Entonces el rey se puso a pensar: «Esta dice que su hijo es el que está vivo, y que el muerto es el de la otra; ¡pero la otra dice exactamente lo contrario!»
El rey entonces dijo: Esta dice: Mi hijo es el que vive, y tu hijo es el muerto: y la otra dice: No, mas el tuyo es el muerto, y mi hijo es el que vive.
El rey entonces dijo: Esta dice: Mi hijo es el que vive, y tu hijo es el muerto; y la otra dice: No, mas el tuyo es el muerto, y mi hijo es el que vive.
El rey entonces dijo: «Esta afirma: “Mi hijo es el que vive y tu hijo es el que ha muerto”; la otra dice: “No, el tuyo es el muerto y mi hijo es el que vive.”»
El rey entonces dijo: Esta dice: Mi hijo es el que vive, y tu hijo es el muerto; y la otra dice: No, mas el tuyo es el muerto, y mi hijo es el que vive.
El Rey entonces dixo: Esta dize, Mi hijo es el que biue, y tu hijo es el muerto. Y la otra dize, No, mas el tuyo es el muerto, y mi hijo es el que biue
Entonces el rey se puso a pensar: «Ésta dice que su hijo es el que está vivo, y que el muerto es el de la otra; ¡pero la otra dice exactamente lo contrario!»
Entonces el rey se puso a pensar: «Esta dice que su hijo es el que está vivo, y que el muerto es el de la otra; ¡pero la otra dice exactamente lo contrario!»
Entonces el rey dijo: — Una dice: “Mi hijo es este, el que está vivo, y el tuyo es el muerto”. Y la otra replica: “No, tu hijo es el muerto y mi hijo, el vivo”.
Entonces el rey dijo: Esta dice: «Este es mi hijo que está vivo y tu hijo es el muerto»; y la otra dice: «No, porque tu hijo es el muerto y mi hijo es el que vive».
El rey pensó: «Esta mujer dice que su bebé es el que está vivo y el de la otra es el que está muerto. La otra afirma lo contrario, que el suyo es el que está vivo y que el que está muerto es de esta m
Entonces el rey dijo: —Una dice: «Mi hijo es este, el que está vivo, y el tuyo es el muerto». Y la otra replica: «No, tu hijo es el muerto y mi hijo, el vivo».
Entonces el rey dijo: ―Aclaremos las cosas: Ambas quieren el niño vivo, y cada una dice que el niño muerto pertenece a la otra.
Entonces el rey dijo: «Esta dice: “Este es mi hijo que está vivo y tu hijo es el muerto”; y la otra dice: “No, porque tu hijo es el muerto y mi hijo es el que vive” ».
Entonces el rey dijo: «Aclaremos los hechos. Las dos afirman que el niño que está vivo es suyo, y cada una dice que el que está muerto pertenece a la otra.
El rey deliberó: «Una dice: “El niño que está vivo es el mío y el muerto es el tuyo”. Y la otra dice: “¡No es cierto! El niño muerto es el tuyo y el que está vivo es el mío”».
Entonces el rey dijo: Esta dice: Mi hijo es el que vive, y tu hijo es el muerto. Y la otra dice: ¡No! Sino tu hijo es el muerto, y mi hijo el vivo.
Entonces el rey dijo: —Esta dice: “Mi hijo es el que vive, y tu hijo es el muerto”; y la otra dice: “¡No! Sino que tu hijo es el muerto, y mi hijo es el que vive”.
Entonces el rey dijo: «Una de ustedes afirma que su hijo está vivo, y que el niño muerto es de la otra; y la otra afirma que el niño vivo es el suyo, y que el niño muerto es de la otra.»
El rey entonces dijo: Esta dice: Mi hijo es el que vive, y tu hijo es el muerto: y la otra dice: No, mas el tuyo es el muerto, y mi hijo es el que vive.
Entonces Salomón dijo: —Una de ustedes dice: “Mi hijo está vivo, y el tuyo muerto”. Y la otra contesta: “No, el niño muerto es el tuyo, y el mío es el que está vivo”.
Entonces Salomón dijo: —Una de ustedes dice: “Mi hijo está vivo, y el tuyo muerto”. Y la otra contesta: “No, el niño muerto es el tuyo, y el mío es el que está vivo”.
El versiculo 1 Reyes, 3:23 de La Biblia es algo que es aconsejable tener constantemente presente con el objetivo de analizarlo y pensar acerca de él.Tal vez deberíamos hacernos la pregunta ¿Qué trataba de decirnos el Señor con el versículo 1 Reyes, 3:23? ¿En qué coyunturas de nuestra vida diaria tenemos la oportunidad de recurrir a aquello que hemos aprendido gracias al versículo 1 Reyes, 3:23 de La Sagrada Biblia?
Hacer un análisis profundo sobre el versículo 1 Reyes, 3:23 es un gran aporte que nos permite a ser mejores cristianos y a aproximarnos más a Dios, por ese motivo es aconsejable apoyarse en el versículo 1 Reyes, 3:23 cuando creamos que nos pueda servir de guía y así saber en qué forma acturar o para traer paz a nuestro espíritu.