18 (17) De ellos reclutó setenta mil cargadores, ochenta mil canteros en la montaña y tres mil seiscientos capataces que hicieran trabajar a la gente.
Y señaló de ellos setenta mil para llevar cargas, y ochenta mil que cortasen en el monte, y tres mil y seiscientos por sobrestantes para hacer trabajar al pueblo.
Y señaló de ellos setenta mil para llevar cargas, y ochenta mil canteros en la montaña, y tres mil seiscientos por capataces para hacer trabajar al pueblo.
Y señaló de ellos setenta mil para llevar cargas, ochenta mil para las canteras en las montañas, y tres mil seiscientos como capataces para hacer trabajar al pueblo.
Y señaló de ellos setenta mil para llevar cargas, y ochenta mil que cortaran piedra en el monte, y tres mil seiscientos por sobrestantes para hacer trabajar al pueblo.
Y hizo de ellos setenta mil para lleuar cargas, y ochenta mil que cortaſſen piedra en el monte, y tres mil y seys cientos que eran prefectos para hazer trabajar àl pueblo.
I. LOS ORÍGENES DEL MUNDO Y DE LA HISTORIA HUMANA(1—11)La Creación En el comienzo de todo, Dios creó#.1 Creó: heb. bará. En el AT, este verbo tiene por sujeto únic
18 (17) De ellos reclutó setenta mil cargadores, ochenta mil canteros en la montaña y tres mil seiscientos capataces que hicieran trabajar a la gente.
I.— ORIGEN DEL MUNDO Y DE LOS SERES HUMANOS (1—11)Primer relato de la creación#,1—2,4a: Por su forma y estilo, esta primera página de la Biblia es una pieza maestra del art
Puso setenta mil de ellos a llevar cargas, ochenta mil a labrar piedras en los montes y tres mil seiscientos como capataces para hacer trabajar al pueblo.
De ellos, él reclutó a 70 000 para que sirvieran como cargadores, a 80 000 para que sirvieran como canteros en la montaña y a 3600 como capataces para hacer trabajar a la gente.
I. Origen del mundo y de los seres humanos (1–11)Primer relato de la creación (1,1–2,4a) #,4b-25; Jb 38–39; Sal 8; ; Pr 8,22-29; Jn 1,2-3. Cuando Dios, en el principio,creó
De ellos asignó setenta mil como cargadores, a ochenta mil los envió a las montañas a cortar piedras, y a tres mil seiscientos los puso como capataces.
Puso 70,000 de ellos a llevar cargas, 80,000 a labrar piedras en los montes y 3,600 como capataces para hacer trabajar al pueblo.
Asignó a 70.000 como obreros, a 80.000 como cortadores de piedra en la zona montañosa y a 3600 como capataces.
A setenta mil de ellos los puso como cargadores; a ochenta mil, como canteros en las montañas; y a tres mil seiscientos, como capataces para dirigir a los trabajadores.
Designó a 70.000 de ellos como cargadores, a 80.000 para tallar piedras en la región montañosa y a 3.600 supervisores para vigilar la labor de la gente.
De ellos designó a setenta mil cargadores, a ochenta mil canteros en la región montañosa, y a tres mil seiscientos supervisores que hicieran trabajar a la gente.
A setenta mil de ellos los apartó para llevar cargas; a ochenta mil los puso como canteros en la montaña, y a tres mil seiscientos los puso como capataces para hacer trabajar a la gente.
Y señaló de ellos setenta mil para llevar cargas, y ochenta mil que cortasen en el monte, y tres mil y seiscientos por sobrestantes para hacer trabajar al pueblo.
2-18 (1-17) Por ello le envió este mensaje a Hiram, rey de Tiro: «Yo sé que tú le enviaste madera de cedro a David, mi padre, para que construyera su palacio. Ahora te pido que me ayudes. Voy a constr
2-18 (1-17) Por ello le envió este mensaje a Hiram, rey de Tiro: «Yo sé que tú le enviaste madera de cedro a David, mi padre, para que construyera su palacio. Ahora te pido que me ayudes. Voy a constr
El versiculo 2 Crónicas, 2:18 de La Sagrada Biblia consiste en algo que es preciso tener siempre presente de tal forma que podamos hacer una reflexión sobre él.Seguramente deberíamos preguntarnos ¿Qué trataba de manifestarnos Dios, Creador del Cielo y de la Tierra con el versículo 2 Crónicas, 2:18? ¿Cuáles son las ocasiones de nuestro día a día en que podemos recurrir a aquello que hemos alcanzado a saber gracias al versículo 2 Crónicas, 2:18 de Las Sagradas Escrituras?
Discurrir y recapacitar sobre el versículo 2 Crónicas, 2:18 nos supone una ayuda a ser capaces de acercarnos más al mensaje de Nuestro Señor y a elevar nuestra alma hacia Dios, por esa razón es oportuno servirse del versículo 2 Crónicas, 2:18 todas las veces que necesitemos palabras que nos inspiren y guíen de modo que podamos saber qué pasos dar o para traer la serenidad a nuestras almas.