pero la reina madre, atraída por los gritos de su hijo el rey y de los grandes personajes invitados, entró en la sala del banquete y dijo: —¡Que viva Su Majestad para siempre! Y no se preocupe ni se p
La reina, por las palabras del rey y de sus príncipes, entró á la sala del banquete. Y habló la reina, y dijo: Rey, para siempre vive, no te asombren tus pensamientos, ni tus colores se demuden
La reina, por las palabras del rey y de sus príncipes, entró a la sala del banquete, y dijo: Rey, vive para siempre; no te turben tus pensamientos, ni palidezca tu rostro.
La reina, por las palabras del rey y de sus príncipes, entró a la sala del banquete, y dijo: —¡Rey, vive para siempre! No te turben tus pensamientos ni palidezca tu rostro.
La reina, por las palabras del rey y de sus príncipes, entró a la sala del banquete. Habló la reina, y dijo: Rey, para siempre vive, no te asombren tus pensamientos, ni tus colores se demuden
CAPITVLO I.Deſcriueſe el origen y creacion del mundo, es à ſaber, de los cielos, y de la tierra, y de todo loque contienen. De la luz, del tiempo, y orden de los dias, y de las noc
pero la reina madre, atraída por los gritos de su hijo el rey y de los grandes personajes invitados, entró en la sala del banquete y dijo: —¡Que viva Su Majestad para siempre! Y no se preocupe ni se p
pero la reina madre, atraída por los gritos de su hijo el rey y de los grandes personajes invitados, entró en la sala del banquete y dijo: —¡Que viva Su Majestad para siempre! Y no se preocupe ni se p
Cuando llegó a oídos de la reina lo que decían el rey y sus dignatarios, se presentó en la sala del banquete y dijo: — ¡Larga vida al rey! No te alarmes ni palidezcas
La reina, al enterarse de las palabras del rey y de sus nobles, entró en la sala del banquete y tomando la palabra, dijo: ¡Oh rey, vive para siempre! No te turben tus pensamientos ni se mude tu sembla
La reina escuchó que Belsasar y sus invitados hacían mucho ruido, así que fue al salón de la fiesta y le dijo al rey: —¡Viva el rey por siempre! No te asustes ni palidezcas.
Cuando llegó a oídos de la reina lo que decían el rey y sus dignatarios, se presentó en la sala del banquete y dijo: —¡Larga vida al rey! No te alarmes ni palidezcas
Pero cuando la reina madre oyó lo que estaba pasando, entró apresuradamente en la sala del banquete y dijo a Belsasar: ―¡Que viva Su Majestad para siempre! No se asuste ni se ponga pálido por esto
La reina, al enterarse de las palabras del rey y de sus nobles, entró en la sala del banquete y tomando la palabra, dijo: «¡Oh rey, viva para siempre! No le turben sus pensamientos ni se mude su sembl
Cuando la reina madre oyó lo que estaba pasando, se dirigió apresuradamente a la sala del banquete y le dijo a Belsasar: «¡Que viva el rey! No se ponga tan pálido ni tenga miedo.
Al oír el alboroto que hacían el rey y sus nobles, la reina misma entró en la sala del banquete y exclamó: —¡Que viva Su Majestad por siempre! ¡Y no se alarme ni se ponga pálido!
Pero la reina, motivada por las palabras del rey y de sus dignatarios, entró a la sala del banquete y dijo: ¡Vive para siempre, oh rey! No te turben tus pensamientos, ni palidezca tu semblante.
Debido a las palabras del rey y de sus nobles, entró la reina a la sala del banquete. Y la reina habló y dijo: —¡Oh rey, para siempre vivas! No te turben tus pensamientos ni te pongas pálido.
Pero la reina, que al oír las palabras del rey y de sus príncipes había entrado al salón del banquete, dijo: «¡Que Su Majestad viva para siempre! No se preocupe Su Majestad con esos pensamientos que t
La reina, por las palabras del rey y de sus príncipes, entró á la sala del banquete. Y habló la reina, y dijo: Rey, para siempre vive, no te asombren tus pensamientos, ni tus colores se demuden
Cuando la reina oyó los gritos de Belsasar y de sus invitados, entró al salón del banquete y le dijo al rey: «¡Deseo que Su Majestad viva muchos años! ¡No se preocupe más, ni tenga tanto miedo!
Cuando la reina oyó los gritos de Belsasar y de sus invitados, entró al salón del banquete y le dijo al rey: «¡Deseo que Su Majestad viva muchos años! ¡No se preocupe más, ni tenga tanto miedo!
El versiculo Daniel, 5:10 de los Textos Sagrados que componen la Biblia es algo que deberíamos tomar constantemente en consideración con el propósito de reflexionar acerca de él.Probablemente deberíamos hacernos la pregunta ¿Qué trataba de proponernos Dios Nuestro Señor con el versículo Daniel, 5:10? ¿En qué coyunturas de nuestro día a día podemos recurrir a lo que hemos llegado a saber gracias al versículo Daniel, 5:10 de La Sagrada Biblia?
Meditar en relación con el versículo Daniel, 5:10 nos ayuda a ser mejores cristianos y a acercarnos más a Dios, por ese motivo es oportuno servirse del versículo Daniel, 5:10 cuando creamos que necesitemos una luz que nos guíe y así saber cómo proceder o para traer la serenidad a nuestro espíritu.