no sea que algunos de Macedonia vayan conmigo y encuentren que ustedes no lo están. Eso sería una vergüenza para nosotros, que hemos tenido tanta confianza en ustedes; por no hablar de la vergüenza qu
No sea que, si vinieren conmigo Macedonios, y os hallaren desapercibidos, nos avergoncemos nosotros, por no decir vosotros, de este firme gloriarnos.
no sea que si vinieren conmigo algunos macedonios, y os hallaren desprevenidos, nos avergoncemos nosotros, por no decir vosotros, de esta nuestra confianza.
no sea que si van conmigo algunos macedonios y os hallan desprevenidos, nos avergoncemos nosotros, por no decir vosotros, de esta nuestra confianza.
no sea que, si vinieren conmigo macedonios, y os hallaren desprevenidos, nos avergoncemos nosotros, por no decir vosotros, de esta nuestra confianza.
Porque ſi vinieren conmigo Macedonios, no hos hallen desapercebidos, y nos auergoncemos noſotros, por no dezir vosotros, deeste glorioso atreuimiento.
no sea que algunos de Macedonia vayan conmigo y encuentren que ustedes no lo están. Eso sería una vergüenza para nosotros, que hemos tenido tanta confianza en ustedes; por no hablar de la vergüenza qu
no sea que algunos de Macedonia vayan conmigo y encuentren que ustedes no lo están. Eso sería una vergüenza para nosotros, que hemos tenido tanta confianza en ustedes; por no hablar de la vergüenza qu
no sea que vayan conmigo algunos de Macedonia y, al ver que no están preparados, quedemos en ridículo, primero yo, pero sobre todo ustedes mismos, en lo que se refiere a este asunto.
no sea que algunos macedonios vayan conmigo y os encuentren desprevenidos, y nosotros (por no decir vosotros) seamos avergonzados por esta confianza.
Si algunos de Macedonia vienen conmigo y resulta que ustedes no están preparados, sería una vergüenza para nosotros por haber confiado tanto en ustedes, por no mencionar la vergüenza que sería para us
no sea que vayan conmigo algunos de Macedonia y, al ver que no están preparados, quedemos en ridículo, primero yo, pero sobre todo ustedes mismos, en lo que se refiere a este asunto.
Me daría pena —y a ustedes también— que algunos macedonios fueran conmigo y encontraran que todavía ni siquiera han recogido la ofrenda.
no sea que algunos macedonios vayan conmigo y los encuentren desprevenidos, y nosotros, (por no decir ustedes), seamos avergonzados por esta confianza.
Sería vergonzoso para nosotros —ni hablar de la vergüenza que significaría para ustedes— si algunos creyentes macedonios llegaran conmigo y encontraran que ustedes no están preparados ¡después de todo
no sea que algunos macedonios vayan conmigo y los encuentren desprevenidos. En ese caso nosotros —por no decir nada de ustedes— nos avergonzaríamos por haber estado tan seguros.
no sea que si van conmigo unos macedonios y los ven desprevenidos en este proyecto, nosotros seamos avergonzados, por no decir ustedes.
No sea que, si van conmigo algunos macedonios y los hallan no preparados, nos avergoncemos nosotros (por no decir ustedes) por haber tenido esta confianza.
no sea que, si algunos macedonios vienen conmigo y los encuentran desprevenidos, tengamos que avergonzarnos de la confianza que depositamos en ustedes, y ustedes mismos queden avergonzados.
No sea que, si vinieren conmigo Macedonios, y os hallaren desapercibidos, nos avergoncemos nosotros, por no decir vosotros, de este firme gloriarnos.
Imagínense la vergüenza que pasaríamos nosotros, para no hablar de la que pasarían ustedes, si algunos hermanos de Macedonia me acompañaran y ustedes no tuvieran preparada la ofrenda. ¡Dónde quedaría
Imagínense la vergüenza que pasaríamos nosotros, para no hablar de la que pasarían ustedes, si algunos hermanos de Macedonia me acompañaran y ustedes no tuvieran preparada la ofrenda. ¡Dónde quedaría
Es preciso tomar continuamente en consideración el versículo 2 Corintios, 9:4 de La Biblia de manera que podamos reflexionar sobre él.Probablemente sería acertado cuestionarse ¿Qué pretendía proponernos el Señor con el versículo 2 Corintios, 9:4? ¿En qué momentos de nuestro día a día seremos capaces de aprovechar lo que aprendemos gracias al versículo 2 Corintios, 9:4 de La Sagrada Biblia?
Meditar en torno a lo que se refiere el versículo 2 Corintios, 9:4 nos ayuda a ser más agradables a los ojos de el Creador del Cielo y de la Tierra y a aproximarnos más a Dios, esa es la cuestión por la cual es conveniente acudir al versículo 2 Corintios, 9:4 cuando creamos que nos pueda servir de guía y así saber qué pasos dar o para traer la serenidad a nuestro espíritu.