir todo lo que él les ordenara hacer. 21Hoy les he dicho lo que Dios quiere que hagan. Sin embargo, ustedes no quieren obedecer. 22Por eso yo les aseguro que, si insisten en irse a vivir a Egipto, morirán en la guerra, o de hambre o de enfermedad».
Desde el inicio de los tiempos Dios se comunica con nosotros. Para ello la sagrada Biblia es un vehículo muy poderoso, ya que es la palabra del Señor plasmada en negro sobre blanco. Como ya sabrás, existen varias versiones de las Sagradas Escrituras, hechas en pos de una mejor comprensión de la palabra del Señor. En la versión 'Traducción en Lenguaje Actual Interconfesional' encontramos que el capítulo 42 del Jeremías se nos muestra de la forma que podemos ver a continuación.
El libro Jeremías de la Biblia tiene 52 capítulos. Y en el capítulo 42 podemos encontrar 22 versículos, en los que Dios nos revela sus enseñanzas y nos indica a través de su inmensa sabiduría, amor y bondad, la forma en la que debemos obrar y acercarnos a Él.
No nos cabe duda de que leyendo el capítulo 42 del libro Jeremías de la versión 'Traducción en Lenguaje Actual Interconfesional' de la Sagrada Biblia te será fácil comprender como nuestro amado Padre nunca nos deja solos, y que en los textos que dejó para nosotros es posible hallar todas las respuestas que necesitamos. Recuerda que siempre puedes leer el capítulo 42 en alguna de las otras versiones de la Biblia que tenemos para ti, aunque es un ejercicio muy interesante que hayas optado por leer ahora el capítulo 42 de la versión 'Traducción en Lenguaje Actual Interconfesional' de la Santa Biblia.