8 (5) Por último se presentó Daniel, llamado también Beltsasar en honor a mi dios, y cuya vida está guiada por el espíritu del Dios santo, y le conté mi sueño de la siguiente manera
Hasta tanto que entró delante de mí Daniel, cuyo nombre es Beltsasar, como el nombre de mi dios, y en el cual hay espíritu de los dioses santos, y dije el sueño delante de él, diciendo
hasta que entró delante de mí Daniel, cuyo nombre es Beltsasar, como el nombre de mi dios, y en quien mora el espíritu de los dioses santos. Conté delante de él el sueño, diciendo
hasta que entró ante mí Daniel, cuyo nombre es Beltsasar, como el nombre de mi dios, y en quien mora el espíritu de los dioses santos. Conté delante de él el sueño, diciendo
hasta tanto que entró delante de mí Daniel, cuyo nombre es Beltasar, que cuando lo nombro me parece que nombro a mi dios, y en el cual hay espíritu del santo Dios, y dije el sueño delante de él, dicie
CAPITVLO I.Deſcriueſe el origen y creacion del mundo, es à ſaber, de los cielos, y de la tierra, y de todo loque contienen. De la luz, del tiempo, y orden de los dias, y de las noc
El árbol creció y se hizo muy grueso; su copa tocaba el cielo, y se le podía ver desde los puntos más lejanos de la tierra.
8 (5) Por último se presentó Daniel, llamado también Beltsasar en honor a mi dios, y cuya vida está guiada por el espíritu del Dios santo, y le conté mi sueño de la siguiente manera
El árbol creció corpulento, su copa llegaba al cielo, visible desde toda la tierra.
Pero al fin vino ante mí Daniel, cuyo nombre es Beltsasar, como el nombre de mi dios, en quien está el espíritu de los dioses santos, y yo le conté el sueño, diciendo
Finalmente llegó Daniel, quien también es llamado Baltasar en honor a mi dios. El espíritu de los santos dioses vive en él. Y esto fue lo que le dije de mi sueño
El árbol creció corpulento, su copa llegaba al cielo, visible desde toda la tierra.
Por último vino Daniel, llamado también Beltsasar en honor a mi dios, en quien está el espíritu de los dioses santos, y le conté mi sueño.
Pero al fin vino ante mí Daniel, cuyo nombre es Beltsasar, como el nombre de mi dios, en quien está el espíritu de los dioses santos, y yo le conté mi sueño
Finalmente Daniel se presentó ante mí y le conté el sueño. (Daniel lleva el nombre de mi dios, Beltsasar. El espíritu de los dioses santos vive en él).
Finalmente Daniel, que en honor a mi dios también se llama Beltsasar, se presentó ante mí y le conté mi sueño, pues en él reposa el espíritu de los santos dioses.
hasta que se presentó ante mí Daniel, cuyo nombre es Beltsasar, como el nombre de mi ʼELAH, y en quien vive el Espíritu del ʼELAH santo. Y relaté mi sueño a él
Al final entró delante de mí Daniel (cuyo nombre es Beltesasar, como el nombre de mi dios), en quien hay espíritu de los dioses santos. Yo conté el sueño delante de él, diciendo
Finalmente, se presentó ante mí Daniel, también llamado Beltsasar, como el nombre de mi dios, en quien habita el espíritu de los dioses santos. Yo le conté mi sueño, y le dije
Hasta tanto que entró delante de mí Daniel, cuyo nombre es Beltsasar, como el nombre de mi dios, y en el cual hay espíritu de los dioses santos, y dije el sueño delante de él, diciendo
8-9 (5-6) Después se presentó Daniel. Nosotros lo conocemos como Beltsasar, en honor de mi dios. Yo sé que a Daniel lo guía el espíritu del Dios único. Por eso le conté mi sueño, y le dije: »Tú, Belts
8-9 (5-6) Después se presentó Daniel. Nosotros lo conocemos como Beltsasar, en honor de mi dios. Yo sé que a Daniel lo guía el espíritu del Dios único. Por eso le conté mi sueño, y le dije: »Tú, Belts
Hay que tomar constantemente en cuenta el versículo Daniel, 4:8 de La Sagrada Biblia de manera que podamos hacer una reflexión sobre él. ¿Qué pretendía proponernos Nuestro Padre que está en los Cielos con el versículo Daniel, 4:8? ¿En qué momentos de nuestra vida diaria podemos recurrir a lo que hemos alcanzado a saber gracias al versículo Daniel, 4:8 de la Santa Biblia?
Discurrir y recapacitar en relación con el versículo Daniel, 4:8 nos ayuda a ser mejores personas y a aproximarnos más a Dios, por eso es útil recurrir al versículo Daniel, 4:8 cuando creamos que precisemos que la palabra de Dios, Nuestro Señor nos indique el camino a seguir de modo que podamos saber en qué forma acturar o para traer la paz a nuestras almas.