14
Reparto entre las tribus del oeste del Jordán
1Esta es la heredad que recibieron los israelitas en el país de Canaán, heredad que les repartieron el sacerdote Eleazar#14,1: Eleazar: Hijo de Aarón, le sucedió como sumo sacerdote (ver Nm 20,25-28). y Josué, hijo de Nun, y los cabezas de familia de las tribus de Israel. 2El reparto a las nueve tribus de Israel y a la media tribu de Manasés se hizo a suertes, como el Señor había dispuesto por medio de Moisés. 3Porque Moisés había dado ya su heredad a las dos tribus y media en Transjordania. A los levitas no les asignó heredad entre las otras tribus. 4En cuanto a los descendientes de José, vinieron a formar dos tribus: Manasés y Efraín. A los levitas no se les dio parte alguna de territorio, sino sólo ciudades donde residir, con los pastos correspondientes#14,4: los pastos correspondientes: Es decir, lugares en terrenos comunales donde pudieran pastar los ganados propiedad de los levitas (ver Jos 21). para los ganados de su propiedad. 5Los israelitas hicieron el reparto de la tierra tal como el Señor había mandado a Moisés.
Hebrón como heredad de Caleb
6Los descendientes de Judá se presentaron a Josué en Guilgal. Y Caleb, hijo de Jefuné el queniceo, le dijo:
— Ya sabes lo que le encargó el Señor a Moisés, el hombre de Dios, acerca de ti y de mí en Cadés Barnea. 7Cuarenta años tenía yo cuando Moisés, siervo del Señor, me envió desde Cadés Barnea a explorar esta tierra y yo le di mi informe con toda sinceridad. 8Los hermanos que me habían acompañado desanimaron al pueblo, pero yo me mantuve fiel al Señor, mi Dios. 9Aquel día Moisés me hizo este juramento: “Te juro que la tierra que han pisado tus pies será heredad tuya y de tus descendientes para siempre, porque has sido fiel al Señor mi Dios”. 10Ahora pues, mira cómo el Señor me ha conservado la vida, según lo prometió. Hace cuarenta y cinco años que el Señor dijo esto a Moisés, cuando Israel iba por el desierto, y ahora tengo ochenta y cinco años. 11Todavía estoy tan fuerte como el día en que Moisés me encargó aquella misión. Conservo todo mi vigor de entonces para combatir y para moverme por doquier#14,11: para moverme por doquier: Lit. para salir y entrar (ver Nm 27,17; 1 Re 3,7).. 12Así que dame esta montaña que el Señor me prometió aquel día. Tú oíste aquel día cómo hay en ella anaquitas#14,12: anaquitas: Ver nota a Jos 11,21. y ciudades grandes y fuertes. Que el Señor esté conmigo y yo los expulsaré como él me lo prometió.#11,21 y nota; Nm 13,28.
13Josué bendijo a Caleb, hijo de Jefuné, y le dio Hebrón en heredad. 14Por eso Hebrón sigue siendo, hasta el día de hoy, heredad de Caleb, hijo de Jefuné el queniceo, por haber sido fiel al Señor, Dios de Israel. 15El nombre primitivo de Hebrón era Quiriat Arbá#14,15: Quiriat Arbá: Es decir, “ciudad de Arbá” que corresponde a Hebrón (ver Gn 23,2; Jos 10,36).. Arbá había sido el hombre más alto de los anaquitas.
Y, concluida la conquista, el país quedó en paz.
Desde el inicio de los tiempos Dios se comunica con nosotros. Para ello la sagrada Biblia es un vehículo muy poderoso, ya que es la palabra del Señor plasmada en negro sobre blanco. Como ya sabrás, existen varias versiones de las Sagradas Escrituras, hechas en pos de una mejor comprensión de la palabra del Señor. En la versión 'La Biblia Hispanoamericana Traducción Interconfesional versión hispanoamericana' encontramos que el capítulo 14 del Josué se nos muestra de la forma que podemos ver a continuación.
El libro Josué de la Biblia tiene 24 capítulos. Y en el capítulo 14 podemos encontrar 15 versículos, en los que Dios nos revela sus enseñanzas y nos indica a través de su inmensa sabiduría, amor y bondad, la forma en la que debemos obrar y acercarnos a Él.
No nos cabe duda de que leyendo el capítulo 14 del libro Josué de la versión 'La Biblia Hispanoamericana Traducción Interconfesional versión hispanoamericana' de la Sagrada Biblia te será fácil comprender como nuestro amado Padre nunca nos deja solos, y que en los textos que dejó para nosotros es posible hallar todas las respuestas que necesitamos. Recuerda que siempre puedes leer el capítulo 14 en alguna de las otras versiones de la Biblia que tenemos para ti, aunque es un ejercicio muy interesante que hayas optado por leer ahora el capítulo 14 de la versión 'La Biblia Hispanoamericana Traducción Interconfesional versión hispanoamericana' de la Santa Biblia.