2 Samuel, 22:36
»Tú me proteges y me salvas; tu bondad me ha hecho prosperar.
Tú me diste asimismo el escudo de tu salud, Y tu benignidad me ha acrecentado.
Me diste asimismo el escudo de tu salvación, Y tu benignidad me ha engrandecido.
Me diste el escudo de tu salvación, y tu benignidad me ha engrandecido.
Tú me diste asimismo el escudo de tu salud, y tu mansedumbre me ha multiplicado.
Tu me diſte el escudo de tu salud, y tu mansedumbre me ha multiplicado.
»Tú me proteges y me salvas; tu bondad me ha hecho prosperar.
»Tú me proteges y me salvas; tu bondad me ha hecho prosperar.
Tú me ofreces tu escudo protector y tú benevolencia me engrandece.
Tú me has dado también el escudo de tu salvación, y tu ayuda me engrandece.
Dios mío, me has dado el escudo de tu salvación, y me has ayudado a prosperar.
Tú me ofreces tu escudo protector y tu benevolencia me engrandece.
Tú me has dado el escudo de tu salvación; y tu bondad me hace prosperar.
Tú me has dado también el escudo de Tu salvación, Y Tu ayuda me engrandece.
Me has dado tu escudo de victoria; tu ayuda me ha engrandecido.
Tú me cubres con el escudo de tu salvación; tu bondad me ha hecho prosperar.
Me diste también el escudo de tu salvación Y me engrandeció tu benignidad.
“Me has dado el escudo de tu salvación; tu condescendencia me ha engrandecido.
»Tú me diste el escudo de tu salvación, y con tu bondad me engrandeciste.
Tú me diste asimismo el escudo de tu salud, Y tu benignidad me ha acrecentado.
Tú me das tu protección; me salvas con tu gran poder y me concedes la victoria.
Tú me das tu protección; me salvas con tu gran poder y me concedes la victoria.
El versiculo 2 Samuel, 22:36 de La Santa Biblia consiste en algo que es preciso tomar siempre en cuenta con el propósito de meditar sobre él. ¿Qué intentaba decirnos Dios Padre con el versículo 2 Samuel, 22:36? ¿Cuáles son las ocasiones de nuestro día a día en que tenemos la oportunidad de hacer valer aquello que hemos aprendido gracias al versículo 2 Samuel, 22:36 de Las Sagradas Escrituras?
Dedicar tiempo a la meditación en relación con el versículo 2 Samuel, 22:36 nos supone una ayuda a ser capaces de acercarnos más al mensaje de Nuestro Señor y a aproximarnos más a Dios, esa es la razón por la cual es conveniente acudir al versículo 2 Samuel, 22:36 siempre que nos pueda servir de guía de modo que podamos saber cómo proceder o para traer el sosiego a nuestras almas.
