<

Éxodo, 31:18

>

Éxodo, 31:18

Cuando el Señor dejó de hablar con Moisés en el monte Sinaí, le entregó dos tablas de piedra con la ley escrita por el dedo mismo de Dios.


Y dió á Moisés, como acabó de hablar con él en el monte de Sinaí, dos tablas del testimonio, tablas de piedra escritas con el dedo de Dios.


Y dio a Moisés, cuando acabó de hablar con él en el monte de Sinaí, dos tablas del testimonio, tablas de piedra escritas con el dedo de Dios.


Y dio a Moisés, cuando acabó de hablar con él en el monte Sinaí, dos tablas del Testimonio, tablas de piedra escritas por el dedo de Dios.


Y dio a Moisés, cuando acabó de hablar con él en el monte de Sinaí, dos tablas del testimonio, tablas de piedra escritas con el dedo de Dios.


¶ Y dió à Moyſen, como acabo de hablar conel en el Monte de Sinai, dos tablas del Testimonio, tablas de piedra éscriptas conel dedo de Dios.


Cuando el Señor dejó de hablar con Moisés en el monte Sinaí, le entregó dos tablas de piedra con la ley escrita por el dedo mismo de Dios.


Cuando el Señor dejó de hablar con Moisés en el monte Sinaí, le entregó dos tablas de piedra con la ley escrita por el dedo mismo de Dios.


Cuando el Señor terminó de hablar con Moisés en el monte Sinaí, le dio las dos losas del testimonio: losas de piedra escritas por el dedo de Dios.


Y cuando terminó de hablar con Moisés sobre el monte Sinaí, le dio las dos tablas del testimonio, tablas de piedra, escritas por el dedo de Dios.


Cuando Dios terminó de hablarle a Moisés en el monte Sinaí, le entregó las dos tablas del Testimonio; las tablas escritas por el dedo de Dios.


Cuando el Señor terminó de hablar con Moisés en el monte Sinaí, le dio las dos tablas del testimonio: tablas de piedra escritas por el dedo de Dios.


Cuando terminó de hablar con Moisés sobre el monte Sinaí, Dios le entregó dos tablas de piedra con los Diez Mandamientos, escritos con su propio dedo.


Cuando el SEÑOR terminó de hablar con Moisés sobre el monte Sinaí, le dio las dos tablas del testimonio, tablas de piedra, escritas por el dedo de Dios.


Cuando el SEÑOR terminó de hablar con Moisés en el monte Sinaí, le dio las dos tablas de piedra grabadas con las condiciones del pacto, escritas por el dedo de Dios.


Y cuando terminó de hablar con Moisés en el monte Sinaí, le dio las dos tablas de la ley, que eran dos lajas escritas por el dedo mismo de Dios.


Y cuando acabó de hablar con él en la Montaña Sinaí, dio a Moisés las dos tablas del Testimonio, tablas de piedra escritas por el dedo de ʼELOHIM.


Y cuando acabó de hablar con él en el monte Sinaí, dio a Moisés dos tablas del testimonio, tablas de piedra escritas con el dedo de Dios.


Cuando Dios terminó de hablar con Moisés en el monte Sinaí, le dio las dos tablas del testimonio, tablas de piedra escritas por el dedo mismo de Dios.


Y dió á Moisés, como acabó de hablar con él en el monte de Sinaí, dos tablas del testimonio, tablas de piedra escritas con el dedo de Dios.


En la montaña del Sinaí, Dios le entregó a Moisés las leyes que el pueblo debía obedecer. Dios mismo escribió esas leyes en dos tablas de piedra.


En la montaña del Sinaí, Dios le entregó a Moisés las leyes que el pueblo debía obedecer. Dios mismo escribió esas leyes en dos tablas de piedra.


Nos conviene tomar en todo momento en consideración el versículo Éxodo, 31:18 de La Sagrada Biblia con el propósito de hacer una reflexión sobre él.Tal vez deberíamos preguntarnos ¿Qué intentaba manifestarnos Dios Nuestro Señor con el versículo Éxodo, 31:18? ¿Cuáles son las ocasiones de nuestra vida cotidiana en que seremos capaces de aprovechar lo que hemos llegado a saber gracias al versículo Éxodo, 31:18 de Las Sagradas Escrituras?

Hacer un análisis profundo en torno a lo que se refiere el versículo Éxodo, 31:18 es un gran aporte que nos permite a ser mejores cristianos y a elevar nuestra alma hacia Dios, por eso es oportuno recurrir al versículo Éxodo, 31:18 todas las veces que necesitemos palabras que nos inspiren y guíen y así saber qué pasos dar o para traer la paz a nuestros corazones.