Además, Nahor tuvo hijos con Reumá, su concubina. Ellos fueron Teba, Gáham, Tahas y Maacá.
Y su concubina, que se llamaba Reúma, parió también á Teba, y á Gaham, y á Taas, y á Maachâ.
Y su concubina, que se llamaba Reúma, dio a luz también a Teba, a Gaham, a Tahas y a Maaca.
Y su concubina, que se llamaba Reúma, dio a luz también a Teba, a Gaham, a Tahas y a Maaca.
Y su concubina, que se llamaba Reúma, dio a luz también a Teba, y a Gaham, y a Tahas, y a Maaca.
Y ſu concubina, que ſe llamaua Reumah, parió tambien à Tabee, y à Gaham, y à Thahas, y à Maacha.
Además, Nahor tuvo hijos con Reumá, su concubina. Ellos fueron Teba, Gáham, Tahas y Maacá.
Además, Nahor tuvo hijos con Reumá, su concubina. Ellos fueron Teba, Gáham, Tahas y Maacá.
Además Najor también tuvo hijos con una concubina suya llamada Reumá. Ellos fueron: Tebaj, Gaján, Tajás y Maacá.
También su concubina, de nombre Reúma, dio a luz a Teba, a Gaham, a Tahas y a Maaca.
Najor también tuvo hijos con su concubina Reumá. Ellos fueron Tébaj, Gaján, Tajás y Macá».
Además Najor también tuvo hijos con una concubina suya llamada Reumá. Ellos fueron: Tebaj, Gaján, Tajás y Maacá.
Además, con su concubina Reumá, Najor tuvo cuatro hijos, que fueron: Tébaj, Gaján, Tajás y Macá.
También su concubina, de nombre Reúma, dio a luz a Teba, a Gaham, a Tahas y a Maaca.
Nacor tuvo otros cuatro hijos con su concubina Reúma. Sus nombres eran Teba, Gahán, Tahás y Maaca.
Najor también tuvo hijos con Reumá, su concubina. Ellos fueron Tébaj, Gaján, Tajás y Macá.
Su concubina, cuyo nombre era Reúma, también dio a luz a Tebah, a Gaham, a Tahas y a Maaca.
Y su concubina, que se llamaba Reúma, dio a luz también a Tébaj, a Gajam, a Tajas y a Maaca.
También su concubina, que se llamaba Reúma, dio a luz a Teba, Gaján, Tajás y Macá.
Y su concubina, que se llamaba Reúma, parió también á Teba, y á Gaham, y á Taas, y á Maachâ.
Además, Nahor tuvo cuatro hijos con Rumá, su segunda esposa: Teba, Gáham, Tahas, Maacá.
Además, Nahor tuvo cuatro hijos con Rumá, su segunda esposa: Teba, Gáham, Tahas, Maacá.
Debemos tomar continuamente en consideración el versículo Génesis, 22:24 de los Textos Sagrados que componen la Biblia de tal forma que podamos meditar sobre él. Acaso deberíamos hacernos la pregunta ¿Qué trataba de proponernos Dios, Creador del Cielo y de la Tierra con el versículo Génesis, 22:24? ¿En qué momentos de nuestra vida cotidiana tenemos la oportunidad de recurrir a aquello que aprendemos gracias al versículo Génesis, 22:24 de La Biblia?
Discurrir y recapacitar en relación con el versículo Génesis, 22:24 es un gran aporte que nos permite a ser más agradables a los ojos de el Creador del Cielo y de la Tierra y a elevar nuestra alma hacia Dios, ese es el motivo por el cual es aconsejable apoyarse en el versículo Génesis, 22:24 siempre que necesitemos palabras que nos inspiren y guíen para saber qué pasos dar o para traer la tranquilidad a nuestros corazones y almas.