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Deuteronomio, 25:12

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Deuteronomio, 25:12

ustedes ordenarán sin ninguna compasión que se le corte la mano a la mujer.


La cortarás entonces la mano, no la perdonará tu ojo.


le cortarás entonces la mano; no la perdonarás.


le cortarás entonces la mano; no la perdonarás.


le cortarás entonces la mano, no la perdonará tu ojo.


Entonces cortarlehás la mano, no perdonará tu ojo.


ustedes ordenarán sin ninguna compasión que se le corte la mano a la mujer.


ustedes ordenarán sin ninguna compasión que se le corte la mano a la mujer.


le cortarás a ella la mano sin contemplaciones.


entonces le cortarás su mano; no tendrás piedad.


entonces le debes cortar la mano a ella; no le tengas compasión.


le cortarás a ella la mano sin contemplaciones.


se le cortará la mano a la mujer inmediatamente y sin misericordia


entonces le cortarás su mano; no tendrás piedad.


tendrás que cortarle la mano. No le muestres compasión.


tú le cortarás a ella la mano. No le tendrás compasión.


entonces le cortarás su mano. No le tendrás compasión.


entonces le cortarás la mano a ella. Tu ojo no le tendrá lástima.


tú no la perdonarás sino que le cortarás la mano.


La cortarás entonces la mano, no la perdonará tu ojo.


ustedes deberán cortarle la mano a esa mujer. No le tengan piedad.


ustedes deberán cortarle la mano a esa mujer. No le tengan piedad.


Es muy recomendable tener continuamente presente el versículo Deuteronomio, 25:12 de los Textos Sagrados que componen la Biblia de manera que podamos analizarlo y pensar en torno a él. ¿Qué quiso manifestarnos Dios con el versículo Deuteronomio, 25:12? ¿Cuáles son los momentos de nuestra vida cotidiana en que podemos poner en práctica lo que hemos alcanzado a saber gracias al versículo Deuteronomio, 25:12 de la Santa Biblia?

Meditar acerca de el versículo Deuteronomio, 25:12 nos es de gran ayuda a ser capaces de acercarnos más al mensaje de Nuestro Señor y a elevar nuestra alma hacia Dios, por ese motivo es oportuno servirse del versículo Deuteronomio, 25:12 cada vez que pueda servirnos de guía de modo que podamos saber en qué forma acturar o para traer el sosiego a nuestros corazones y almas.