Rut, 3:4
Fíjate bien en dónde se acuesta a dormir. Entonces ve y destápale los pies, y acuéstate allí. Luego, él mismo te dirá lo que debes hacer.
Y cuando él se acostare, repara tú el lugar donde él se acostará, é irás, y descubrirás los pies, y te acostarás allí; y él te dirá lo que hayas de hacer.
Y cuando él se acueste, notarás el lugar donde se acuesta, e irás y descubrirás sus pies, y te acostarás allí; y él te dirá lo que hayas de hacer.
Cuando se acueste, fíjate en qué lugar se acuesta, ve, descubre sus pies, y acuéstate allí; él mismo te dirá lo que debas hacer.
Y cuando él se acostare, repara tú el lugar donde él se acostare, e irás, y descubrirás los pies, y te acostarás allí; y él te dirá lo que hayas de hacer.
Y quando el ſe acostâre, sabe tu el lugar donde el ſe acostará, y vendrás, y descubrirás los pies de ſu cama, y acostartehas: y el te dirá loque ayas de hazer.
Fíjate bien en dónde se acuesta a dormir. Entonces ve y destápale los pies, y acuéstate allí. Luego, él mismo te dirá lo que debes hacer.
Fíjate bien en dónde se acuesta a dormir. Entonces ve y destápale los pies, y acuéstate allí. Luego, él mismo te dirá lo que debes hacer.
Fíjate bien en el lugar donde duerme; cuando se acueste, vas y le destapas los pies y te acuestas allí, y él te dirá lo que tienes que hacer.
Y sucederá que cuando él se acueste, notarás el lugar donde se acuesta; irás, descubrirás sus pies y te acostarás; entonces él te dirá lo que debes hacer.
Fíjate en el lugar donde se acuesta. Más tarde ve allí, levanta la cobija y acuéstate a sus pies. Después él te dirá lo que debes hacer.
Fíjate bien en el lugar donde duerme; cuando se acueste, vas y le destapas los pies y te acuestas allí, y él te dirá lo que tienes que hacer.
Fíjate entonces dónde se acuesta a dormir. Ve enseguida y levanta la manta con que se cubre los pies y acuéstate allí, y él te dirá lo que tendrás que hacer en cuanto a matrimonio.
Y sucederá que cuando él se acueste, notarás el lugar donde se acuesta; irás, descubrirás sus pies y te acostarás; entonces él te dirá lo que debes hacer».
Fíjate bien dónde se acuesta; después acércate a él, destapa sus pies y acuéstate allí. Entonces él te dirá lo que debes hacer.
Cuando se vaya a dormir, te fijas dónde se acuesta. Luego vas, le destapas los pies, y te acuestas allí. Verás que él mismo te dice lo que tienes que hacer.
Cuando se acueste, observarás bien el lugar donde se acueste. Irás, alzarás la cubierta de sus pies, y te acostarás allí. Él te dirá lo que debes hacer.
Cuando él se acueste, observa el lugar donde se acuesta y anda, destapa un sitio a sus pies y acuéstate allí. Y él te dirá lo que debes hacer.
Y cuando se vaya a dormir, fíjate en dónde se acuesta; y ve luego y levanta el manto con que se cubre los pies. Entonces él te dirá lo que tienes que hacer.»
Y cuando él se acostare, repara tú el lugar donde él se acostará, é irás, y descubrirás los pies, y te acostarás allí; y él te dirá lo que hayas de hacer.
Fíjate bien dónde va a acostarse. Cuando ya esté dormido, ve y acuéstate a su lado. Así él sabrá que tú le estás pidiendo su protección, y él mismo te dirá lo que debes hacer.
Fíjate bien dónde va a acostarse. Cuando ya esté dormido, ve y acuéstate a su lado. Así él sabrá que tú le estás pidiendo su protección, y él mismo te dirá lo que debes hacer.
Es aconsejable tomar siempre en consideración el versículo Rut, 3:4 de La Santa Biblia con el propósito de reflexionar sobre él.Tal vez sería adecuado preguntarse ¿Qué pretendía manifestarnos Dios Nuestro Señor con el versículo Rut, 3:4? ¿Cuáles serán las coyunturas de nuestra vida cotidiana en que podemos aplicar lo que hemos aprendido gracias al versículo Rut, 3:4 de La Sagrada Biblia?
Dedicar tiempo a la meditación acerca de el versículo Rut, 3:4 nos ayuda a ser más agradables a los ojos de el Creador del Cielo y de la Tierra y a acercarnos más a Dios, por eso es conveniente acudir al versículo Rut, 3:4 todas y cada una de las veces que necesitemos una luz que nos guíe y así saber cómo actuar o para traer paz a nuestros corazones.
