Y yo le contesté: «Pero, Señor; los profetas le están diciendo al pueblo que no va a haber guerra ni hambre, y que tú le vas a conceder una paz duradera en este lugar.»
Y yo dije: ¡Ah! ah! Señor Jehová! he aquí que los profetas les dicen: No veréis cuchillo, ni habrá hambre en vosotros, sino que en este lugar os daré paz verdadera.
Y yo dije: ¡Ah! ¡Ah, Señor Jehová! He aquí que los profetas les dicen: No veréis espada, ni habrá hambre entre vosotros, sino que en este lugar os daré paz verdadera.
Yo dije: «¡Ah, ah, Señor, Jehová!, mira que los profetas les dicen: “No veréis espada ni habrá hambre entre vosotros, sino que en este lugar os daré paz verdadera.”»
Y yo dije: ¡Ah! ¡ah! ¡Señor DIOS! He aquí que los profetas les dicen: No veréis espada, ni habrá hambre en vosotros, sino que en este lugar os daré paz verdadera.
Y yo dixe, Como Señor Iehoua, heaqui que los prophetas les dizẽ, No vereys cuchillo, ni aurá hambre en vosotros: mas eneste lugar os daré paz firme.
Y yo le contesté: «Pero, Señor; los profetas le están diciendo al pueblo que no va a haber guerra ni hambre, y que tú le vas a conceder una paz duradera en este lugar.»
Y yo le contesté: «Pero, Señor; los profetas le están diciendo al pueblo que no va a haber guerra ni hambre, y que tú le vas a conceder una paz duradera en este lugar.»
Yo respondí: — ¡Ay, Señor mi Dios! La culpa es de los profetas que les dicen: “No verán la espada ni pasarán hambre; les concederé permanente seguridad en este lugar”.
Y yo dije: ¡Ah, Señor DIOS! He aquí, los profetas les dicen: «No veréis espada ni tendréis hambre, sino que os daré paz verdadera en este lugar».
Y yo dije: «¿Cómo así, Señor DIOS? Pues los profetas le dicen a la gente que no teman al hambre ni a la guerra porque nunca pasarán por eso, sino que tú les darás paz permanente en este lugar».
Yo respondí: —¡Ay, Señor mi Dios! La culpa es de los profetas que les dicen: «No verán la espada ni pasarán hambre; les concederé permanente seguridad en este lugar».
Entonces dije yo: ¡Oh SEÑOR Dios, sus profetas les dicen que todo anda bien, que no habrá ni guerra ni hambre; le dicen al pueblo que tú sin duda les enviarás paz, que tú los bendecirás!
Pero yo dije: «¡Ah, Señor DIOS! Los profetas les dicen: “No verán espada ni tendrán hambre, sino que les daré paz verdadera en este lugar” ».
Luego dije: —Oh SEÑOR Soberano, sus profetas les dicen: “Todo está bien, no vendrá guerra ni hambre. El SEÑOR ciertamente les enviará paz”.
Pero yo respondí: «¡Ah, mi SEÑOR y Dios! Los profetas les dicen que no se enfrentarán con la espada ni pasarán hambre, sino que tú concederás una paz duradera en este lugar».
Entonces dije: Oh, ʼADONAY YAVé. Mira, los profetas les dicen: No verán espada ni tendrán hambre, sino les daré paz duradera en este lugar.
Y yo dije: —¡Oh, SEÑOR Dios! He aquí que los profetas les dicen: “No verán espada ni les sobrevendrá el hambre; sino que en este lugar les daré verdadera paz”.
Yo le contesté: «¡Ay, Señor, Señor! Toma en cuenta que los profetas les dicen que no van a enfrentar la espada, y que tampoco sufrirán de hambre, sino que en este lugar les darás una paz duradera.»
Y yo dije: Ah! ah! Señor Jehová! he aquí que los profetas les dicen: No veréis cuchillo, ni habrá hambre en vosotros, sino que en este lugar os daré paz verdadera.
Yo le respondí: «¡Poderoso Dios de Israel! Hay profetas que le aseguran a tu pueblo que no habrá guerra ni van a pasar hambre; dicen que tú los dejarás aquí para siempre, y que vivirán en paz».
Yo le respondí: «¡Poderoso Dios de Israel! Hay profetas que le aseguran a tu pueblo que no habrá guerra ni van a pasar hambre; dicen que tú los dejarás aquí para siempre, y que vivirán en paz».
El versiculo Jeremías, 14:13 de La Sagrada Biblia consiste en algo que es aconsejable tener constantemente presente con el propósito de analizarlo y pensar en torno a él. Acaso deberíamos hacernos la pregunta ¿Qué trataba de proponernos el Señor con el versículo Jeremías, 14:13? ¿En qué momentos de nuestro día a día tenemos la oportunidad de recurrir a aquello que hemos alcanzado a saber gracias al versículo Jeremías, 14:13 de la Santa Biblia?
El hecho de reflexionar en torno a lo que se refiere el versículo Jeremías, 14:13 nos ayuda a ser mejores cristianos y a aproximarnos más a Dios, esa es la razón por la cual es aconsejable servirse del versículo Jeremías, 14:13 todas y cada una de las veces que nos pueda servir de guía de modo que podamos saber cómo actuar o para traer paz a nuestros corazones.