¡Qué tontos son ustedes, jefes de Soan, los consejeros más sabios de Egipto, que en realidad son consejeros estúpidos! ¿Cómo se les ocurre decirle al faraón: «Somos descendientes de sabios, de reyes d
Ciertamente son necios los príncipes de Zoán; el consejo de los prudentes consejeros de Faraón, se ha desvanecido. ¿Cómo diréis á Faraón: Yo soy hijo de los sabios, é hijo de los reyes antiguos?
Ciertamente son necios los príncipes de Zoán; el consejo de los prudentes consejeros de Faraón se ha desvanecido. ¿Cómo diréis a Faraón: Yo soy hijo de los sabios, e hijo de los reyes antiguos?
Ciertamente son necios los príncipes de Zoán; los planes de los prudentes consejeros del faraón se han desvanecido. ¿Cómo diréis al faraón: «Yo soy hijo de los sabios e hijo de los reyes antiguos»?
Ciertamente son necios los príncipes de Zoán; el consejo de los prudentes consejeros de Faraón se ha desvanecido. ¿Cómo diréis por Faraón: Yo soy hijo de los sabios, e hijo de los reyes antiguos?
Ciertamente ſon locos los Principes de Zoan; el consejo de los prudentes consejeros de Pharaon seha desuanecido. Como direys por Pharaon, Yo ſoy hijo de los ſabios, y hijo de los reyes antiguos?
¡Qué tontos son ustedes, jefes de Soan, los consejeros más sabios de Egipto, que en realidad son consejeros estúpidos! ¿Cómo se les ocurre decirle al faraón: «Somos descendientes de sabios, de reyes d
¡Qué tontos son ustedes, jefes de Soan, los consejeros más sabios de Egipto, que en realidad son consejeros estúpidos! ¿Cómo se les ocurre decirle al faraón: «Somos descendientes de sabios, de reyes d
¡Qué necios los cortesanos de Soán! Los consejeros del faraón desatinan. ¿Cómo se atreven a decir al faraón: somos descendientes de sabios, estirpe de reyes antiguos?
No son más que necios los príncipes de Zoán; el consejo de los más sabios consejeros de Faraón se ha vuelto torpe. ¿Cómo decís a Faraón: Yo soy hijo de los sabios, hijo de los antiguos reyes?
Qué tontos son los líderes de Zoán, los expertos consejeros del faraón sólo atinan a decir estupideces. ¿Cómo es que dicen al faraón: «Yo soy hijo de sabios, descendiente de antiguos reyes»?
¡Qué necios los cortesanos de Soán! Los consejeros del faraón desatinan. ¿Cómo se atreven a decir al faraón: somos descendientes de sabios, estirpe de reyes antiguos?
¡Qué necios consejeros tiene Zoán! El mejor de sus consejos para el rey de Egipto es completamente insensato y equivocado. ¿Continuarán vanagloriándose de su sabiduría? ¿Osarán hablarle al faraón de l
No son más que necios los príncipes de Zoán. El consejo de los más sabios consejeros de Faraón se ha vuelto torpe. ¿Cómo dicen a Faraón: «Yo soy hijo de los sabios, hijo de los antiguos reyes»?
¡Qué necios son los funcionarios de Zoán! El mejor consejo que pueden dar al rey de Egipto es absurdo y equivocado. ¿Seguirán jactándose de su sabiduría delante del faraón? ¿Se atreverán a presumir ac
Los jefes de Zoán no son más que unos necios; los consejeros más sabios le dan a Faraón consejos insensatos. ¿Cómo se les ocurre decirle: «Yo soy uno de los sabios, discípulo de los antiguos reyes»?
Ciertamente los magistrados de Zoán son necios. Los sabios de Faraón dieron un desatinado consejo. ¿Cómo dirán a Faraón: Soy hijo de sabios e hijo de antiguos reyes?
Ciertamente son necios los magistrados de Tanis. Los sabios del faraón han dado un consejo desatinado. ¿Cómo dirán al faraón: “Yo soy hijo de sabios e hijo de reyes antiguos”?
¡Qué necios son los príncipes de Soán! ¡Ya no hay sabiduría en los prudentes consejeros del faraón! ¿Cómo pueden decirle al faraón que descienden de los sabios y de los reyes antiguos?
Ciertamente son necios los príncipes de Zoán; el consejo de los prudentes consejeros de Faraón, se ha desvanecido. ¿Cómo diréis á Faraón: Yo soy hijo de los sabios, é hijo de los reyes antiguos?
»¡Ustedes, jefes de la ciudad de Soan, que son los consejeros más sabios de Egipto, en realidad son unos tontos! ¿De qué le sirve al rey de Egipto que ustedes sean hijos de sabios y de reyes?
»¡Ustedes, jefes de la ciudad de Soan, que son los consejeros más sabios de Egipto, en realidad son unos tontos! ¿De qué le sirve al rey de Egipto que ustedes sean hijos de sabios y de reyes?
Es preciso tomar continuamente en cuenta el versículo Isaías, 19:11 de La Sagrada Biblia a fin de meditar en torno a él.Tal vez deberíamos preguntarnos ¿Qué pretendía manifestarnos el Señor con el versículo Isaías, 19:11? ¿Cuáles son los momentos de nuestra vida diaria en que seremos capaces de recurrir a aquello que hemos aprendido gracias al versículo Isaías, 19:11 de La Sagrada Biblia?
El hecho de reflexionar acerca de el versículo Isaías, 19:11 es un gran aporte que nos permite a ser mejores personas y a elevar nuestra alma hacia Dios, por eso es aconsejable acudir al versículo Isaías, 19:11 en todas aquellas ocasiones en que pueda servirnos de guía de modo que podamos saber cómo proceder o para traer la serenidad a nuestros corazones y almas.