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Jueces, 9:54

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Jueces, 9:54

Abimélec llamó rápidamente a su ayudante de armas y le dijo: «Saca tu espada y mátame, porque no quiero que se diga que una mujer me mató.» Entonces su ayudante lo atravesó con la espada, y así murió.


Y luego llamó él á su escudero, y díjole: Saca tu espada y mátame, porque no se diga de mí: Una mujer lo mató. Y su escudero le atravesó, y murió.


Entonces llamó apresuradamente a su escudero, y le dijo: Saca tu espada y mátame, para que no se diga de mí: Una mujer lo mató. Y su escudero le atravesó, y murió.


Abimelec llamó apresuradamente a su escudero y le dijo: «Saca tu espada y mátame, para que no se diga de mí: “Una mujer lo mató.”» Entonces su escudero lo atravesó con la espada, y murió.


Y luego él llamó a su escudero, y le dijo: Saca tu espada y mátame, para que no se diga de mí: Una mujer lo mató. Y su escudero le atravesó, y murió.


Y luego el llamó ſu escudero, y dixole: Saca tu espada y matame: porque no ſe diga de mi: Vna muger lo mató. Y ſu escudero lo trauessó, y murió.


Abimélec llamó rápidamente a su ayudante de armas y le dijo: «Saca tu espada y mátame, porque no quiero que se diga que una mujer me mató.» Entonces su ayudante lo atravesó con la espada, y así murió.


Abimélec llamó rápidamente a su ayudante de armas y le dijo: «Saca tu espada y mátame, porque no quiero que se diga que una mujer me mató.» Entonces su ayudante lo atravesó con la espada, y así murió.


Él llamó en seguida a su escudero y le dijo: — Saca tu espada y mátame. Para que no se diga de mí que una mujer me dio muerte. Su escudero lo atravesó con la espada, y murió.


Entonces él llamó apresuradamente al muchacho que era su escudero, y le dijo: Saca tu espada y mátame, no sea que se diga de mí: «Una mujer lo mató». Y el muchacho lo traspasó, y murió.


Inmediatamente, Abimélec llamó al ayudante que cargaba las armas y le dijo: «Trae tu espada y mátame para que nadie pueda decir que una mujer mató a Abimélec». El ayudante le clavó la espada y Abiméle


Él llamó enseguida a su escudero y le dijo: —Saca tu espada y mátame. Para que no se diga de mí que una mujer me dio muerte. Su escudero lo atravesó con la espada, y murió.


«Mátame —le pidió a su escudero—. Que nunca se diga que una mujer mató a Abimélec». El joven lo atravesó con su espada, y murió.


Entonces él llamó apresuradamente al muchacho que era su escudero, y le dijo: «Saca tu espada y mátame, no sea que se diga de mí: “Una mujer lo mató” ». Y el muchacho lo traspasó, y murió.


Enseguida él le dijo a su joven escudero: «¡Saca tu espada y mátame! ¡Que no se diga que una mujer mató a Abimelec!». Así que el joven lo atravesó con su espada, y él murió.


De inmediato llamó Abimélec a su escudero y le ordenó: «Saca tu espada y mátame, para que no se diga de mí: “¡Lo mató una mujer!”» Entonces su escudero le clavó la espada, y así murió.


Él llamó apresuradamente a su joven escudero y le dijo: Desenvaina tu espada y mátame, para que no se diga de mí: ¡Una mujer lo mató! Y el muchacho lo traspasó y murió.


Entonces él llamó apresuradamente al joven, su escudero, y le dijo: —Saca tu espada y mátame, para que no se diga de mí: “Una mujer lo mató”. Su escudero lo atravesó, y él murió.


Cuando Abimelec se sintió perdido, llamó a su escudero y le dijo: «¡Mátame con tu espada! ¡Que no se diga que una mujer me mató!» Y su escudero le clavó la espada, y murió.


Y luego llamó él á su escudero, y díjole: Saca tu espada y mátame, porque no se diga de mí: Una mujer lo mató. Y su escudero le atravesó, y murió.


Rápidamente llamó Abimélec a su ayudante de armas, y le dijo: «Saca tu espada y mátame. No quiero que se diga que una mujer me mató». Entonces su ayudante le clavó la espada, y Abimélec murió.


Rápidamente llamó Abimélec a su ayudante de armas, y le dijo: «Saca tu espada y mátame. No quiero que se diga que una mujer me mató». Entonces su ayudante le clavó la espada, y Abimélec murió.


Es preciso tomar constantemente en cuenta el versículo Jueces, 9:54 de La Sagrada Biblia con el objetivo de hacer una reflexión sobre él.Quizás sería adecuado preguntarse ¿Qué pretendía manifestarnos el Señor con el versículo Jueces, 9:54? ¿En qué ocasiones de nuestro día a día tenemos la oportunidad de recurrir a aquello que hemos llegado a saber gracias al versículo Jueces, 9:54 de La Sagrada Biblia?

Meditar sobre el versículo Jueces, 9:54 nos supone una ayuda a ser capaces de acercarnos más al mensaje de Nuestro Señor y a aproximarnos más a Dios, esa es la cuestión por la cual es aconsejable acudir al versículo Jueces, 9:54 siempre que nos pueda servir de guía de modo que podamos saber en qué forma acturar o para traer la tranquilidad a nuestras almas.