así que le reclamaron a Moisés, diciéndole: —¡Danos agua para beber! —¿Por qué me hacen reclamaciones a mí? ¿Por qué ponen a prueba a Dios? —contestó Moisés.
Y altercó el pueblo con Moisés, y dijeron: Danos agua que bebamos. Y Moisés les dijo: ¿Por qué altercáis conmigo? ¿por qué tentáis á Jehová?
Y altercó el pueblo con Moisés, y dijeron: Danos agua para que bebamos. Y Moisés les dijo: ¿Por qué altercáis conmigo? ¿Por qué tentáis a Jehová?
Y disputó el pueblo con Moisés, diciéndole: —Danos agua para que bebamos. —¿Por qué disputáis conmigo? ¿Por qué tentáis a Jehová? —les respondió Moisés.
Y riñó el pueblo con Moisés, y dijeron: Danos agua que bebamos. Y Moisés les dijo: ¿Por qué reñís conmigo? ¿Por qué tentáis al SEÑOR?
Y riñó el pueblo con Moyſen, y dixeron, Dadnos agua, que beuamos. Y Moyſen les dixo: Porque reñis cõmigo? Porque tentays a Iehoua?
así que le reclamaron a Moisés, diciéndole: —¡Danos agua para beber! —¿Por qué me hacen reclamaciones a mí? ¿Por qué ponen a prueba a Dios? —contestó Moisés.
así que le reclamaron a Moisés, diciéndole: —¡Danos agua para beber! —¿Por qué me hacen reclamaciones a mí? ¿Por qué ponen a prueba a Dios? —contestó Moisés.
y se enfrentó a Moisés, diciéndole: — ¡Danos agua para beber! Respondió Moisés: — ¿Por qué se enfrentan a mí y ponen a prueba al Señor?
Entonces el pueblo contendió con Moisés, y dijeron: Danos agua para beber. Y Moisés les dijo: ¿Por qué contendéis conmigo? ¿Por qué tentáis al SEÑOR?
El pueblo le reclamó a Moisés. Dijeron: —Danos agua para beber. Moisés les dijo: —¿Por qué se están quejando conmigo? ¿Por qué ponen a prueba al SEÑOR?
y se enfrentó a Moisés, diciéndole: —¡Danos agua para beber! Respondió Moisés: —¿Por qué se enfrentan a mí y ponen a prueba al Señor?
Así que una vez más los israelitas se enojaron con Moisés y le dijeron: ―¡Danos agua, pues nos estamos muriendo de sed! Moisés les dijo: ―¿Por qué se enojan conmigo? ¿Están tratando de nuevo de poner
Entonces el pueblo discutió con Moisés, y le dijeron: «Danos agua para beber». «¿Por qué discuten conmigo?», les dijo Moisés. «¿Por qué tientan al SEÑOR?».
Así que el pueblo volvió a quejarse contra Moisés: —¡Danos agua para beber! —reclamaron. —¡Cállense! —respondió Moisés—. ¿Por qué se quejan contra mí? ¿Por qué ponen a prueba al SEÑOR?
así que discutieron con Moisés. —Danos agua para beber —le exigieron. —¿Por qué discuten conmigo? —se defendió Moisés—. ¿Por qué provocan al SEÑOR?
El pueblo altercó con Moisés y dijeron: Danos agua para que bebamos. Y Moisés les dijo: ¿Por qué altercan conmigo? ¿Por qué tientan a YAVÉ?
El pueblo altercó con Moisés diciendo: —¡Danos agua para beber! Moisés les dijo: —¿Por qué altercan conmigo? ¿Por qué ponen a prueba al SEÑOR?
así que todo el pueblo discutió con Moisés y le dijo: «Danos agua. Queremos beber.» Moisés les dijo: «¿Por qué se pelean conmigo? ¿Por qué ponen a prueba al Señor?»
Y altercó el pueblo con Moisés, y dijeron: Danos agua que bebamos. Y Moisés les dijo: ¿Por qué altercáis conmigo? ¿por qué tentáis á Jehová?
así que le reclamaron a Moisés: —¡Tenemos sed! ¡Danos agua! Moisés les contestó: —¿Y por qué me reclaman a mí? ¿Por qué dudan del poder de Dios?
así que le reclamaron a Moisés: —¡Tenemos sed! ¡Danos agua! Moisés les contestó: —¿Y por qué me reclaman a mí? ¿Por qué dudan del poder de Dios?
El versiculo Éxodo, 17:2 de La Biblia consiste en algo que es muy recomendable tomar continuamente en cuenta con el objetivo de reflexionar sobre él. Acaso deberíamos preguntarnos ¿Qué pretendía proponernos Nuestro Padre que está en los Cielos con el versículo Éxodo, 17:2? ¿En qué momentos de nuestra vida diaria seremos capaces de poner en práctica aquello que aprendemos gracias al versículo Éxodo, 17:2 de La Biblia?
El hecho de reflexionar en torno a lo que se refiere el versículo Éxodo, 17:2 nos es de gran ayuda a ser mejores personas y a acercarnos más a Dios, por esa razón es aconsejable recurrir al versículo Éxodo, 17:2 todas las veces que precisemos que la palabra de Dios, Nuestro Señor nos indique el camino a seguir y así saber qué pasos dar o para traer el sosiego a nuestras almas.