Y cuando él terminó de decir lo que el Señor le había ordenado, los sacerdotes, los profetas y el pueblo lo agarraron y le dijeron: «¡Vas a morir!
Y fué que, acabando de hablar Jeremías todo lo que Jehová le había mandado que hablase á todo el pueblo, los sacerdotes y los profetas y todo el pueblo le echaron mano, diciendo: De cierto morirás.
Y cuando terminó de hablar Jeremías todo lo que Jehová le había mandado que hablase a todo el pueblo, los sacerdotes y los profetas y todo el pueblo le echaron mano, diciendo: De cierto morirás.
Y cuando terminó de hablar Jeremías todo lo que Jehová le había mandado que hablara a todo el pueblo, los sacerdotes, los profetas y todo el pueblo le echaron mano, diciendo: «¡De cierto morirás!
Y fue que, acabando de hablar Jeremías todo lo que el SEÑOR le había mandado que hablara a todo el pueblo, los sacerdotes y los profetas y todo el pueblo le echaron mano, diciendo: De cierto morirás.
Y fue, que acabando de hablar Ieremias todo loque Iehoua le auia mandado que hablaſſe à todo el pueblo, los Sacerdotes, y los Prophetas, y todo el pueblo, le echarõ mano, diziendo, Muerte morirás.
Y cuando él terminó de decir lo que el Señor le había ordenado, los sacerdotes, los profetas y el pueblo lo agarraron y le dijeron: «¡Vas a morir!
Y cuando él terminó de decir lo que el Señor le había ordenado, los sacerdotes, los profetas y el pueblo lo agarraron y le dijeron: «¡Vas a morir!
Cuando Jeremías terminó de transmitir todo lo que el Señor le había ordenado decir al pueblo, los sacerdotes y profetas lo detuvieron y le dijeron: — Eres reo de muerte.
Cuando Jeremías terminó de decir todo lo que el SEÑOR le había mandado que hablara a todo el pueblo, lo apresaron los sacerdotes, los profetas y todo el pueblo, diciendo: De cierto, morirás.
Cuando Jeremías acabó de decirle al pueblo todo lo que el SEÑOR le había ordenado que dijera, los sacerdotes, los profetas y todo el pueblo lo agarraron y le dijeron: «Vas a morir.
Cuando Jeremías terminó de transmitir todo lo que el Señor le había ordenado decir al pueblo, los sacerdotes y profetas lo detuvieron y le dijeron: —Eres reo de muerte.
Cuando Jeremías terminó su mensaje, luego que dijo todo cuanto el SEÑOR le había ordenado, los sacerdotes, los falsos profetas y todo el pueblo reunido en el templo se le echaron encima gritando: ―¡Mu
Cuando Jeremías terminó de decir todo lo que el SEÑOR le había mandado que hablara a todo el pueblo, lo apresaron los sacerdotes, los profetas y todo el pueblo, diciendo: «De cierto, morirás.
pero cuando Jeremías terminó su mensaje, habiendo dicho todo lo que el SEÑOR le ordenó que dijera, los sacerdotes, los profetas y todo el pueblo que estaba junto al templo lo atacaron en masa. «¡Máten
Pero en cuanto Jeremías terminó de decirle al pueblo todo lo que el SEÑOR había ordenado, los sacerdotes y los profetas y todo el pueblo lo apresaron y dijeron: «¡Vas a morir!
Cuando Jeremías terminó de decir todo lo que YAVé le mandó decir a todo el pueblo, los sacerdotes, los profetas y todo el pueblo le echaron mano y dijeron: ¡Ciertamente morirás!
Pero sucedió que cuando Jeremías terminó de decir todo lo que el SEÑOR le había mandado que hablara a todo el pueblo, lo apresaron los sacerdotes, los profetas y todo el pueblo, diciendo: “Irremisible
Y cuando Jeremías terminó de decir a todo el pueblo lo que el Señor le había ordenado decirles, los sacerdotes y los profetas y todo el pueblo le echaron mano y le espetaron: «Has dictado tu sentencia
Y fué que, acabando de hablar Jeremías todo lo que Jehová le había mandado que hablase á todo el pueblo, los sacerdotes y los profetas y todo el pueblo le echaron mano, diciendo: De cierto morirás.
Jeremías anunció este mensaje en el templo de Dios, y lo escucharon los sacerdotes, los profetas y todo el pueblo. Pero tan pronto como terminó de anunciarlo, todos los que estaban allí se lanzaron co
Jeremías anunció este mensaje en el templo de Dios, y lo escucharon los sacerdotes, los profetas y todo el pueblo. Pero tan pronto como terminó de anunciarlo, todos los que estaban allí se lanzaron co
Deberíamos tener continuamente presente el versículo Jeremías, 26:8 de los Textos Sagrados que componen la Biblia con el fin de reflexionar en torno a él.Seguramente sería bueno preguntarse ¿Qué intentaba manifestarnos el Señor con el versículo Jeremías, 26:8? ¿En qué coyunturas de nuestro día a día podemos llevar a la práctica aquello que hemos aprendido gracias al versículo Jeremías, 26:8 de Las Sagradas Escrituras?
Meditar sobre el versículo Jeremías, 26:8 nos ayuda a ser más agradables a los ojos de el Creador del Cielo y de la Tierra y a acercarnos más a Dios, ese es el motivo por el cual es oportuno acudir al versículo Jeremías, 26:8 cada vez que precisemos que la palabra de Dios, Nuestro Señor nos indique el camino a seguir y así saber qué pasos dar o para traer la tranquilidad a nuestras almas.