Ella salió, y le preguntó a su madre: —¿Qué pediré? Le contestó: —Pídele la cabeza de Juan el Bautista.
Y saliendo ella, dijo á su madre: ¿Qué pediré? Y ella dijo: La cabeza de Juan Bautista.
Saliendo ella, dijo a su madre: ¿Qué pediré? Y ella le dijo: La cabeza de Juan el Bautista.
Saliendo ella, dijo a su madre: —¿Qué pediré? Y esta le dijo: —La cabeza de Juan el Bautista.
Y saliendo ella, dijo a su madre: ¿Qué pediré? Y ella dijo: La cabeza de Juan el Bautista.
Y ſaliendo ella dixo à ſu madre, Que pediré? Y ella dixo, La cabeça de Ioan el Baptista.
Ella salió, y le preguntó a su madre: —¿Qué pediré? Le contestó: —Pídele la cabeza de Juan el Bautista.
Ella salió, y le preguntó a su madre: —¿Qué pediré? Le contestó: —Pídele la cabeza de Juan el Bautista.
La muchacha fue entonces a preguntar a su madre: — ¿Qué pido? Su madre le dijo: — La cabeza de Juan el Bautista.
Ella salió y dijo a su madre: ¿Qué pediré? Y ella le respondió: La cabeza de Juan el Bautista.
Ella corrió a donde estaba su mamá y le preguntó: —¿Qué debo pedir? Ella le contesto: —Pide la cabeza de Juan el Bautista.
La muchacha fue entonces a preguntar a su madre: —¿Qué pido? Su madre le dijo: —La cabeza de Juan el Bautista.
La chica salió y consultó a su madre: ―¿Qué debo pedir? Y la mamá le dijo: ―Pídele la cabeza de Juan el Bautista.
Ella salió y dijo a su madre: «¿Qué pediré?». «La cabeza de Juan el Bautista», le respondió ella.
Ella salió y le preguntó a su madre: —¿Qué debo pedir? Su madre le dijo: —¡Pide la cabeza de Juan el Bautista!
Ella salió a preguntarle a su madre: —¿Qué debo pedir? —La cabeza de Juan el Bautista —contestó.
Al salir preguntó a su madre: ¿Qué pido? Y ella le respondió: ¡La cabeza de Juan el Bautista!
Ella salió y dijo a su madre: —¿Qué pediré? Y esta dijo: —La cabeza de Juan el Bautista.
Ella salió y le preguntó a su madre: «¿Qué debo pedirle?» Y su madre le respondió: «¡Pídele la cabeza de Juan el Bautista!»
Y saliendo ella, dijo á su madre: ¿Qué pediré? Y ella dijo: La cabeza de Juan Bautista.
La muchacha salió del salón, fue a donde estaba Herodías, su madre, y le preguntó: —¿Qué podría pedir? Herodías le respondió: —Pide la cabeza de Juan el Bautista.
La muchacha salió del salón, fue a donde estaba Herodías, su madre, y le preguntó: —¿Qué podría pedir? Herodías le respondió: —Pide la cabeza de Juan el Bautista.
Nos conviene tener continuamente presente el versículo San Marcos, 6:24 de La Santa Biblia con la finalidad de hacer una reflexión acerca de él.Tal vez sería adecuado preguntarse ¿Qué pretendía proponernos Nuestro Padre que está en los Cielos con el versículo San Marcos, 6:24? ¿En qué momentos de nuestra vida cotidiana tenemos la oportunidad de hacer valer aquello que hemos llegado a saber gracias al versículo San Marcos, 6:24 de la Santa Biblia?
Reflexionar sobre el versículo San Marcos, 6:24 nos resulta fundamental para llegar a a ser mejores cristianos y a acercarnos más a Dios, esa es la razón por la cual es aconsejable recurrir al versículo San Marcos, 6:24 cada vez que pueda servirnos de guía para saber cómo proceder o para traer la serenidad a nuestros corazones y almas.