Levítico, 6:8
8 (1) El Señor se dirigió a Moisés y le dijo
Habló aún Jehová á Moisés, diciendo
Habló aún Jehová a Moisés, diciendo
Habló Jehová a Moisés y le dijo
¶ Habló aún el SEÑOR a Moisés, diciendo
¶ Habló mas Iehoua à Moyſen diziendo
Uno de ellos tomará un puñado de la harina ofrendada y de su aceite, junto con todo el incienso que va con la ofrenda, y los hará arder en el altar como ofrenda quemada de recordación, de aroma agrada
8 (1) El Señor se dirigió a Moisés y le dijo
Se tomará un puñado de flor de harina de la ofrenda de cereal, junto con el aceite y con todo el incienso que corresponda a la ofrenda, y lo quemará sobre el altar como porción simbólica de olor grato
Y el SEÑOR habló a Moisés, diciendo
El SEÑOR le dijo a Moisés
Se tomará un puñado de flor de harina de la ofrenda de cereal, junto con el aceite y con todo el incienso que corresponda a la ofrenda, y lo quemará sobre el altar como porción simbólica de olor grato
Además, el SEÑOR le dijo a Moisés
Entonces el SEÑOR le dijo a Moisés
Entonces el SEÑOR le dijo a Moisés
El SEÑOR le dijo a Moisés
Y YAVé habló a Moisés
El SEÑOR habló a Moisés diciendo
El Señor habló con Moisés, y le instruyó
Habló aún Jehová á Moisés, diciendo
8 (1) Dios también le ordenó a Moisés
8 (1) Dios también le ordenó a Moisés
El versiculo Levítico, 6:8 de La Santa Biblia es algo que es aconsejable tener siempre presente a fin de meditar en torno a él. Acaso deberíamos preguntarnos ¿Qué intentaba decirnos Dios Padre con el versículo Levítico, 6:8? ¿En qué momentos de nuestro día a día seremos capaces de recurrir a aquello que hemos alcanzado a saber gracias al versículo Levítico, 6:8 de la Santa Biblia?
Meditar acerca de el versículo Levítico, 6:8 nos ayuda a ser capaces de acercarnos más al mensaje de Nuestro Señor y a acercarnos más a Dios, esa es la razón por la cual es aconsejable recurrir al versículo Levítico, 6:8 todas y cada una de las veces que precisemos que la palabra de Dios, Nuestro Señor nos indique el camino a seguir y así saber qué pasos dar o para traer paz a nuestro espíritu.
