De esta manera, David le pagó a Ornán por aquel lugar seiscientas monedas de oro
Entonces el rey David dijo á Ornán: No, sino que efectivamente la compraré por su justo precio: porque no tomaré para Jehová lo que es tuyo, ni sacrificaré holocausto que nada me cueste.
Y dio David a Ornán por aquel lugar el peso de seiscientos siclos de oro.
Y dio David a Ornán por aquel lugar la suma de seiscientos siclos de oro.
Y dio David a Ornán por el lugar seiscientos siclos de oro por peso.
Entonces el rey Dauid dixo à Ornã: No, ſino comprando lo compraré por dinero cumplido: porque no tomaré para Iehoua lo que es tuyo, ni sacrificaré holo causto de gracia.
De esta manera, David le pagó a Ornán por aquel lugar seiscientas monedas de oro
De esta manera, David le pagó a Ornán por aquel lugar seiscientas monedas de oro
Y David pagó a Ornán la suma de seiscientos siclos de oro por el terreno.
Y David dio a Ornán el peso de seiscientos siclos de oro por el lugar.
Así que David le pagó a Ornán el equivalente a 600 monedas de oro por el lugar.
Y David pagó a Ornán la suma de seiscientos siclos de oro por el terreno.
Entonces, David le dio a Ornán seiscientas monedas de oro por el terreno.
Y David dio a Ornán el peso de 600 siclos (6.84 kilos) de oro por el lugar.
Así que David le dio a Arauna seiscientas piezas de oro en pago por el campo de trillar.
Fue así como David dio a Arauna seiscientos siclos de oro por aquel lugar.
David pagó a Ornán por aquel lugar el peso de 6,6 kilogramos de oro.
Entonces David dio a Ornán por el lugar el peso de seis kilos y medio de oro.
Y David pesó y le pagó a Ornán por la era seiscientas monedas de oro.
Y dió David á Ornán por el lugar seiscientos siclos de oro por peso.
Luego mandó a un ángel para que destruyera Jerusalén. El ángel salió y comenzó a destruir Jerusalén justo en donde Ornán el jebuseo limpiaba el trigo. El ángel volaba y tenía una espada en la mano. Da
Luego mandó a un ángel para que destruyera Jerusalén. El ángel salió y comenzó a destruir Jerusalén justo en donde Ornán el jebuseo limpiaba el trigo. El ángel volaba y tenía una espada en la mano. Da
El versiculo 1 Crónicas, 21:25 de La Santa Biblia es algo que nos conviene tomar continuamente en consideración a fin de reflexionar acerca de él. ¿Qué intentaba manifestarnos Dios con el versículo 1 Crónicas, 21:25? ¿En qué ocasiones de nuestra vida cotidiana seremos capaces de poner en práctica aquello que hemos alcanzado a saber gracias al versículo 1 Crónicas, 21:25 de Las Sagradas Escrituras?
Dedicar tiempo a la meditación en torno a lo que se refiere el versículo 1 Crónicas, 21:25 nos resulta fundamental para llegar a a ser mejores cristianos y a aproximarnos más a Dios, esa es la razón por la cual es conveniente acudir al versículo 1 Crónicas, 21:25 todas y cada una de las veces que pueda servirnos de guía y así saber qué pasos dar o para traer paz a nuestras almas.