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Ezequiel, 26:1

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Ezequiel, 26:1

El día primero del mes, en el año once, el Señor se dirigió a mí, y me dijo


Y ACONTECIÓ en el undécimo año, en el primero del mes, que fué á mí palabra de Jehová, diciendo


Aconteció en el undécimo año, en el día primero del mes, que vino a mí palabra de Jehová, diciendo


Aconteció en el undécimo año, en el día primero del mes, que vino a mí palabra de Jehová, diciendo


Y aconteció en el undécimo año, en el primero del mes, que vino Palabra del SEÑOR a mí, diciendo


Y Aconteció enel vndecimo año, enel primero del mes, que fue Palabra de Iehoua àmi, diziendo.


El día primero del mes, en el año once, el Señor se dirigió a mí, y me dijo


El día primero del mes, en el año once, el Señor se dirigió a mí, y me dijo


El año undécimo, el día primero del mes, el Señor me dirigió la palabra


Y sucedió que en el undécimo año, el día primero del mes, vino a mí la palabra del SEÑOR, diciendo


El primer día del mes del año undécimo, el SEÑOR me dijo


El año undécimo, el día primero del mes, el Señor me dirigió la palabra


Otro mensaje me vino del SEÑOR en el primer día del mes, en el onceavo año después que el rey Joaquín fue llevado al cautiverio


En el año undécimo, el día primero del mes, vino a mí la palabra del SEÑOR


El 3 de febrero, durante el año doce de cautividad del rey Joaquín, recibí este mensaje del SEÑOR


El día primero del mes primero del año undécimo, el SEÑOR me dirigió la palabra


El año 11, el día primero del mes, aconteció que la Palabra de YAVÉ vino a mí


Aconteció en el primer día del mes primero del año once que vino a mí la palabra del SEÑOR, diciendo


El día primero del mes primero del año undécimo la palabra del Señor vino a mí, y me dijo


Y ACONTECIO en el undécimo año, en el primero del mes, que fué á mí palabra de Jehová, diciendo


Habían pasado once años desde que llegamos presos a Babilonia, y el día primero del mes de Adar, Dios me dijo: «Ezequiel, hombre mortal, la ciudad de Tiro se burla de Jerusalén y dice: “¡La gran ciuda


Habían pasado once años desde que llegamos presos a Babilonia, y el día primero del mes de Adar, Dios me dijo: «Ezequiel, hombre mortal, la ciudad de Tiro se burla de Jerusalén y dice: “¡La gran ciuda


El versiculo Ezequiel, 26:1 de La Sagrada Biblia es algo que nos conviene tener en todo momento presente con el objetivo de meditar en torno a él. Acaso deberíamos preguntarnos ¿Qué trataba de proponernos Nuestro Padre que está en los Cielos con el versículo Ezequiel, 26:1? ¿Cuáles serán las coyunturas de nuestro día a día en que podemos llevar a la práctica lo que hemos aprendido gracias al versículo Ezequiel, 26:1 de La Sagrada Biblia?

Reflexionar en relación con el versículo Ezequiel, 26:1 nos supone una ayuda a ser capaces de acercarnos más al mensaje de Nuestro Señor y a acercarnos más a Dios, por ese motivo es conveniente servirse del versículo Ezequiel, 26:1 todas las veces que necesitemos una luz que nos guíe y así saber en qué forma acturar o para traer paz a nuestros corazones y almas.