El hombre contestó: —Escuché que andabas por el jardín y tuve miedo, porque estoy desnudo; por eso me escondí.
Y él respondió: Oí tu voz en el huerto, y tuve miedo, porque estaba desnudo; y escondíme.
Y él respondió: Oí tu voz en el huerto, y tuve miedo, porque estaba desnudo; y me escondí.
Él respondió: —Oí tu voz en el huerto y tuve miedo, porque estaba desnudo; por eso me escondí.
Y él respondió: Oí tu voz en el huerto, y tuve miedo, porque estaba desnudo; y me escondí.
Y el respondió, Oy tuboz enel huerto, y vue miedo, porque eſtaua desnudo, y es condime.
El hombre contestó: —Escuché que andabas por el jardín y tuve miedo, porque estoy desnudo; por eso me escondí.
El hombre contestó: —Escuché que andabas por el jardín y tuve miedo, porque estoy desnudo; por eso me escondí.
El hombre contestó: — Te oí en el jardín, tuve miedo porque estaba desnudo, y me escondí.
Y él respondió: Te oí en el huerto, y tuve miedo porque estaba desnudo, y me escondí.
El hombre le respondió: —Escuché que andabas por el jardín y me asusté porque estaba desnudo, entonces me escondí.
El hombre contestó: —Te oí en el jardín, tuve miedo porque estaba desnudo, y me escondí.
El hombre le contestó: ―Oí que andabas por el jardín y me dio miedo, pues estoy desnudo. Así que me escondí.
Y él respondió: «Te oí en el huerto, tuve miedo porque estaba desnudo, y me escondí».
El hombre contestó: —Te oí caminando por el huerto, así que me escondí. Tuve miedo porque estaba desnudo.
El hombre contestó: —Escuché que andabas por el jardín, y tuve miedo porque estoy desnudo. Por eso me escondí.
Contestó: Oí tu sonido en el huerto y tuve miedo porque estoy desnudo y me escondí.
Él respondió: —Oí tu voz en el jardín y tuve miedo, porque estaba desnudo. Por eso me escondí.
Y él respondió: «Oí tu voz en el huerto, y tuve miedo, pues estoy desnudo. Por eso me escondí.»
Y él respondió: Oí tu voz en el huerto, y tuve miedo, porque estaba desnudo; y escondíme.
Y el hombre le contestó: —Oí tu voz en el jardín y tuve miedo, pues estoy desnudo. Por eso corrí a esconderme.
Y el hombre le contestó: —Oí tu voz en el jardín y tuve miedo, pues estoy desnudo. Por eso corrí a esconderme.
Es muy recomendable tomar continuamente en consideración el versículo Génesis, 3:10 de La Sagrada Biblia para hacer una reflexión sobre él.Quizás sería adecuado preguntarse ¿Qué pretendía decirnos el Señor con el versículo Génesis, 3:10? ¿Cuáles serán las coyunturas de nuestra vida diaria en que podemos aprovechar aquello que hemos aprendido gracias al versículo Génesis, 3:10 de Las Sagradas Escrituras?
Meditar en torno a lo que se refiere el versículo Génesis, 3:10 nos ayuda a ser mejores cristianos y a elevar nuestra alma hacia Dios, por eso es útil servirse del versículo Génesis, 3:10 siempre que precisemos que la palabra de Dios, Nuestro Señor nos indique el camino a seguir y así saber cómo proceder o para traer paz a nuestros corazones y almas.