El Señor se dirigió a mí, y me dijo
Y fué á mí palabra de Jehová, diciendo
Y vino a mí palabra de Jehová, diciendo
Y vino a mí palabra de Jehová, diciendo
Y vino Palabra del SEÑOR a mí, diciendo
Y fue Palabra de Iehoua àmi, diziẽdo
El Señor se dirigió a mí, y me dijo
El Señor se dirigió a mí, y me dijo
El Señor me dirigió la palabra
Y vino a mí la palabra del SEÑOR, diciendo
El SEÑOR me dijo
El Señor me dirigió la palabra
Entonces el SEÑOR me dio este mensaje
Y vino a mí la palabra del SEÑOR
Entonces recibí el siguiente mensaje del SEÑOR
Allí el SEÑOR me dirigió la palabra
Y la Palabra de YAVÉ vino a mí
Entonces vino a mí la palabra del SEÑOR, diciendo
Entonces la palabra del Señor vino a mí, y me dijo
Y fué á mí palabra de Jehová, diciendo
Dios me dijo
Dios me dijo
El versiculo Ezequiel, 20:2 de La Sagrada Biblia es algo que nos conviene tener siempre presente con el propósito de meditar acerca de él.Tal vez sería adecuado preguntarse ¿Qué intentaba decirnos Nuestro Padre que está en los Cielos con el versículo Ezequiel, 20:2? ¿Cuáles serán las coyunturas de nuestra vida diaria en que tenemos la oportunidad de hacer valer lo que hemos alcanzado a saber gracias al versículo Ezequiel, 20:2 de La Biblia?
Hacer un análisis profundo en relación con el versículo Ezequiel, 20:2 nos es de gran ayuda a ser capaces de acercarnos más al mensaje de Nuestro Señor y a acercarnos más a Dios, ese es el motivo por el cual es útil acudir al versículo Ezequiel, 20:2 todas y cada una de las veces que necesitemos palabras que nos inspiren y guíen para saber en qué forma acturar o para traer el sosiego a nuestras almas.