Él se entregó a la muerte por nosotros, para rescatarnos de toda maldad y limpiarnos completamente, haciendo de nosotros el pueblo de su propiedad, empeñados en hacer el bien.
Que se dió á sí mismo por nosotros para redimirnos de toda iniquidad, y limpiar para sí un pueblo propio, celoso de buenas obras.
quien se dio a sí mismo por nosotros para redimirnos de toda iniquidad y purificar para sí un pueblo propio, celoso de buenas obras.
Él se dio a sí mismo por nosotros para redimirnos de toda maldad y purificar para sí un pueblo propio, celoso de buenas obras.
Que se dio a sí mismo por nosotros para redimirnos de toda iniquidad, y limpiar para sí un pueblo propio, seguidor de buenas obras.
Que ſe dió à ſi mismo por noſotros, para redemirnos de toda iniquidad, y limpiar para ſi vn pueblo proprio, seguidor de buenas obras.
Él se entregó a la muerte por nosotros, para rescatarnos de toda maldad y limpiarnos completamente, haciendo de nosotros el pueblo de su propiedad, empeñados en hacer el bien.
Él se entregó a la muerte por nosotros, para rescatarnos de toda maldad y limpiarnos completamente, haciendo de nosotros el pueblo de su propiedad, empeñados en hacer el bien.
Fue él quien se entregó por nosotros a fin de liberarnos de toda maldad y de prepararse un pueblo limpio y elegido, totalmente entregado a la práctica del bien.
quien se dio a sí mismo por nosotros, para REDIMIRNOS DE TODA INIQUIDAD y PURIFICAR PARA SI UN PUEBLO PARA POSESIóN SUYA, celoso de buenas obras.
pues él se entregó a la muerte por nosotros para liberarnos de toda maldad y limpiarnos de todo pecado. También lo hizo para que seamos su propio pueblo, ocupado siempre en hacer buenas obras.
Fue él quien se entregó por nosotros a fin de liberarnos de toda maldad y de prepararse un pueblo limpio y elegido, totalmente entregado a la práctica del bien.
Él se entregó a la muerte por nosotros para poder rescatarnos de todas nuestras iniquidades y convertirnos en un pueblo que fuera suyo, dedicado a hacer el bien.
Él se dio por nosotros, para REDIMIRNOS DE TODA INIQUIDAD y PURIFICAR PARA Sí UN PUEBLO PARA POSESIóN SUYA, celoso de buenas obras.
Él dio su vida para liberarnos de toda clase de pecado, para limpiarnos y para hacernos su pueblo, totalmente comprometidos a hacer buenas acciones.
Él se entregó por nosotros para rescatarnos de toda maldad y purificar para sí un pueblo elegido, dedicado a hacer el bien.
Quien se dio a sí mismo por nosotros para librarnos de toda iniquidad, y purificar para sí un pueblo escogido, celoso de buenas obras.
quien se dio a sí mismo por nosotros para redimirnos de toda iniquidad y purificar para sí mismo un pueblo propio, celoso de buenas obras.
quien se dio a sí mismo por nosotros para redimirnos de toda iniquidad y purificar para sí un pueblo propio, celoso de buenas obras.
Que se dió á sí mismo por nosotros para redimirnos de toda iniquidad, y limpiar para sí un pueblo propio, celoso de buenas obras.
Él quiso morir para rescatarnos de todo lo malo y para purificarnos de nuestros pecados. Al hacerlo, nos convirtió en su pueblo, en un pueblo decidido a hacer el bien.
Él quiso morir para rescatarnos de todo lo malo y para purificarnos de nuestros pecados. Al hacerlo, nos convirtió en su pueblo, en un pueblo decidido a hacer el bien.
El versiculo Tito, 2:14 de La Sagrada Biblia consiste en algo que nos conviene tener siempre presente a fin de meditar en torno a él.Probablemente deberíamos hacernos la pregunta ¿Qué quiso proponernos Dios Padre con el versículo Tito, 2:14? ¿En qué momentos de nuestra vida diaria tenemos la oportunidad de hacer valer lo que hemos llegado a saber gracias al versículo Tito, 2:14 de La Biblia?
El hecho de reflexionar en relación con el versículo Tito, 2:14 es un gran aporte que nos permite a ser mejores cristianos y a avanzar en nuestro camino hacia la Gracia de Dios, esa es la cuestión por la cual es aconsejable recurrir al versículo Tito, 2:14 siempre que pueda servirnos de guía para saber qué pasos dar o para traer paz a nuestras almas.