Oseas, 13:5
Yo te cuidé en las tierras ardientes del desierto.
Yo te conocí en el desierto, en tierra seca.
Yo te conocí en el desierto, en tierra seca.
Yo te conocí en el desierto, en tierra seca.
Yo te conocí en el desierto, en tierra seca.
Yo te conoci en el desierto, en tierra ſeca.
Yo te cuidé en las tierras ardientes del desierto.
Yo te cuidé en las tierras ardientes del desierto.
te he conocido en el desierto, en una tierra abrasadora.
Yo te cuidé en el desierto, en tierra muy seca.
Te conocí en el desierto, en esa tierra seca.
te he conocido en el desierto, en una tierra abrasadora.
Yo los cuidé en el desierto, en esa tierra árida y sedienta por donde anduvieron tanto tiempo.
Yo te cuidé en el desierto, En tierra muy árida.
Yo te cuidé en el desierto, en esa tierra árida y sedienta
Porque yo cuidé de ti en el desierto, en esa tierra de terrible aridez.
Yo te conocí en el desierto, en tierra de sequedad.
Yo te conocí en el desierto, en tierra de sequedad.
Yo te conocí en la aridez del desierto.
Yo te conocí en el desierto, en tierra seca.
Yo te cuidé y te alimenté cuando andabas por el desierto; pero te llenaste de orgullo y te olvidaste de mí en cuanto calmaste tu hambre.
Yo te cuidé y te alimenté cuando andabas por el desierto; pero te llenaste de orgullo y te olvidaste de mí en cuanto calmaste tu hambre.
Es preciso tomar continuamente en consideración el versículo Oseas, 13:5 de los Textos Sagrados que componen la Biblia con el objetivo de reflexionar en torno a él.Tal vez sería bueno preguntarse ¿Qué intentaba manifestarnos Dios Nuestro Señor con el versículo Oseas, 13:5? ¿Cuáles son las ocasiones de nuestra vida cotidiana en que tenemos la oportunidad de hacer valer aquello que aprendemos gracias al versículo Oseas, 13:5 de La Biblia?
Dedicar tiempo a la meditación sobre el versículo Oseas, 13:5 nos es de gran ayuda a ser capaces de acercarnos más al mensaje de Nuestro Señor y a elevar nuestra alma hacia Dios, por ese motivo es oportuno apoyarse en el versículo Oseas, 13:5 cuando creamos que precisemos que la palabra de Dios, Nuestro Señor nos indique el camino a seguir para saber cómo actuar o para traer la serenidad a nuestros corazones y almas.
