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La sabiduría de Salomón (3,1—5,14)
El sueño de Gabaón
(2 Cr 1,6b-13)
1Salomón emparentó con el faraón, rey de Egipto#3,1: el faraón rey de Egipto: Aunque no aparece su nombre, el faraón aludido podría ser Psusenas II, último rey de la dinastía XXI, o Sisac I, primer faraón de la dinastía XXII. Este matrimonio pone de relieve el prestigio internacional del nuevo rey y contrasta con otros emparentamientos internacionales que serán enjuiciados negativamente (11,1-2)., casándose con una hija suya, a la que llevó a la ciudad de David mientras terminaba de construir su palacio, el Templo del Señor y las murallas de Jerusalén.#7,8.
2En aquellos días, como aún no se había construido el Templo en honor del Señor, la gente seguía ofreciendo sacrificios en los santuarios locales#3,2: santuarios locales: Ver 1 Sm 9,12 y nota..#1 Sm 9,12-13. 3Salomón amaba al Señor, siguiendo las instrucciones de su padre David. Sin embargo, también él subía a ofrecer sacrificios y a quemar incienso en los santuarios locales.
4El santuario principal estaba en Gabaón, y el rey fue allí a ofrecer mil víctimas en holocausto. 5Por la noche el Señor se apareció allí en sueños a Salomón y le dijo:
— Pídeme lo que quieras.
6Salomón respondió:
— Tú trataste a tu siervo, mi padre David, con especial favor, pues él actuó siempre ante ti con fidelidad, justicia y rectitud de corazón; además, le has mantenido ese especial favor dándole un hijo que hoy se sienta en su trono. 7Efectivamente, Señor Dios mío, tú has hecho rey a este tu siervo, como sucesor de mi padre David, aunque soy muy joven e inexperto#3,7: inexperto: Lit. y no sé salir ni entrar.. 8Tu siervo vive en medio del pueblo que elegiste, un pueblo tan numeroso, que no se puede contar ni calcular. 9Dale a tu siervo un corazón atento para gobernar#3,9: gobernar: El hebreo utiliza el verbo safat, que también significa juzgar o administrar justicia (ver 3,11). a tu pueblo y para discernir entre el bien y el mal, pues ¿quién es capaz de gobernar a un pueblo tan importante como el tuyo?#Eclo 47,12-15; Sb 9,4.10-12.
10Al Señor le agradó que Salomón le pidiera eso 11y le dijo:
— Ya que me has pedido eso y no me has pedido larga vida, riquezas o la muerte de tus enemigos, sino inteligencia para administrar justicia, 12te concedo lo que me has pedido: un corazón sabio y prudente, como nadie lo ha tenido antes de ti ni lo tendrá después.#2 Re 5,26; Eclo 2,4-10. 13Y te concedo también lo que no has pedido: riquezas y fama tales como no las tendrá rey alguno mientras tú vivas. 14Y si cumples mi voluntad y guardas mis instrucciones y mandatos, como hizo tu padre David, te daré larga vida#3,14: … larga vida: El versículo 14 (omitido en 2 Cr 1) condiciona el don de la longevidad a la fidelidad de Salomón a la ley. En cambio, los dones de 3,13 son incondicionales..
15Salomón se despertó y comprendió que había sido un sueño. Luego volvió a Jerusalén, se presentó ante el Arca de la alianza del Señor, ofreció holocaustos y sacrificios de comunión e invitó al banquete a todos sus cortesanos.
Salomón, juez sabio#3,16-28: El llamado juicio de Salomón es una demostración práctica de la sabiduría concedida por Dios a Salomón (ver 3,26) en la anterior aparición. Los rasgos básicos de este relato popular están atestiguados en otros textos orientales; quizá por ello los personajes, las dos prostitutas y el rey, no tienen nombre propio. Gracias a su sabiduría, el rey logra salvar una vida inocente, entregando el hijo vivo a su legítima madre.
16Un día acudieron al rey dos prostitutas. Se presentaron ante él 17y una de ellas le dijo:
— Majestad, esta mujer y yo vivimos en la misma casa. Yo di a luz, estando ella en casa, 18y tres días después ella también dio a luz. Estábamos nosotras solas, no había nadie con nosotras en casa: sólo estábamos nosotras dos. 19Una noche murió el hijo de esta mujer, porque se durmió encima de él. 20Entonces ella se levantó de noche y, mientras yo estaba dormida, tomó a mi hijo de mi lado, lo acostó a su lado y luego puso junto a mí a su hijo muerto. 21Cuando me levanté por la mañana a dar el pecho a mi hijo, vi que estaba muerto. Pero a la luz del día lo observé atentamente y descubrí que ese no era el hijo que yo había dado a luz.
22La otra mujer replicó:
— ¡No! Mi hijo es el vivo y el tuyo, el muerto.
Pero la primera insistía:
— ¡No! Tu hijo es el muerto y el mío, el vivo.
Y se pusieron a discutir delante del rey. 23Entonces el rey dijo:
— Una dice: “Mi hijo es este, el que está vivo, y el tuyo es el muerto”. Y la otra replica: “No, tu hijo es el muerto y mi hijo, el vivo”.
24Y añadió:
— Tráiganme una espada.
Le llevaron una espada 25y el rey ordenó:
— Partan en dos al niño vivo y denle una mitad a una y la otra mitad a la otra.
26Entonces la madre del niño vivo, profundamente angustiada por su hijo, suplicó al rey:
— Majestad, denle a ella el niño vivo. ¡No lo maten!
La otra, en cambio, decía:
— ¡Ni para ti ni para mí! ¡Que lo partan!
27Entonces el rey sentenció:
— Denle a aquella mujer el niño vivo y no lo maten, porque esa es su madre.
28Al enterarse de la sentencia que había dictado el rey, todo Israel sintió respeto por él, pues comprendieron que estaba dotado de una sabiduría excepcional#3,28: dotado de una sabiduría excepcional: Lit. había una sabiduría de Dios dentro de él. para hacer justicia.
Desde el inicio de los tiempos Dios se comunica con nosotros. Para ello la sagrada Biblia es un vehículo muy poderoso, ya que es la palabra del Señor plasmada en negro sobre blanco. Como ya sabrás, existen varias versiones de las Sagradas Escrituras, hechas en pos de una mejor comprensión de la palabra del Señor. En la versión 'La Biblia Hispanoamericana Traducción Interconfesional versión hispanoamericana' encontramos que el capítulo 3 del 1 Reyes se nos muestra de la forma que podemos ver a continuación.
El libro 1 Reyes de la Biblia tiene 22 capítulos. Y en el capítulo 3 podemos encontrar 28 versículos, en los que Dios nos revela sus enseñanzas y nos indica a través de su inmensa sabiduría, amor y bondad, la forma en la que debemos obrar y acercarnos a Él.
No nos cabe duda de que leyendo el capítulo 3 del libro 1 Reyes de la versión 'La Biblia Hispanoamericana Traducción Interconfesional versión hispanoamericana' de la Sagrada Biblia te será fácil comprender como nuestro amado Padre nunca nos deja solos, y que en los textos que dejó para nosotros es posible hallar todas las respuestas que necesitamos. Recuerda que siempre puedes leer el capítulo 3 en alguna de las otras versiones de la Biblia que tenemos para ti, aunque es un ejercicio muy interesante que hayas optado por leer ahora el capítulo 3 de la versión 'La Biblia Hispanoamericana Traducción Interconfesional versión hispanoamericana' de la Santa Biblia.