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Hageo, 2:4

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Hageo, 2:4

¡Pero ánimo, Zorobabel! ¡Ánimo, Josué, jefe de los sacerdotes! Y anímense todos ustedes, gente del país. Trabajen, que yo estoy con ustedes. Yo, el Señor todopoderoso, lo afirmo.


Pues ahora, Zorobabel, esfuérzate, dice Jehová; esfuérzate también Josué, hijo de Josadac, gran sacerdote; y cobra ánimo, pueblo todo de la tierra, dice Jehová, y obrad: porque yo soy con vosotros, di


Pues ahora, Zorobabel, esfuérzate, dice Jehová; esfuérzate también, Josué hijo de Josadac, sumo sacerdote; y cobrad ánimo, pueblo todo de la tierra, dice Jehová, y trabajad; porque yo estoy con vosotr


Pues ahora, Zorobabel, anímate, dice Jehová; anímate tú también, sumo sacerdote Josué hijo de Josadac; cobrad ánimo, pueblo todo de la tierra, dice Jehová, y trabajad, porque yo estoy con vosotros, di


Pues ahora, Zorobabel, esfuérzate, dijo el SEÑOR; esfuérzate también Josué, hijo de Josadac, sumo sacerdote; y esfuérzate todo el pueblo de esta tierra, dijo el SEÑOR, y obrad; porque Yo estoy con vos


Quien ha quedado entre vosotros que aya viſto eſta Caſa en ſu primera gloria, y qual aora la veys? Ella no es como nada delante de vuestros ojos?


¡Pero ánimo, Zorobabel! ¡Ánimo, Josué, jefe de los sacerdotes! Y anímense todos ustedes, gente del país. Trabajen, que yo estoy con ustedes. Yo, el Señor todopoderoso, lo afirmo.


¡Pero ánimo, Zorobabel! ¡Ánimo, Josué, jefe de los sacerdotes! Y anímense todos ustedes, gente del país. Trabajen, que yo estoy con ustedes. Yo, el Señor todopoderoso, lo afirmo.


Sin embargo, anímate Zorobabel —oráculo del Señor—, anímate sumo sacerdote Josué, hijo de Josadac, y que se anime toda la gente del país —oráculo del Señor—. Pongan manos a la obra porque yo estoy con


Pero ahora, esfuérzate, Zorobabel» —declara el SEÑOR— «esfuérzate tú también, Josué, hijo de Josadac, sumo sacerdote, y esforzaos todos vosotros, pueblo de la tierra» —declara el SEÑOR— «y trabajad, p


Pero el SEÑOR dice: ¡Anímate, Zorobabel! ¡Anímate, Josué hijo de Josadac, sumo sacerdote! ¡Anímate, pueblo de este país!, dice el SEÑOR. Continúen trabajando, porque yo estoy con ustedes, dice el SEÑO


Sin embargo, anímate Zorobabel —oráculo del Señor—, anímate sumo sacerdote Josué, hijo de Josadac, y que se anime toda la gente del país —oráculo del Señor—. Pongan manos a la obra porque yo estoy con


¡Anímate, Zorobabel! ¡Anímate, jefe de los sacerdotes Josué, hijo de Josadac! ¡Anímense todos, y pónganse a trabajar para lograr un templo magnífico, porque yo estoy con todos ustedes apoyándolos! Lo


Pero ahora, esfuérzate, Zorobabel”, declara el SEÑOR, “esfuérzate tú también, Josué, hijo de Josadac, sumo sacerdote, y esfuércense todos ustedes, pueblo de la tierra”, declara el SEÑOR, “y trabajen,


Sin embargo, ahora el SEÑOR dice: Zorobabel, sé fuerte. Jesúa, hijo de Jehosadac, sumo sacerdote, sé fuerte. Ustedes que aún quedan en la tierra, sean fuertes. Así que ahora, ¡manos a la obra!, porque


Pues ahora, ¡ánimo, Zorobabel! —afirma el SEÑOR—. ¡Ánimo, Josué hijo de Josadac! ¡Tú eres el sumo sacerdote! ¡Ánimo, pueblo de esta tierra! —afirma el SEÑOR—. ¡Manos a la obra, que yo estoy con ustede


Ahora pues, esfuérzate, Zorobabel, dice YAVÉ. Esfuérzate tú también, Josué, hijo del sumo sacerdote Josadac, y esfuércese todo el pueblo de esta tierra. Actúen, porque Yo estoy con ustedes, dice YAVÉ


Ahora pues, esfuérzate, oh Zorobabel, dice el SEÑOR; esfuérzate también tú, oh Josué hijo de Josadac, sumo sacerdote. Esfuércese todo el pueblo de la tierra, dice el SEÑOR, y actúen; porque yo estoy c


Pues esfuérzate ahora, Zorobabel, y esfuérzate también tú, Josué hijo de Josadac, sumo sacerdote; y ustedes, pueblo todo de la tierra, ¡cobren ánimo y pónganse a trabajar, que yo estoy con ustedes! —P


Pues ahora, Zorobabel, esfuérzate, dice Jehová; esfuérzate también Josué, hijo de Josadac, gran sacerdote; y cobra ánimo, pueblo todo de la tierra, dice Jehová, y obrad: porque yo soy con vosotros, di


Pero yo soy el Dios de Israel y estoy contigo, Zorobabel, con Josué y con todo el pueblo; ¡anímense y pongan manos a la obra!


Pero yo soy el Dios de Israel y estoy contigo, Zorobabel, con Josué y con todo el pueblo; ¡anímense y pongan manos a la obra!


El versiculo Hageo, 2:4 de La Santa Biblia consiste en algo que nos conviene tomar continuamente en consideración de tal forma que podamos meditar sobre él.Tal vez sería bueno preguntarse ¿Qué pretendía manifestarnos el Señor con el versículo Hageo, 2:4? ¿En qué momentos de nuestra vida cotidiana podemos hacer valer lo que hemos llegado a saber gracias al versículo Hageo, 2:4 de la Santa Biblia?

Meditar sobre el versículo Hageo, 2:4 nos es de gran ayuda a ser mejores cristianos y a aproximarnos más a Dios, por eso es oportuno apoyarse en el versículo Hageo, 2:4 cada vez que nos pueda servir de guía y así saber cómo proceder o para traer la serenidad a nuestras almas.