Éxodo, 34:25
»En los sacrificios de animales, no ofrezcan juntos la sangre y el pan con levadura, ni guarden para el día siguiente lo que sobre del animal sacrificado en la Pascua.
No ofrecerás con leudo la sangre de mi sacrificio; ni quedará de la noche para la mañana el sacrificio de la fiesta de la pascua.
No ofrecerás cosa leudada junto con la sangre de mi sacrificio, ni se dejará hasta la mañana nada del sacrificio de la fiesta de la pascua.
»No ofrecerás cosa leudada junto con la sangre de mi sacrificio, ni se dejará hasta la mañana nada del sacrificio de la fiesta de la Pascua.
No ofrecerás sobre leudado la sangre de mi sacrificio; ni quedará de la noche para la mañana el sacrificio de la fiesta de la pascua.
No sacrificarás ſobre leudo la sangre de mi sacrificio: ni quedará de la noche para la mañana el sacrificio de la siesta de la Pascua.
»En los sacrificios de animales, no ofrezcan juntos la sangre y el pan con levadura, ni guarden para el día siguiente lo que sobre del animal sacrificado en la Pascua.
»En los sacrificios de animales, no ofrezcan juntos la sangre y el pan con levadura, ni guarden para el día siguiente lo que sobre del animal sacrificado en la Pascua.
No ofrezcas nada fermentado junto con la sangre de la víctima sacrificada en mi honor, ni conserves para el día siguiente lo que sobre del animal sacrificado en la Pascua.
No ofrecerás la sangre de mi sacrificio con pan leudado, ni se dejará nada del sacrificio de la fiesta de la Pascua hasta la mañana.
»Cuando me ofrezcas sangre de un sacrificio, no me ofrezcas pan que tenga levadura al mismo tiempo. No dejes hasta la mañana siguiente carne que haya sobrado de la Pascua.
No ofrezcas nada fermentado junto con la sangre de la víctima sacrificada en mi honor, ni conserves para el día siguiente lo que sobre del animal sacrificado en la Pascua.
»No usarás panes con levadura en tus sacrificios, y no dejarás hasta el día siguiente la carne del cordero pascual.
»No ofrecerás la sangre de Mi sacrificio con pan leudado, ni se dejará nada del sacrificio de la Fiesta de la Pascua hasta la mañana.
»No ofrezcas la sangre de mis sacrificios con ningún tipo de pan que contenga levadura. Tampoco guardes nada de la carne del sacrificio de la Pascua hasta la mañana siguiente.
»Cuando me ofrezcas un animal, no mezcles con levadura su sangre. »Del animal que se ofrece en la fiesta de la Pascua no debe quedar nada para el día siguiente.
No degollarás ni derramarás la sangre de mi animal de sacrificio sobre algo leudado, ni guardarás hasta la mañana siguiente el animal de la fiesta solemne de la Pascua.
»No ofrecerás la sangre de mi sacrificio junto con algo que tenga levadura. »No quedará nada del sacrificio de la fiesta de la Pascua hasta la mañana.
»No ofrecerás con la sangre de mi sacrificio nada que tenga levadura. Tampoco se dejará hasta el día siguiente nada del animal sacrificado en la fiesta de la pascua.
No ofrecerás con leudo la sangre de mi sacrificio; ni quedará de la noche para la mañana el sacrificio de la fiesta de la pascua.
»Cuando me presenten el sacrificio de algún animal, no me ofrezcan al mismo tiempo la sangre del animal y pan con levadura. Tampoco guarden para el día siguiente lo que sobre del animal sacrificado en
»Cuando me presenten el sacrificio de algún animal, no me ofrezcan al mismo tiempo la sangre del animal y pan con levadura. Tampoco guarden para el día siguiente lo que sobre del animal sacrificado en
El versiculo Éxodo, 34:25 de La Santa Biblia es algo que es preciso tomar continuamente en consideración de tal forma que podamos reflexionar sobre él.Tal vez deberíamos hacernos la pregunta ¿Qué pretendía proponernos Dios con el versículo Éxodo, 34:25? ¿En qué coyunturas de nuestro día a día podemos recurrir a lo que aprendemos gracias al versículo Éxodo, 34:25 de Las Sagradas Escrituras?
Meditar en relación con el versículo Éxodo, 34:25 nos ayuda a ser mejores cristianos y a acercarnos más a Dios, esa es la razón por la cual es bueno apoyarse en el versículo Éxodo, 34:25 en todas aquellas ocasiones en que necesitemos una luz que nos guíe y así saber cómo proceder o para traer paz a nuestros corazones y almas.
