11 (8) El árbol creció y se hizo muy grueso; su copa tocaba el cielo, y se le podía ver desde los puntos más lejanos de la tierra.
Crecía este árbol, y hacíase fuerte, y su altura llegaba hasta el cielo, y su vista hasta el cabo de toda la tierra.
Crecía este árbol, y se hacía fuerte, y su copa llegaba hasta el cielo, y se le alcanzaba a ver desde todos los confines de la tierra.
Crecía este árbol, y se hacía fuerte, y su copa llegaba hasta el cielo y se le alcanzaba a ver desde todos los confines de la tierra.
Crecía este árbol, y se hacía fuerte, y su altura llegaba hasta el cielo, y su vista hasta el cabo de toda la tierra.
CAPITVLO I.Deſcriueſe el origen y creacion del mundo, es à ſaber, de los cielos, y de la tierra, y de todo loque contienen. De la luz, del tiempo, y orden de los dias, y de las noc
y que en voz alta decía: »”‘Echen abajo el árbol, córtenle las ramas, quítenle las hojas, esparzan sus frutos. Que huyan las bestias que están bajo su sombra y las aves que están en sus ramas.
11 (8) El árbol creció y se hizo muy grueso; su copa tocaba el cielo, y se le podía ver desde los puntos más lejanos de la tierra.
y gritaba a pleno pulmón: ¡Talen el árbol, corten su ramaje; arranquen sus hojas, tiren sus frutos! Que las bestias huyan de debajo del árbol, que los pájaros todos abandonen sus ramas.
El árbol creció y se hizo fuerte, su copa llegaba hasta el cielo, y era visible desde los confines de la tierra.
Era tan alto y poderoso que llegaba hasta el cielo y se podía ver desde todos los rincones de la tierra.
y gritaba a pleno pulmón: ¡Talen el árbol, corten su ramaje; arranquen sus hojas, tiren sus frutos! Que las bestias huyan de debajo del árbol, que los pájaros todos abandonen sus ramas.
El árbol creció y era muy alto y grueso, era tan alto que llegaba hasta el cielo y podía verse desde cualquier lugar en la tierra.
El árbol creció y se hizo fuerte, Su copa llegaba hasta el cielo, Y era visible desde los confines de la tierra.
El árbol creció muy alto y se hizo fuerte y se elevó hacia los cielos para que todo el mundo lo viera.
El árbol creció, se hizo fuerte y su copa tocaba el cielo; ¡hasta podía verse desde cualquier punto de la tierra!
El árbol crecía y se fortalecía. Su altura llegaba hasta el cielo y su extensión hasta el fin de toda la tierra.
Este árbol crecía y se hacía fuerte; su altura llegaba hasta el cielo y era visible hasta los confines de toda la tierra.
Este árbol crecía y se hacía fuerte, y su copa llegaba hasta el cielo. ¡Se podía ver desde los lugares más lejanos de la tierra!
Crecía este árbol, y hacíase fuerte, y su altura llegaba hasta el cielo, y su vista hasta el cabo de toda la tierra.
11 (8) No había otro árbol más fuerte; no había otro árbol más grande. Se podía ver desde lejos, y llegaba hasta el cielo.
11 (8) No había otro árbol más fuerte; no había otro árbol más grande. Se podía ver desde lejos, y llegaba hasta el cielo.
El versiculo Daniel, 4:11 de La Sagrada Biblia consiste en algo que hay que tomar continuamente en consideración para hacer una reflexión sobre él. ¿Qué quiso proponernos Dios Padre con el versículo Daniel, 4:11? ¿Cuáles son las ocasiones de nuestro día a día en que podemos poner en práctica aquello que hemos alcanzado a saber gracias al versículo Daniel, 4:11 de La Sagrada Biblia?
Meditar acerca de el versículo Daniel, 4:11 nos supone una ayuda a ser mejores cristianos y a avanzar en nuestro camino hacia la Gracia de Dios, por esa razón es bueno servirse del versículo Daniel, 4:11 todas las veces que necesitemos palabras que nos inspiren y guíen para saber en qué forma acturar o para traer el sosiego a nuestros corazones.