1 Juan, 3:13
Hermanos míos, no se extrañen si los que son del mundo los odian.
Hermanos míos, no os maravilléis si el mundo os aborrece.
Hermanos míos, no os extrañéis si el mundo os aborrece.
Hermanos míos, no os extrañéis si el mundo os odia.
Hermanos míos, no os maravilléis si el mundo os aborrece.
Hermanos mios, no os marauilleys ſi el mundo os aborrece.
Hermanos míos, no se extrañen si los que son del mundo los odian.
Hermanos míos, no se extrañen si los que son del mundo los odian.
No se extrañen, hermanos, si el mundo los aborrece.
Hermanos, no os maravilléis si el mundo os odia.
Hermanos, no se sorprendan si la gente del mundo los odia.
No se extrañen, hermanos, si el mundo los aborrece.
Así que, hermanos, no les extrañe que el mundo los aborrezca.
Hermanos, no se maravillen si el mundo los odia.
Así que, amados hermanos, no se sorprendan si el mundo los odia.
Hermanos, no se extrañen si el mundo los odia.
Hermanos, no se asombren si el mundo los aborrece.
Y no se maravillen, hermanos, si el mundo los aborrece.
Hermanos míos, no se extrañen si el mundo los odia.
Hermanos míos, no os maravilléis si el mundo os aborrece.
Mis queridos amigos, no se extrañen si los pecadores de este mundo los odian.
Mis queridos amigos, no se extrañen si los pecadores de este mundo los odian.
El versiculo 1 Juan, 3:13 de La Biblia consiste en algo que hay que tomar constantemente en cuenta con el propósito de hacer una reflexión en torno a él.Quizás deberíamos hacernos la pregunta ¿Qué pretendía decirnos Dios con el versículo 1 Juan, 3:13? ¿Cuáles serán las coyunturas de nuestro día a día en que seremos capaces de aprovechar lo que hemos alcanzado a saber gracias al versículo 1 Juan, 3:13 de La Biblia?
Dedicar tiempo a la meditación sobre el versículo 1 Juan, 3:13 nos resulta fundamental para llegar a a ser capaces de acercarnos más al mensaje de Nuestro Señor y a acercarnos más a Dios, por ese motivo es útil acudir al versículo 1 Juan, 3:13 todas y cada una de las veces que nos pueda servir de guía de modo que podamos saber en qué forma acturar o para traer la tranquilidad a nuestros corazones y almas.
