<

Éxodo, 25:8

>

Éxodo, 25:8

Y háganme un santuario para que yo habite entre ellos.


Y hacerme han un santuario, y yo habitaré entre ellos.


Y harán un santuario para mí, y habitaré en medio de ellos.


Me erigirán un santuario, y habitaré en medio de ellos.


Y me harán un santuario, y yo habitaré entre ellos.


Y hazermehan Sanctuariò, y yo habitaré entre ellos.


Y háganme un santuario para que yo habite entre ellos.


Y háganme un santuario para que yo habite entre ellos.


Me erigirán un santuario, y habitaré en medio de ellos.


Y que hagan un santuario para mí, para que yo habite entre ellos.


»Construirán un santuario para mí y yo habitaré entre ustedes.


Me erigirán un santuario, y habitaré en medio de ellos.


Quiero que el pueblo de Israel me haga un santuario donde pueda habitar en medio de ellos.


»Que me hagan un santuario, para que Yo habite entre ellos.


»Haz que los israelitas me construyan un santuario para que yo habite en medio de ellos.


»Después me harán un santuario, para que yo habite entre ustedes.


Harán un Santuario para Mí, y viviré en medio de ellos.


Que me hagan un santuario, y yo habitaré en medio de ellos.


Y harán un santuario en mi honor, y yo habitaré en medio de ellos.


Y hacerme han un santuario, y yo habitaré entre ellos.


»Además, quiero que me construyan un santuario para que yo viva entre ustedes.


»Además, quiero que me construyan un santuario para que yo viva entre ustedes.


El versiculo Éxodo, 25:8 de La Biblia consiste en algo que nos conviene tomar continuamente en consideración con el fin de hacer una reflexión sobre él.Tal vez sería acertado cuestionarse ¿Qué pretendía manifestarnos Dios con el versículo Éxodo, 25:8? ¿En qué coyunturas de nuestra vida diaria seremos capaces de aplicar aquello que hemos alcanzado a saber gracias al versículo Éxodo, 25:8 de La Biblia?

Meditar sobre el versículo Éxodo, 25:8 nos resulta fundamental para llegar a a ser capaces de acercarnos más al mensaje de Nuestro Señor y a avanzar en nuestro camino hacia la Gracia de Dios, por eso es aconsejable recurrir al versículo Éxodo, 25:8 todas y cada una de las veces que pueda servirnos de guía para saber qué pasos dar o para traer paz a nuestro espíritu.