Jabés oró al Dios de Israel, diciendo: «Te ruego que me des tu bendición y un territorio muy grande, que me ayudes y me libres de males, para que yo no sufra.» Y Dios le concedió lo que le había pedid
E invocó Jabes al Dios de Israel, diciendo: ¡Oh si me dieras bendición, y ensancharas mi término, y si tu mano fuera conmigo, y me libraras de mal, que no me dañe! E hizo Dios que le viniese lo que pi
E invocó Jabes al Dios de Israel, diciendo: ¡Oh, si me dieras bendición, y ensancharas mi territorio, y si tu mano estuviera conmigo, y me libraras de mal, para que no me dañe! Y le otorgó Dios lo que
Invocó Jabes al Dios de Israel diciendo: «Te ruego que me des tu bendición, que ensanches mi territorio, que tu mano esté conmigo y que me libres del mal, para que no me dañe.» Y le otorgó Dios lo que
E invocó Jabes al Dios de Israel, diciendo: ¡Oh si me dieras bendición, y ensancharas mi término, y si tu mano fuera conmigo, y me libraras de mal, que no me dañe! E hizo Dios que le viniera lo que pi
Y inuocó Iabes àl Dios de Iſrael diziẽdo, Si me dieres bendiciõ, y ensanchâres mi termino, y ſi tu mano fuere cõmigo, y me libráres de mal, que no me empezca &c. Y hizo Dios que le vinieſſe, loque pid
Jabés oró al Dios de Israel, diciendo: «Te ruego que me des tu bendición y un territorio muy grande, que me ayudes y me libres de males, para que yo no sufra.» Y Dios le concedió lo que le había pedid
Jabés oró al Dios de Israel, diciendo: «Te ruego que me des tu bendición y un territorio muy grande, que me ayudes y me libres de males, para que yo no sufra.» Y Dios le concedió lo que le había pedid
Jabés clamó al Dios de Israel: “Bendíceme, ensancha mis fronteras, ayúdame y líbrame de la desgracia para que no sufra”. Y Dios le concedió lo que había pedido.
Jabes invocó al Dios de Israel, diciendo: ¡Oh, si en verdad me bendijeras, ensancharas mi territorio, y tu mano estuviera conmigo y me guardaras del mal para que no me causara dolor! Y Dios le concedi
Jabés oro así al Dios de Israel: «Te ruego que me bendigas y aumentes mi territorio. Quédate junto a mí y líbrame del mal para que yo no pase sufrimiento». Dios le concedió lo que pidió.
Jabés clamó al Dios de Israel: «Bendíceme, ensancha mis fronteras, ayúdame y líbrame de la desgracia para que no sufra». Y Dios le concedió lo que había pedido.
Fue el mismo que oró al Dios de Israel diciendo: «¡Te ruego que me bendigas más todavía. Que ensanches mis fronteras y que estés conmigo para librarme del mal y que nadie me dañe!». Y Dios le concedió
Jabes invocó al Dios de Israel, diciendo: «¡Oh, si en verdad me bendijeras, ensancharas mi territorio, y Tu mano estuviera conmigo y me guardaras del mal para que no me causara dolor!». Y Dios le conc
Él fue quien oró al Dios de Israel diciendo: «¡Ay, si tú me bendijeras y extendieras mi territorio! ¡Te ruego que estés conmigo en todo lo que haga, y líbrame de toda dificultad que me cause dolor!»;
Jabés le rogó al Dios de Israel: «Bendíceme y ensancha mi territorio; ayúdame y líbrame del mal, para que no padezca aflicción». Y Dios le concedió su petición.
Jabes invocó al ʼELOHIM de Israel: ¡Oh, que me des bendición y ensanches mi territorio, que tu mano esté conmigo y me libres del mal, para que no me dañe! Y ʼELOHIM le concedió lo que pidió.
Y Jabes invocó al Dios de Israel diciendo: “¡Oh, si realmente me dieras bendición y ensancharas mi territorio, y tu mano estuviera conmigo y me libraras del mal, de modo que no tuviera dolor!”. Y Dios
Y Jabés invocó al Dios de Israel. Dijo: «¡Cómo quisiera que me des tu bendición, que ensanches mi territorio, que tu mano esté conmigo y que me libres del mal, para que no sufra yo ningún daño!» Y Dio
E invocó Jabes al Dios de Israel, diciendo: Oh si me dieras bendición, y ensancharas mi término, y si tu mano fuera conmigo, y me libraras de mal, que no me dañe! E hizo Dios que le viniese lo que pi
Cuando Jabés nació, su madre le puso ese nombre porque le causó mucho dolor durante el nacimiento. En cierta ocasión, Jabés le rogó a Dios: «Bendíceme y dame un territorio muy grande; ayúdame y líbram
Cuando Jabés nació, su madre le puso ese nombre porque le causó mucho dolor durante el nacimiento. En cierta ocasión, Jabés le rogó a Dios: «Bendíceme y dame un territorio muy grande; ayúdame y líbram
Deberíamos tomar continuamente en consideración el versículo 1 Crónicas, 4:10 de los Textos Sagrados que componen la Biblia de tal forma que podamos reflexionar sobre él. ¿Qué trataba de proponernos Dios Nuestro Señor con el versículo 1 Crónicas, 4:10? ¿Cuáles son los momentos de nuestra vida cotidiana en que podemos aprovechar lo que hemos aprendido gracias al versículo 1 Crónicas, 4:10 de La Biblia?
Discurrir y recapacitar acerca de el versículo 1 Crónicas, 4:10 nos resulta fundamental para llegar a a ser capaces de acercarnos más al mensaje de Nuestro Señor y a elevar nuestra alma hacia Dios, por eso es útil recurrir al versículo 1 Crónicas, 4:10 siempre que necesitemos una luz que nos guíe de modo que podamos saber qué pasos dar o para traer la tranquilidad a nuestros corazones.