Salmos, 6:9
9 (10) El Señor ha escuchado mis ruegos, ¡el Señor ha aceptado mi oración!
Jehová ha oído mi ruego; Ha recibido Jehová mi oración.
Jehová ha oído mi ruego; Ha recibido Jehová mi oración.
Jehová ha oído mi ruego; ha recibido Jehová mi oración.
El SEÑOR ha oído mi ruego; el SEÑOR ha recibido mi oración.
Apartaos demi todos los obradores de iniquidad: porque Iehoua há oydo la boz demi lloro.
¡Apártense de mí, malhechores, que el Señor ha escuchado mis sollozos!
9 (10) El Señor ha escuchado mis ruegos, ¡el Señor ha aceptado mi oración!
¡Aléjense de mí, malvados, porque el Señor ha escuchado mi llanto!
El SEÑOR ha escuchado mi súplica; el SEÑOR recibe mi oración.
El SEÑOR escuchó mis ruegos; el SEÑOR aceptó mi oración.
El Señor ha escuchado mi ruego, el Señor ha acogido mi súplica.
y mi súplica. Él responderá a todas mis oraciones.
El SEÑOR ha escuchado mi súplica; El SEÑOR recibe mi oración.
El SEÑOR ha escuchado mi ruego; el SEÑOR responderá a mi oración.
El SEÑOR ha escuchado mis ruegos; el SEÑOR ha tomado en cuenta mi oración.
YAVÉ escuchó mi súplica. YAVÉ recibió mi oración
¡El SEÑOR ha escuchado mi ruego! ¡El SEÑOR ha aceptado mi oración!
El Señor ha atendido mis ruegos y ha aceptado mis oraciones.
Jehová ha oído mi ruego; Ha recibido Jehová mi oración.
8-9 (9-10) ¡Gente malvada, apártense de mí, porque Dios ha escuchado mis ruegos y ha aceptado mi oración!
8-9 (9-10) ¡Gente malvada, apártense de mí, porque Dios ha escuchado mis ruegos y ha aceptado mi oración!
El versiculo Salmos, 6:9 de La Biblia consiste en algo que es aconsejable tomar continuamente en consideración con el propósito de analizarlo y pensar sobre él.Quizás sería bueno preguntarse ¿Qué intentaba decirnos Dios Padre con el versículo Salmos, 6:9? ¿En qué momentos de nuestra vida cotidiana tenemos la oportunidad de recurrir a lo que aprendemos gracias al versículo Salmos, 6:9 de La Biblia?
Dedicar tiempo a la meditación en torno a lo que se refiere el versículo Salmos, 6:9 nos supone una ayuda a ser más agradables a los ojos de el Creador del Cielo y de la Tierra y a elevar nuestra alma hacia Dios, ese es el motivo por el cual es oportuno apoyarse en el versículo Salmos, 6:9 en todas aquellas ocasiones en que necesitemos palabras que nos inspiren y guíen y así saber cómo proceder o para traer el sosiego a nuestro espíritu.
