Así quedó en posesión del terreno y de la cueva que allí había, la cual los hititas le vendieron para sepultura.
Y quedó la heredad y la cueva que en ella había, por de Abraham, en posesión de sepultura adquirida de los hijos de Heth.
Y quedó la heredad y la cueva que en ella había, de Abraham, como una posesión para sepultura, recibida de los hijos de Het.
Y la heredad, con la cueva que en ella había, quedó en manos de Abraham como una posesión para sepultura, recibida de los hijos de Het.
Y quedó la heredad y la cueva que en ella había, de Abraham, en heredad de sepultura comprada de los hijos de Het.
Y quedó la heredad y la cueua que eſtaua en ella, por de Abraham en heredad de ſepultura de los hijos de Heth.
Así quedó en posesión del terreno y de la cueva que allí había, la cual los hititas le vendieron para sepultura.
Así quedó en posesión del terreno y de la cueva que allí había, la cual los hititas le vendieron para sepultura.
De esta manera, los hititas cedieron a Abrahán, como sepultura en propiedad, tanto el campo como la cueva ubicada en él.
Y el campo y la cueva que hay en él fueron cedidos a Abraham en posesión para una sepultura, por los hijos de Het.
Entonces el campo y la cueva de los heteos pasaron a pertenecer legalmente a Abraham para sepultura.
De esta manera, los hititas cedieron a Abrahán, como sepultura en propiedad, tanto el campo como la cueva ubicada en él.
De ese modo, el campo, junto con la cueva, dejó de pertenecer a los hititas y pasó a ser propiedad de Abraham para sepultura, pues Abraham lo compró.
El campo y la cueva que hay en él fueron cedidos a Abraham en posesión para una sepultura por los hijos de Het.
Así que el campo y la cueva de los hititas pasaron a manos de Abraham, para ser usados como lugar de sepultura permanente.
De esta manera, el campo y la cueva que estaba en él dejaron de ser de los hititas y pasaron a ser propiedad de Abraham para sepultura.
El campo y la cueva que estaba en él quedaron en posesión de Abraham como propiedad para sepultura, procedente de los hijos de Het.
Así Abraham adquirió de los hijos de Het el campo y la cueva que había en él, como una propiedad para sepultura.
Y la heredad y la cueva que en ella había quedó como una posesión de Abrahán para sepultura, cedida por los hititas.
Y quedó la heredad y la cueva que en ella había, por de Abraham, en posesión de sepultura adquirida de los hijos de Heth.
Este precio le pareció bien a Abraham, y le pagó a Efrón las cuatrocientas monedas de plata, siguiendo las reglas de los comerciantes. Así fue como el campo y la cueva pasaron a ser propiedad legal de
Este precio le pareció bien a Abraham, y le pagó a Efrón las cuatrocientas monedas de plata, siguiendo las reglas de los comerciantes. Así fue como el campo y la cueva pasaron a ser propiedad legal de
Debemos tener constantemente presente el versículo Génesis, 23:20 de La Sagrada Biblia de manera que podamos analizarlo y pensar sobre él.Tal vez sería acertado cuestionarse ¿Qué intentaba manifestarnos el Señor con el versículo Génesis, 23:20? ¿En qué coyunturas de nuestra vida diaria podemos aplicar aquello que hemos llegado a saber gracias al versículo Génesis, 23:20 de la Santa Biblia?
Dedicar tiempo a la meditación acerca de el versículo Génesis, 23:20 nos resulta fundamental para llegar a a ser capaces de acercarnos más al mensaje de Nuestro Señor y a elevar nuestra alma hacia Dios, por ese motivo es oportuno recurrir al versículo Génesis, 23:20 cuando creamos que necesitemos palabras que nos inspiren y guíen de modo que podamos saber en qué forma acturar o para traer la serenidad a nuestros corazones y almas.