2 Tesalonicenses, 3:13
Pero ustedes, hermanos, no se cansen de hacer el bien.
Y vosotros, hermanos, no os canséis de hacer bien.
Y vosotros, hermanos, no os canséis de hacer bien.
Pero vosotros, hermanos, no os canséis de hacer bien.
Y vosotros, hermanos, no os canséis de hacer bien.
Y vosotros, Hermanos, no desmayeys de bien hazer.
Pero ustedes, hermanos, no se cansen de hacer el bien.
Pero ustedes, hermanos, no se cansen de hacer el bien.
En cuanto a ustedes, hermanos, no se canssen de hacer el bien.
Pero vosotros, hermanos, no os canséis de hacer el bien.
Pero ustedes hermanos, nunca se den por vencidos de hacer el bien.
En cuanto a ustedes, hermanos, no se cansen de hacer el bien.
Hermanos, nunca se cansen de hacer el bien.
Pero ustedes, hermanos, no se cansen de hacer el bien.
En cuanto al resto de ustedes, amados hermanos, nunca se cansen de hacer el bien.
Ustedes, hermanos, no se cansen de hacer el bien.
A ustedes, hermanos, que no dejen de hacer cosas buenas.
Y ustedes, hermanos, no se cansen de hacer el bien.
Y ustedes, hermanos, no se cansen de hacer el bien.
Y vosotros, hermanos, no os canséis de hacer bien.
En cuanto a ustedes, hermanos, no se cansen de hacer el bien.
En cuanto a ustedes, hermanos, no se cansen de hacer el bien.
El versiculo 2 Tesalonicenses, 3:13 de La Sagrada Biblia consiste en algo que es preciso tomar continuamente en cuenta para analizarlo y pensar en torno a él. Acaso deberíamos hacernos la pregunta ¿Qué trataba de decirnos el Señor con el versículo 2 Tesalonicenses, 3:13? ¿En qué coyunturas de nuestra vida cotidiana podemos recurrir a lo que aprendemos gracias al versículo 2 Tesalonicenses, 3:13 de La Sagrada Biblia?
Hacer un análisis profundo en torno a lo que se refiere el versículo 2 Tesalonicenses, 3:13 nos supone una ayuda a ser más agradables a los ojos de el Creador del Cielo y de la Tierra y a elevar nuestra alma hacia Dios, por ese motivo es conveniente apoyarse en el versículo 2 Tesalonicenses, 3:13 en todas aquellas ocasiones en que necesitemos una luz que nos guíe y así saber qué pasos dar o para traer paz a nuestros corazones y almas.
