19
Ciudades de refugio
(Nm 35:9-28)
1El SEÑOR tu Dios destruirá a las naciones que están en la tierra que el SEÑOR te da. Expulsarás a sus habitantes y te establecerás en sus ciudades y en sus casas. 2Cuando hagas esto, debes separar tres ciudades de en medio de la tierra que el SEÑOR tu Dios te da como propiedad. 3Dividirás en tres partes la tierra que el SEÑOR te da como herencia y escoge una ciudad en medio de cada parte para que sirva de ciudad de refugio. Arreglarás el camino que conduce hacia ellas para que cualquiera que mate a alguien pueda ir a refugiarse a ellas.
4Esta es la ley para la gente que mate a alguien y vaya allí para salvar la vida, o sea para el que mate a otro por accidente. No puede haber odiado antes a la víctima. 5Por ejemplo, si alguna persona va con alguien al bosque a cortar leña, y al levantar su hacha para cortar un árbol la cabeza del hacha se sale del mango, le pega a la otra persona y la mata, el que la mató puede huir a una de esas ciudades para salvar su vida. 6De otra manera, si la distancia a la ciudad es muy larga, el pariente del muerto#19:6 pariente del muerto Textualmente redentor de la sangre. Se trataba generalmente de un pariente o amigo del muerto, quien tenía el deber de buscar al asesino y matarlo. podría, estando muy enojado, perseguir al asesino, agarrarlo y matarlo, a pesar que no merecía la muerte porque no había odiado antes al difunto. 7Así que te ordeno que apartes tres ciudades.
8El SEÑOR tu Dios les prometió a tus antepasados que aumentaría tu territorio. Él te dará toda la tierra que prometió darles a tus antepasados. 9Lo hará si cumples cuidadosamente todo lo que hoy te mandé, si amas siempre al SEÑOR tu Dios viviendo como él quiere. Entonces deberás añadir tres ciudades más a estas tres. 10De esta forma ninguna persona inocente será asesinada en la tierra que el SEÑOR tu Dios te da como herencia, y no serás culpable de causar la muerte de gente inocente.
11Pero puede darse el caso de que alguien odie a otro, le prepare una emboscada, lo ataque y lo golpee de tal manera que lo mate, y luego vaya y se refugie en una de esas ciudades. 12En ese caso, los ancianos líderes de su ciudad mandarán que lo arresten y lo entreguen al pariente del difunto para que lo mate. 13No tendrás misericordia de él y así Israel se librará del derramamiento de sangre inocente para que te vaya bien.
14No debes mover la piedra que marca el límite de la tierra de tu vecino, la que tus antepasados ubicaron en la propiedad. No harás esto en la tierra que el SEÑOR tu Dios te da como propiedad.
Testigos
15Un solo testigo no es suficiente para inculpar a alguien acusado de haber cometido algún crimen o pecado. El asunto debe ser juzgado con la palabra de dos o tres testigos.
16Se puede dar el caso de que un testigo perverso se presente y dé falso testimonio en contra de alguien. 17Los dos hombres que tienen la disputa se presentarán ante el SEÑOR, y ante los sacerdotes y jueces que estén de servicio en esos días. 18Entonces los sacerdotes investigarán cuidadosamente si el testigo dio falso testimonio en contra de su hermano. 19Si se comprueba el falso testimonio, entonces le harás al testigo que dio falso testimonio lo mismo que él planeaba hacerle a su hermano. Así quitarás el pecado de en medio de ti. 20El resto de la gente se enterará de esto y tendrá temor. Ellos nunca más harán una maldad de esta clase.
21No tendrás compasión de él: una vida se pagará con otra vida, un ojo con otro ojo, un diente con otro diente, una mano con otra mano y un pie con otro pie.
Desde el inicio de los tiempos Dios se comunica con nosotros. Para ello la sagrada Biblia es un vehículo muy poderoso, ya que es la palabra del Señor plasmada en negro sobre blanco. Como ya sabrás, existen varias versiones de las Sagradas Escrituras, hechas en pos de una mejor comprensión de la palabra del Señor. En la versión 'La Biblia: La Palabra de Dios para todos' encontramos que el capítulo 19 del Deuteronomio se nos muestra de la forma que podemos ver a continuación.
El libro Deuteronomio de la Biblia tiene 34 capítulos. Y en el capítulo 19 podemos encontrar 21 versículos, en los que Dios nos revela sus enseñanzas y nos indica a través de su inmensa sabiduría, amor y bondad, la forma en la que debemos obrar y acercarnos a Él.
No nos cabe duda de que leyendo el capítulo 19 del libro Deuteronomio de la versión 'La Biblia: La Palabra de Dios para todos' de la Sagrada Biblia te será fácil comprender como nuestro amado Padre nunca nos deja solos, y que en los textos que dejó para nosotros es posible hallar todas las respuestas que necesitamos. Recuerda que siempre puedes leer el capítulo 19 en alguna de las otras versiones de la Biblia que tenemos para ti, aunque es un ejercicio muy interesante que hayas optado por leer ahora el capítulo 19 de la versión 'La Biblia: La Palabra de Dios para todos' de la Santa Biblia.