1 (3) En tu enojo, oh Dios, nos has abandonado, nos has deshecho; ¡devuélvenos ahora nuestra fuerza!
OH Dios, tú nos has desechado, nos disipaste; Te has airado: vuélvete á nosotros.
Oh Dios, tú nos has desechado, nos quebrantaste; Te has airado; ¡vuélvete a nosotros!
Tú, Dios, tú nos has desechado, nos quebrantaste; te has airado. ¡Vuélvete a nosotros!
Oh Dios, tú nos has desechado, nos disipaste; te has airado: vuélvete a nosotros.
Al Vencedor: ſobre Susan Heduth: Michtam. De Dauid. para enseñar.
I. LOS ORÍGENES DEL MUNDO Y DE LA HISTORIA HUMANA(1—11)La Creación En el comienzo de todo, Dios creó#.1 Creó: heb. bará. En el AT, este verbo tiene por sujeto únic
1 (3) En tu enojo, oh Dios, nos has abandonado, nos has deshecho; ¡devuélvenos ahora nuestra fuerza!
Al maestro del coro. Según “El lirio del testimonio”. Poema de David. Para enseñar.
Oh Dios, tú nos has rechazado, nos has quebrantado, te has airado. Restáuranos, oh Dios.
Dios mío, tú te has enojado con nosotros; nos has rechazado y destruido. Ayúdanos a recuperarnos.
Oh Dios, nos has rechazado, nos has destruido; aunque estás enfurecido, ¡acógenos de nuevo!
¡Oh Dios, tú nos has rechazado y has roto nuestras defensas; te has airado contra nosotros! SEÑOR, restáuranos de nuevo en tu favor.
Oh Dios, Tú nos has rechazado, nos has quebrantado, Te has enojado. Restáuranos, oh Dios.
Nos has rechazado, oh Dios, y quebraste nuestras defensas. Te enojaste con nosotros; ahora, restáuranos al gozo de tu favor.
Oh Dios, tú nos has rechazado y has abierto brecha en nuestras filas; te has enojado con nosotros: ¡restáuranos ahora!
Oh ʼELOHIM, Tú nos rechasaste. Tú nos desechaste, rompiste nuestras defensas. Te airaste. Vuelve a nosotros.
Oh Dios, tú nos has desechado; has roto nuestras defensas. Te has airado. ¡Vuelve a nosotros!
Dios nuestro, tú nos has desechado; en tu enojo, nos has dejado sin defensas. ¡Vuélvete ahora a nosotros!
Al Músico principal: sobre Susan-Heduth: Michtam de David, para enseñar, cuando tuvo guerra contra Aram-Naharaim y contra Aram de Soba, y volvió Joab, é hirió de Edom en el valle de las Salina doce mi
1 (3) Dios mío, tú te enojaste, te alejaste de nosotros y nos destruiste. ¡Ahora vuelve a ayudarnos!
1 (3) Dios mío, tú te enojaste, te alejaste de nosotros y nos destruiste. ¡Ahora vuelve a ayudarnos!
Es conveniente tener siempre presente el versículo Salmos, 60:1 de La Sagrada Biblia de tal forma que podamos hacer una reflexión sobre él.Quizás sería bueno preguntarse ¿Qué intentaba decirnos Dios Nuestro Señor con el versículo Salmos, 60:1? ¿Cuáles son las ocasiones de nuestra vida diaria en que seremos capaces de aprovechar lo que hemos llegado a saber gracias al versículo Salmos, 60:1 de la Santa Biblia?
El hecho de reflexionar acerca de el versículo Salmos, 60:1 nos es de gran ayuda a ser capaces de acercarnos más al mensaje de Nuestro Señor y a acercarnos más a Dios, por esa cuestión es útil acudir al versículo Salmos, 60:1 todas y cada una de las veces que necesitemos palabras que nos inspiren y guíen y así saber en qué forma acturar o para traer paz a nuestros corazones.