<

Ezequiel, 12:18

>

Ezequiel, 12:18

«Tú, hombre, tiembla de miedo al comer, y muéstrate angustiado al beber.


Hijo del hombre, come tu pan con temblor, y bebe tu agua con estremecimiento y con anhelo


Hijo de hombre, come tu pan con temblor, y bebe tu agua con estremecimiento y con ansiedad.


«Hijo de hombre, come tu pan con temblor y bebe tu agua con estremecimiento y con ansiedad.


Hijo de hombre, come tu pan con temblor, y bebe tu agua con estremecimiento y con angustia


Hombre, Come tu pan con temblor, y beue tus aguas con estremecimiento y con angustia.


«Tú, hombre, tiembla de miedo al comer, y muéstrate angustiado al beber.


«Tú, hombre, tiembla de miedo al comer, y muéstrate angustiado al beber.


— Hijo de hombre, cuando comas, lo harás atemorizado, y cuando bebas, estarás inquieto y angustiado.


Hijo de hombre, come tu pan con temblor y bebe tu agua con estremecimiento y angustia.


«Hijo de hombre, cuando comas actúa como si estuvieras nervioso y cuando bebas agua actúa como si estuvieras molesto y preocupado


—Hijo de hombre, cuando comas, lo harás atemorizado, y cuando bebas, estarás inquieto y angustiado.


«Hombre mortal, tiembla al comer; toma tu agua como si fuera lo último que te queda


«Hijo de hombre, come tu pan con temblor y bebe tu agua con estremecimiento y angustia.


«Hijo de hombre, estremécete al comer tu alimento; tiembla de miedo al beber tu agua.


«Hijo de hombre, tiembla al comer tu pan, y llénate de espanto y miedo al beber tu agua.


Hijo de hombre, come tu pan con temblor. Bebe tu agua con estremecimiento y angustia.


“Oh hijo de hombre, come tu pan con temblor y bebe tu agua con estremecimiento y angustia.


«Hijo de hombre, come tu pan y bebe tu agua temblando de miedo y de angustia.


Hijo del hombre, come tu pan con temblor, y bebe tu agua con estremecimiento y con anhelo


«Ezequiel, hombre mortal, tiembla de miedo cuando comas tu pan, y bebe tu agua con ansiedad y angustia.


«Ezequiel, hombre mortal, tiembla de miedo cuando comas tu pan, y bebe tu agua con ansiedad y angustia.


Debemos tener en todo momento presente el versículo Ezequiel, 12:18 de La Sagrada Biblia con el propósito de analizarlo y pensar en torno a él.Quizás sería acertado cuestionarse ¿Qué quiso proponernos Dios con el versículo Ezequiel, 12:18? ¿Cuáles serán las coyunturas de nuestro día a día en que podemos poner en práctica lo que hemos llegado a saber gracias al versículo Ezequiel, 12:18 de Las Sagradas Escrituras?

Hacer un análisis profundo acerca de el versículo Ezequiel, 12:18 nos supone una ayuda a ser mejores personas y a elevar nuestra alma hacia Dios, esa es la cuestión por la cual es oportuno acudir al versículo Ezequiel, 12:18 todas y cada una de las veces que precisemos que la palabra de Dios, Nuestro Señor nos indique el camino a seguir de modo que podamos saber cómo actuar o para traer la tranquilidad a nuestros corazones y almas.