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Génesis, 16:2

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Génesis, 16:2

Entonces le dijo a Abram: —Mira, el Señor no me ha permitido tener hijos, pero te ruego que te unas a mi esclava Agar, pues tal vez tendré hijos por medio de ella. Abram aceptó lo que Sarai le dijo


Dijo, pues, Sarai á Abram: Ya ves que Jehová me ha hecho estéril: ruégote que entres á mi sierva; quizá tendré hijos de ella. Y atendió Abram al dicho de Sarai.


Dijo entonces Sarai a Abram: Ya ves que Jehová me ha hecho estéril; te ruego, pues, que te llegues a mi sierva; quizá tendré hijos de ella. Y atendió Abram al ruego de Sarai.


Dijo Sarai a Abram: —Ya ves que Jehová me ha hecho estéril; te ruego, pues, que te llegues a mi sierva, y quizá tendré hijos de ella. Atendió Abram el ruego de Sarai.


Dijo, pues, Sarai a Abram: He aquí ahora el SEÑOR me ha vedado de dar a luz; te ruego que entres a mi esclava; por ventura tendré hijos de ella. Y escuchó Abram al dicho de Sarai.


Dixo pues Sarai à Abram, He aqui aora Iehoua me ha vedado de parir: ruego te que entres à mi ſierua, por ventura tendré hijos de ella. Y obedecio Abram àl dicho de Sarai.


Entonces le dijo a Abram: —Mira, el Señor no me ha permitido tener hijos, pero te ruego que te unas a mi esclava Agar, pues tal vez tendré hijos por medio de ella. Abram aceptó lo que Sarai le dijo


Entonces le dijo a Abram: —Mira, el Señor no me ha permitido tener hijos, pero te ruego que te unas a mi esclava Agar, pues tal vez tendré hijos por medio de ella. Abram aceptó lo que Sarai le dijo


Y dijo Saray a Abrán: — El Señor no me ha permitido tener hijos; acuéstate con mi esclava y quizás podamos tener familia gracias a ella. Abrán aceptó su propuesta.


Entonces Sarai dijo a Abram: He aquí que el SEÑOR me ha impedido tener hijos. Llégate, te ruego, a mi sierva; quizá por medio de ella yo tenga hijos. Y Abram escuchó la voz de Sarai.


Entonces Saray le dijo a Abram: —Tú sabes que el SEÑOR no me ha permitido tener hijos, así que ten relaciones sexuales con mi esclava. Tal vez yo pueda tener un hijo por medio de ella. Abram hizo lo q


Y dijo Saray a Abrán: —El Señor no me ha permitido tener hijos; acuéstate con mi esclava y quizá podamos tener familia gracias a ella. Abrán aceptó su propuesta.


Saray la tomó y se la llevó a Abram para que durmiera con ella. Saray le dijo a Abram: ―Como el SEÑOR no me ha permitido tener hijos, te ruego que te acuestes con mi esclava, para que yo pueda tener h


Entonces Sarai dijo a Abram: «Mira, el SEÑOR me ha impedido tener hijos. Llégate, te ruego, a mi sierva; quizá por medio de ella yo tenga hijos». Y Abram escuchó la voz de Sarai.


Entonces Sarai le dijo a Abram: «El SEÑOR no me ha permitido tener hijos. Ve y acuéstate con mi sierva; quizá yo pueda tener hijos por medio de ella». Y Abram aceptó la propuesta de Sarai.


Saray le dijo a Abram: —El SEÑOR me ha hecho estéril. Por lo tanto, ve y acuéstate con mi esclava Agar. Tal vez por medio de ella podré tener hijos. Abram aceptó la propuesta que le hizo Saray.


Y Saray dijo a Abram: Mira, YAVÉ me impidió tener hijos. Te ruego que te unas a mi esclava. Quizás los obtenga de ella. Y Abram escuchó la voz de Saray.


Entonces Sarai dijo a Abram: —He aquí que el SEÑOR me ha impedido concebir. Únete, por favor, a mi sierva; quizás yo tenga hijos por medio de ella. Abram hizo caso de las palabras de Sarai.


Entonces Saraí le dijo a Abrán: «Ya ves que el Señor me ha hecho estéril, así que te ruego que te allegues a mi sierva; tal vez tendré hijos de ella.» Y Abrán atendió al ruego de Saraí.


Dijo, pues, Sarai á Abram: Ya ves que Jehová me ha hecho estéril: ruégote que entres á mi sierva; quizá tendré hijos de ella. Y atendió Abram al dicho de Sarai.


Abram tenía ya diez años de vivir en Canaán, y su esposa Sarai aún no había podido tener hijos. Pero como ella tenía una esclava egipcia que se llamaba Agar, le propuso a su esposo: «Abram, como Dios


Abram tenía ya diez años de vivir en Canaán, y su esposa Sarai aún no había podido tener hijos. Pero como ella tenía una esclava egipcia que se llamaba Agar, le propuso a su esposo: «Abram, como Dios


El versiculo Génesis, 16:2 de La Sagrada Biblia es algo que es conveniente tomar siempre en cuenta con el objetivo de meditar sobre él. ¿Qué pretendía proponernos Dios, Creador del Cielo y de la Tierra con el versículo Génesis, 16:2? ¿En qué momentos de nuestra vida cotidiana podemos aplicar lo que hemos llegado a saber gracias al versículo Génesis, 16:2 de Las Sagradas Escrituras?

Discurrir y recapacitar en relación con el versículo Génesis, 16:2 nos resulta fundamental para llegar a a ser mejores cristianos y a elevar nuestra alma hacia Dios, por esa cuestión es oportuno acudir al versículo Génesis, 16:2 en todas aquellas ocasiones en que nos pueda servir de guía y así saber cómo proceder o para traer la serenidad a nuestros corazones.