Al contrario, han rechazado mis consejos; no han querido recibir mi corrección.
Antes desechasteis todo consejo mío, Y mi reprensión no quisisteis
Sino que desechasteis todo consejo mío Y mi reprensión no quisisteis
sino que desechasteis todos mis consejos y rechazasteis mi reprensión
antes desechasteis todo consejo mío, y no quisisteis mi reprensión
Y desechastes todo cõsejo mio, y no quesistes mi reprehension
Al contrario, han rechazado mis consejos; no han querido recibir mi corrección.
Al contrario, han rechazado mis consejos; no han querido recibir mi corrección.
despreciaron todos mis consejos y rechazaron mis advertencias.
habéis desatendido todo consejo mío, y no habéis deseado mi reprensión
Ustedes rechazaron mis consejos, se negaron a aceptar mi corrección.
despreciaron todos mis consejos y rechazaron mis advertencias.
Porque menospreciaron mi consejo y rechazaron mi corrección
Han desatendido todo consejo mío Y no han deseado mi reprensión.
No prestaron atención a mi consejo y rechazaron la corrección que les ofrecí.
sino que rechazaron todos mis consejos y no acataron mis reprensiones
Desecharon todo mi consejo, Y no quisieron mi reprensión.
(más bien, desecharon todo consejo mío y no quisieron mi reprensión)
al contrario, desecharon todos mis consejos y no quisieron recibir mi reprensión.
Antes desechasteis todo consejo mío, Y mi reprensión no quisisteis
Rechazan todos mis consejos, y desobedecen mis regaños.
Rechazan todos mis consejos, y desobedecen mis regaños.
Deberíamos tener constantemente presente el versículo Proverbios, 1:25 de los Textos Sagrados que componen la Biblia con el fin de reflexionar acerca de él. ¿Qué intentaba proponernos Dios Nuestro Señor con el versículo Proverbios, 1:25? ¿Cuáles serán las coyunturas de nuestra vida cotidiana en que podemos hacer valer aquello que aprendemos gracias al versículo Proverbios, 1:25 de Las Sagradas Escrituras?
Discurrir y recapacitar en relación con el versículo Proverbios, 1:25 nos es de gran ayuda a ser mejores cristianos y a avanzar en nuestro camino hacia la Gracia de Dios, esa es la cuestión por la cual es conveniente recurrir al versículo Proverbios, 1:25 todas y cada una de las veces que pueda servirnos de guía y así saber qué pasos dar o para traer el sosiego a nuestros corazones.