10 (9) Pero ten en cuenta que daré como provisiones para tus trabajadores, los leñadores que corten la madera, cuatro millones cuatrocientos mil litros de trigo, igual cantidad de cebada, cuatrociento
Y he aquí para los operarios tus siervos, cortadores de la madera, he dado veinte mil coros de trigo en grano, y veinte mil coros de cebada, y veinte mil batos de vino, y veinte mil batos de aceite.
Y he aquí, para los trabajadores tus siervos, cortadores de madera, he dado veinte mil coros de trigo en grano, veinte mil coros de cebada, veinte mil batos de vino, y veinte mil batos de aceite.
Para tus siervos, los que trabajen cortando la madera, daré veinte mil coros de trigo en grano, veinte mil coros de cebada, veinte mil batos de vino y veinte mil batos de aceite.»
Y he aquí para los cortadores, los cortadores de la madera, tus esclavos, he dado veinte mil coros de trigo en grano, y veinte mil coros de cebada, y veinte mil batos de vino, y veinte mil batos de ac
Y heaqui para los cortadores, los cortadores de la madera, tus sieruos, hé dado veynte mil coros de trigo en grano, y veynte mil coros de ceuada, y veynte mil batos de vino, y veynte mil batos de azey
Entonces Hiram, rey de Tiro, le envió a Salomón una carta en la que le decía: «El Señor te ha hecho rey de los israelitas, porque ama a su pueblo.»
10 (9) Pero ten en cuenta que daré como provisiones para tus trabajadores, los leñadores que corten la madera, cuatro millones cuatrocientos mil litros de trigo, igual cantidad de cebada, cuatrociento
Jirán, rey de Tiro, respondió a Salomón con una carta en la que le decía: “Por amor a su pueblo, el Señor te ha convertido en su rey.
Y he aquí, daré a tus siervos, los trabajadores que cortan la madera, veinte mil coros de trigo en grano, y veinte mil coros de cebada, y veinte mil batos de vino, y veinte mil batos de aceite.
Les pagaré a tus hombres 9000 toneladas de trigo, 9000 toneladas de cebada, 440 000 litros de vino y 440 000 litros de aceite de oliva».
Jirán, rey de Tiro, respondió a Salomón con una carta en la que le decía: «Por amor a su pueblo, el Señor te ha convertido en su rey.
En cuanto al salario, mi propósito es pagar a tus hombres con veinte mil cargas de trigo, veinte mil cargas de cebada, veinte mil medidas de vino, y veinte mil medidas de aceite de oliva».
Por mi parte yo daré a tus siervos, los trabajadores que cortan la madera, 20,000 coros (4.4 millones de litros) de trigo en grano, y 20,000 coros de cebada, y 20,000 batos (444,000 litros) de vino, y
Para quienes corten la madera, enviaré como pago 100.000 canastas de trigo molido, 100.000 canastas de cebada, 420.000 litros de vino y 420.000 litros de aceite de oliva».
A tus siervos que corten la madera les daré veinte mil cargas de trigo, veinte mil cargas de cebada, veinte mil medidas de vino, y veinte mil medidas de aceite».
Mira, para el sustento de tus esclavos que cortan y labran la madera doy 4.400.000 litros de trigo, 4.400.000 litros de cebada, 440.000 litros de vino y 440.000 litros de aceite.
He aquí que para tus siervos que cortan y labran la madera, yo doy cuatro millones cuatrocientos mil kilos de trigo para el sustento, cuatro millones cuatrocientos mil kilos de cebada, cuatrocientos c
Toma en cuenta que a tus siervos que corten la madera les daré seis mil toneladas de trigo en grano, seis mil toneladas de cebada, seiscientos mil litros de vino, y seiscientos mil litros de aceite.»
Y he aquí para los operarios tus siervos, cortadores de la madera, he dado veinte mil coros de trigo en grano, y veinte mil coros de cebada, y veinte mil batos de vino, y veinte mil batos de aceite.
2-18 (1-17) Por ello le envió este mensaje a Hiram, rey de Tiro: «Yo sé que tú le enviaste madera de cedro a David, mi padre, para que construyera su palacio. Ahora te pido que me ayudes. Voy a constr
2-18 (1-17) Por ello le envió este mensaje a Hiram, rey de Tiro: «Yo sé que tú le enviaste madera de cedro a David, mi padre, para que construyera su palacio. Ahora te pido que me ayudes. Voy a constr
Nos conviene tomar continuamente en cuenta el versículo 2 Crónicas, 2:10 de La Sagrada Biblia con el propósito de hacer una reflexión en torno a él.Probablemente deberíamos hacernos la pregunta ¿Qué trataba de proponernos Dios Nuestro Señor con el versículo 2 Crónicas, 2:10? ¿Cuáles son las ocasiones de nuestra vida cotidiana en que tenemos la oportunidad de hacer valer lo que aprendemos gracias al versículo 2 Crónicas, 2:10 de la Santa Biblia?
Hacer un análisis profundo sobre el versículo 2 Crónicas, 2:10 nos supone una ayuda a ser capaces de acercarnos más al mensaje de Nuestro Señor y a elevar nuestra alma hacia Dios, por eso es aconsejable servirse del versículo 2 Crónicas, 2:10 todas las veces que nos pueda servir de guía y así saber cómo proceder o para traer paz a nuestros corazones y almas.