Feliz aquel que espere confiado hasta que hayan pasado mil trescientos treinta y cinco días.
Bienaventurado el que esperare, y llegare hasta mil trescientos treinta y cinco días.
Bienaventurado el que espere, y llegue a mil trescientos treinta y cinco días.
Bienaventurado el que espere, y llegue a mil trescientos treinta y cinco días.
Bienaventurado el que esperare, y llegare hasta mil trescientos treinta y cinco días.
CAPITVLO I.Deſcriueſe el origen y creacion del mundo, es à ſaber, de los cielos, y de la tierra, y de todo loque contienen. De la luz, del tiempo, y orden de los dias, y de las noc
Feliz aquel que espere confiado hasta que hayan pasado mil trescientos treinta y cinco días.
Feliz aquel que espere confiado hasta que hayan pasado mil trescientos treinta y cinco días.
Dichoso el que sea capaz de esperar y llegue a los mil trescientos treinta y cinco días.
Bienaventurado el que espere y llegue a mil trescientos treinta y cinco días.
Será muy afortunado el que logre esperar y sobrevivir los 1335 días.
Dichoso el que sea capaz de esperar y llegue a los mil trescientos treinta y cinco días.
Y, ¡benditos sean aquellos que esperan y permanecen fieles hasta el día mil trescientos treinta y cinco!
Bienaventurado el que espere y llegue a 1,335 días.
¡Benditos sean los que esperen y permanezcan hasta el fin de los 1335 días!
¡Dichoso el que espere a que hayan transcurrido mil trescientos treinta y cinco días!
¡Inmensamente feliz el que espere y llegue a 1.335 días!
¡Bienaventurado el que espere y llegue hasta mil trescientos treinta y cinco días!
Bienaventurado el que espere y llegue a mil trescientos treinta y cinco días.
Bienaventurado el que esperare, y llegare hasta mil trescientos treinta y cinco días.
»A partir del momento en que no se permita presentar las ofrendas diarias, y que se ofrezca en el templo de Dios algo horrible y asqueroso, pasarán mil doscientos noventa días. Felices los que esperen
»A partir del momento en que no se permita presentar las ofrendas diarias, y que se ofrezca en el templo de Dios algo horrible y asqueroso, pasarán mil doscientos noventa días. Felices los que esperen
Deberíamos tomar siempre en consideración el versículo Daniel, 12:12 de La Sagrada Biblia con el objetivo de analizarlo y pensar en torno a él.Quizás sería adecuado preguntarse ¿Qué quiso proponernos Dios, Creador del Cielo y de la Tierra con el versículo Daniel, 12:12? ¿Cuáles son los momentos de nuestra vida diaria en que seremos capaces de recurrir a lo que hemos aprendido gracias al versículo Daniel, 12:12 de Las Sagradas Escrituras?
Hacer un análisis profundo acerca de el versículo Daniel, 12:12 nos ayuda a ser mejores personas y a avanzar en nuestro camino hacia la Gracia de Dios, por ese motivo es conveniente recurrir al versículo Daniel, 12:12 todas y cada una de las veces que necesitemos palabras que nos inspiren y guíen de modo que podamos saber cómo proceder o para traer la tranquilidad a nuestros corazones y almas.