Y mientras más sabio llegó a ser el Predicador, más conocimientos impartió a la gente. También se dio a la tarea de estudiar gran número de proverbios, y de clasificarlos ordenadamente.
Y cuanto más sabio fué el Predicador, tanto más enseñó sabiduría al pueblo; é hizo escuchar, é hizo escudriñar, y compuso muchos proverbios.
Y cuanto más sabio fue el Predicador, tanto más enseñó sabiduría al pueblo; e hizo escuchar, e hizo escudriñar, y compuso muchos proverbios.
Cuanto más sabio fue el Predicador, tanto más enseñó sabiduría al pueblo. Escuchó, escudriñó y compuso muchos proverbios.
Y cuanto más sabio fue el Predicador, tanto más enseñó sabiduría al pueblo; e hizo escuchar, e hizo escudriñar, y compuso muchos proverbios.
Y quanto mas el Predicador fue sabio, tanto mas enseñó ſabiduria àl pueblo: y hizo escuchar, y hizo escudriñar; y compuso muchos prouerbios.
Y mientras más sabio llegó a ser el Predicador, más conocimientos impartió a la gente. También se dio a la tarea de estudiar gran número de proverbios, y de clasificarlos ordenadamente.
Y mientras más sabio llegó a ser el Predicador, más conocimientos impartió a la gente. También se dio a la tarea de estudiar gran número de proverbios, y de clasificarlos ordenadamente.
Cohélet, además de ser un sabio, también instruyó al pueblo; investigó, estudió y compuso muchos proverbios.
El Predicador, además de ser sabio, enseñó también sabiduría al pueblo; y ponderó, investigó y compuso muchos proverbios.
El Maestro fue muy sabio y usó su inteligencia para educar a la gente. Estudió y preparó cuidadosamente gran cantidad de sabias enseñanzas.
Cohélet, además de ser un sabio, también instruyó al pueblo; investigó, estudió y compuso muchos proverbios.
Pero luego, ya que el Predicador era sabio, continuó enseñándole al pueblo todo lo que sabía; y recogió proverbios y los clasificó.
El Predicador, además de ser sabio, enseñó también sabiduría al pueblo; y reflexionó, investigó y compuso muchos proverbios.
Ten en cuenta lo siguiente: el Maestro fue considerado sabio y le enseñó a la gente todo lo que sabía. Escuchó con atención muchos proverbios, los estudió y los clasificó.
Además de ser sabio, el Maestro impartió conocimientos a la gente. Ponderó, investigó y ordenó muchísimos proverbios.
Cuanto más sabio fue el Predicador, Tanto más impartió su conocimiento al pueblo. Reflexionó y escudriñó. Compuso muchos proverbios.
Y cuanto más sabio fue el Predicador, tanto más enseñó sabiduría al pueblo. También sopesó, investigó y compuso muchos proverbios.
Mientras más sabio llegó a ser el Predicador, más conocimientos impartió a la gente. Ponderó, escudriñó y compuso muchos proverbios.
Y cuanto más sabio fué el Predicador, tanto más enseñó sabiduría al pueblo; é hizo escuchar, é hizo escudriñar, y compuso muchos proverbios.
Entre otras cosas, el Predicador se dedicó a enseñar a otros todo lo que sabía. Todo lo estudiaba con cuidado y lo investigaba a fondo. Además, hizo una gran colección de proverbios.
Entre otras cosas, el Predicador se dedicó a enseñar a otros todo lo que sabía. Todo lo estudiaba con cuidado y lo investigaba a fondo. Además, hizo una gran colección de proverbios.
El versiculo Eclesiastés, 12:9 de La Biblia es algo que es preciso tener en todo momento presente con la finalidad de reflexionar en torno a él. ¿Qué quiso manifestarnos Dios Nuestro Señor con el versículo Eclesiastés, 12:9? ¿En qué ocasiones de nuestra vida diaria podemos aprovechar lo que hemos aprendido gracias al versículo Eclesiastés, 12:9 de La Sagrada Biblia?
El hecho de reflexionar sobre el versículo Eclesiastés, 12:9 es un gran aporte que nos permite a ser mejores cristianos y a aproximarnos más a Dios, ese es el motivo por el cual es conveniente apoyarse en el versículo Eclesiastés, 12:9 todas y cada una de las veces que necesitemos una luz que nos guíe de modo que podamos saber cómo proceder o para traer la serenidad a nuestro espíritu.