Y Ocozías también siguió los pasos de Ahab y su dinastía, pues su madre le daba malos consejos, y por causa de sus relaciones familiares con la casa de Ahab, sus hechos fueron malos a los ojos del Señ
Hizo pues lo malo en ojos de Jehová, como la casa de Achâb; porque después de la muerte de su padre, ellos le aconsejaron para su perdición.
Hizo, pues, lo malo ante los ojos de Jehová, como la casa de Acab; porque después de la muerte de su padre, ellos le aconsejaron para su perdición.
Hizo, pues, lo malo ante los ojos de Jehová, como la casa de Acab; porque después de la muerte de su padre, ellos le aconsejaron para su perdición.
Hizo, pues, lo malo ante los ojos del SEÑOR, como la casa de Acab; porque después de la muerte de su padre, ellos le aconsejaron para su perdición.
Y hizo lo malo en ojos de Iehoua, como la caſa de Achab, porque deſpues de la muerte de ſu padre ellos le aconsejarõ para ſu perdicion.
Y Ocozías también siguió los pasos de Ahab y su dinastía, pues su madre le daba malos consejos, y por causa de sus relaciones familiares con la casa de Ahab, sus hechos fueron malos a los ojos del Señ
Y Ocozías también siguió los pasos de Ahab y su dinastía, pues su madre le daba malos consejos, y por causa de sus relaciones familiares con la casa de Ahab, sus hechos fueron malos a los ojos del Señ
y ofendió al Señor, como la dinastía de Ajab, pues tras la muerte de su padre ellos fueron sus consejeros para su perdición.
E hizo lo malo ante los ojos del SEÑOR, como había hecho la casa de Acab, porque después de la muerte de su padre ellos fueron sus consejeros para perdición suya.
Hizo lo que el SEÑOR consideraba malo, tal como lo hizo la familia de Acab. En efecto, ellos fueron sus consejeros después de la muerte de su papá y eso le acarreó su destrucción.
y ofendió al Señor, como la dinastía de Ajab, pues tras la muerte de su padre ellos fueron sus consejeros para su perdición.
Hizo lo que desagrada al SEÑOR, siguiendo así el ejemplo de la familia de Acab. Es más, cuando su padre murió, Ocozías permitió que miembros de esa familia fueran sus consejeros. Esto lo llevó a la pe
Hizo lo malo ante los ojos del SEÑOR, como lo había hecho la casa de Acab, porque después de la muerte de su padre ellos fueron sus consejeros para perdición suya.
Hizo lo malo a los ojos del SEÑOR, igual que la familia de Acab. Los parientes de Acab incluso llegaron a ser asesores de Ocozías después de la muerte de su padre y lo llevaron a la ruina.
Hizo lo que ofende al SEÑOR, como lo había hecho la familia de Acab. En efecto, una vez muerto su padre, Ocozías tuvo como consejeros a miembros de esa familia, para su perdición.
Hizo lo malo ante YAVé, como la casa de Acab, porque después de la muerte de su padre, ellos lo aconsejaban para perdición de él.
E hizo lo malo ante los ojos del SEÑOR, como la casa de Acab; porque después de la muerte de su padre, ellos lo aconsejaban para su perdición.
Para su perdición, Ocozías hizo lo malo a los ojos del Señor, a la manera de la casa de Ajab, pues después de la muerte de su padre ellos fueron sus consejeros.
Hizo pues lo malo en ojos de Jehová, como la casa de Achâb; porque después de la muerte de su padre, ellos le aconsejaron para su perdición.
Tras la muerte de su padre, Ocozías siguió los consejos de su madre y de sus parientes, los descendientes de Ahab. Pero sus consejos llevaron a este rey al fracaso, pues Ocozías desobedeció a Dios.
Tras la muerte de su padre, Ocozías siguió los consejos de su madre y de sus parientes, los descendientes de Ahab. Pero sus consejos llevaron a este rey al fracaso, pues Ocozías desobedeció a Dios.
El versiculo 2 Crónicas, 22:4 de La Biblia consiste en algo que deberíamos tomar continuamente en consideración para reflexionar sobre él. ¿Qué quiso manifestarnos Nuestro Padre Todopoderoso con el versículo 2 Crónicas, 22:4? ¿Cuáles son las ocasiones de nuestro día a día en que tenemos la oportunidad de hacer valer lo que hemos aprendido gracias al versículo 2 Crónicas, 22:4 de la Santa Biblia?
Reflexionar en relación con el versículo 2 Crónicas, 22:4 nos supone una ayuda a ser más agradables a los ojos de el Creador del Cielo y de la Tierra y a elevar nuestra alma hacia Dios, por ese motivo es bueno servirse del versículo 2 Crónicas, 22:4 todas las veces que necesitemos palabras que nos inspiren y guíen de modo que podamos saber en qué forma acturar o para traer la serenidad a nuestras almas.