Génesis, 16:16
Abram tenía ochenta y seis años cuando Ismael nació.
Y era Abram de edad de ochenta y seis años, cuando parió Agar á Ismael.
Era Abram de edad de ochenta y seis años, cuando Agar dio a luz a Ismael.
Abram tenía ochenta y seis años de edad cuando Agar dio a luz a Ismael.
Y era Abram de edad de ochenta y seis años, cuando Agar dio a luz a Ismael.
Y Abrã era de edad de ochenta y seys años, quando pariò Agar à Ismael.
Abram tenía ochenta y seis años cuando Ismael nació.
Abram tenía ochenta y seis años cuando Ismael nació.
Abrán tenía ochenta y seis años cuando nació Ismael.
Y Abram tenía ochenta y seis años cuando Agar le dio a luz a Ismael.
Abram tenía 86 años de edad cuando Agar dio a luz a su hijo Ismael.
Abrán tenía ochenta y seis años cuando nació Ismael.
Abram tenía ochenta y seis años cuando nació Ismael.
Abram tenía 86 años cuando Agar dio a luz a Ismael.
Abram tenía ochenta y seis años cuando nació Ismael.
Abram tenía ochenta y seis años cuando nació Ismael.
Abram tenía 86 años cuando Agar le dio a luz a Ismael.
Abram tenía ochenta y seis años cuando Agar le dio a luz a Ismael.
Abrán tenía ochenta y seis años de edad cuando Agar dio a luz a Ismael.
Y era Abram de edad de ochenta y seis años, cuando parió Agar á Ismael.
Cuando Abram tenía ochenta y seis años, nació el hijo que tuvo con Agar, y Abram le puso por nombre Ismael.
Cuando Abram tenía ochenta y seis años, nació el hijo que tuvo con Agar, y Abram le puso por nombre Ismael.
Deberíamos tomar continuamente en consideración el versículo Génesis, 16:16 de La Sagrada Biblia de manera que podamos hacer una reflexión sobre él.Tal vez sería bueno preguntarse ¿Qué trataba de manifestarnos Dios Nuestro Señor con el versículo Génesis, 16:16? ¿Cuáles son las ocasiones de nuestra vida cotidiana en que podemos poner en práctica lo que aprendemos gracias al versículo Génesis, 16:16 de La Biblia?
Meditar sobre el versículo Génesis, 16:16 nos es de gran ayuda a ser más agradables a los ojos de el Creador del Cielo y de la Tierra y a elevar nuestra alma hacia Dios, por eso es útil recurrir al versículo Génesis, 16:16 en todas aquellas ocasiones en que pueda servirnos de guía y así saber cómo proceder o para traer el sosiego a nuestros corazones.
