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Jueces, 11:39

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Jueces, 11:39

Después de ese tiempo volvió a donde estaba su padre, y él cumplió la promesa que le había hecho al Señor. La hija de Jefté murió sin haber tenido relaciones sexuales con ningún hombre.


Pasados los dos meses volvió á su padre, é hizo de ella conforme á su voto que había hecho. Y ella nunca conoció varón.


Pasados los dos meses volvió a su padre, quien hizo de ella conforme al voto que había hecho. Y ella nunca conoció varón.


Pasados los dos meses volvió a su padre, quien cumplió el voto que había hecho. La hija de Jefté nunca conoció varón.


Pasados los dos meses volvió a su padre, e hizo de ella conforme al voto que había hecho. Y ella nunca conoció varón.


Paſſados los dos meses, boluió à ſu padre, y hizo deella conforme à ſu voto, que auia votado: y ellanunca conoció varon.


Después de ese tiempo volvió a donde estaba su padre, y él cumplió la promesa que le había hecho al Señor. La hija de Jefté murió sin haber tenido relaciones sexuales con ningún hombre.


Después de ese tiempo volvió a donde estaba su padre, y él cumplió la promesa que le había hecho al Señor. La hija de Jefté murió sin haber tenido relaciones sexuales con ningún hombre.


Al cabo de los dos meses, volvió a casa de su padre y él cumplió con ella el voto que había hecho. La joven no había tenido relaciones con varón. Y se hizo costumbre en Israel


Al cabo de los dos meses ella regresó a su padre, que hizo con ella conforme al voto que había hecho; y ella no tuvo relaciones con ningún hombre. Y se hizo costumbre en Israel


Después de dos meses la niña regresó donde estaba su papá y Jefté cumplió lo que había prometido. La hija de Jefté nunca tuvo relaciones sexuales con nadie. Y entre el pueblo de Israel se convirtió en


Al cabo de los dos meses, volvió a casa de su padre y él cumplió con ella el voto que había hecho. La joven no había tenido relaciones con varón. Y se hizo costumbre en Israel


luego regresó a donde estaba su padre, que hizo lo prometido. Así que ella nunca se casó. Y después llegó a ser una costumbre de Israel


Al cabo de los dos meses ella regresó a su padre, que cumplió con ella conforme al voto que había hecho; y ella no tuvo relaciones con ningún hombre. Y se hizo costumbre en Israel


Cuando volvió a su casa, su padre cumplió el voto que había hecho, y ella murió virgen. Así que se hizo costumbre en Israel


Cumplidos los dos meses volvió a su padre, y él hizo con ella conforme a su juramento. Ella era virgen. De allí se originó la costumbre israelita


Sucedió que pasados los dos meses volvió a su padre, quien cumplió con ella el voto que hizo. Ella nunca se unió a varón. Se volvió una costumbre en Israel


Pasados los dos meses ella volvió a su padre, y él cumplió con ella el voto que había hecho. Ella no conoció varón.


Pasados los dos meses, ella volvió con su padre para que este cumpliera su promesa al Señor. Ella nunca tuvo relaciones con un hombre.


Pasados los dos meses volvió á su padre, é hizo de ella conforme á su voto que había hecho. Y ella nunca conoció varón.


Pasados los dos meses, regresó a donde estaba su padre, quien cumplió con ella la promesa que había hecho. Y ella murió sin haberse casado. De ahí comenzó la costumbre


Pasados los dos meses, regresó a donde estaba su padre, quien cumplió con ella la promesa que había hecho. Y ella murió sin haberse casado. De ahí comenzó la costumbre


Nos conviene tomar constantemente en consideración el versículo Jueces, 11:39 de La Sagrada Biblia para reflexionar en torno a él.Tal vez deberíamos hacernos la pregunta ¿Qué intentaba proponernos el Señor con el versículo Jueces, 11:39? ¿Cuáles serán las coyunturas de nuestro día a día en que seremos capaces de recurrir a aquello que aprendemos gracias al versículo Jueces, 11:39 de La Biblia?

Reflexionar sobre el versículo Jueces, 11:39 nos supone una ayuda a ser mejores personas y a aproximarnos más a Dios, por ese motivo es oportuno servirse del versículo Jueces, 11:39 en todas aquellas ocasiones en que pueda servirnos de guía para saber qué pasos dar o para traer la serenidad a nuestros corazones y almas.